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23. When the party's over

Alba

El tiempo había pasado rápido sin ningún problema, intentábamos hacer videollamada con Natalia todas las noches antes de que Lea se fuese a dormir para que no notara tanto su ausencia. Esos últimos días había surgido la etapa de preguntas de Lea. Preguntaba por todo, cuestionaba cualquier cosa que se le decía. Quedaban tres días para que llegara Natalia y quería prepararle una sorpresa, una noche para las dos tranquila, salir a cenar, tomar algo y venirnos a casa a pasarlo bien. Pero en ese momento no estaba preparada para dejar a Lea con nadie sin mí a su lado. Miré a la pequeña que estaba medio adormilada en el asiento trasero. No pude evitar sonreír viendo su carita de recién despertada.

"¿Que hago Lea? Por qué mamá se quiere ir a cenar con Natalia y comérsela de postres ¿Pero que hago contigo?" Me reí al ver sus ojos volver a cerrarse por completo.

Los tres días se pasaron veloces, casi ni me acordé que tenía que ir a recoger a Natalia. Corrí cuesta abajo entrando en el colegio entrando en secretaria para pedir que me sacaran a Lea que tenía que llevarmela. Un rato después salieron María y Lea ambas mirándome con cara de que pasa.

"Que tenemos que ir a recoger a Natalia" Dije poniéndome de rodillas a la altura de Lea quien empezó a saltar de arriba a abajo súper ilusionada.

"Nataya Nataya"

"Si Natalia" dije sonriendo cogiéndola en mis brazos, dándole un beso en la mejilla a María y poniéndonos de camino al coche.

"¿Nataya se acuerda de mí?" Me preguntó mientras la ataba en su sillita.

"¿Como no se va a acordar de tí Lea? Claro que se acuerda"

"Ayer cuando estaba en el móvil dijo pero quien es esa niña tan guapa"

No pude evitar reírme y la niña puso un puchero que me dio mucha pena.

"Estaba de broma Lea, era sarcarsmo"

"Arsasmo"

"Casí" sonreí llenándole la cara de besos "¿Vamos a por Natalia?"

Ella asintió y nos pusimos camino al aeropuerto. Llegamos un poco temprano así que nos pusimos a mirar los aviones por el cristal, Lea estaba súper entusiasmada.

"Yo quero avion"

"Cuando mamá guarde dinero nos vamos en avión vale"

"Vale"

"También os podéis venir conmigo a Nueva York en dos meses" Al escuchar su voz una sonrisa enorme apareció en mi cara, me giré corriendo saltando encima suya abrazándola besando sus labios una y otra vez.

"Joder cuanto te he echado de menos"

"Y a ti mi amor" Me besó los labios con cuidado antes de soltarme en el suelo y girarse para mirar a Lea que la miraba con una cara un tanto extraña. "¿Que le pasa?" Giró la cabeza mirándome a mi preocupada.

"Lea ¿Por qué no abrazas a Natalia?" Le pregunté agachándome a su altura, pero ella solo la siguió mirando. "No lo entiendo estaba súper ilusionada" dirigí mi mirada a Natalia que ahora tenía el rostro serio, bastante triste. "Lea"

"No se acuerda de mi" susurró poniéndose a llorar.

"¿Pero mi vida como vas a pensar eso?" Le preguntó Natalia cogiéndola en sus abrazos abrazándola fuerte. "Claro que me acuerdo de ti"

"¿de vedad?"

"Pues claro" La sujetó en sus brazos, Lea apoyó su cabecita en el cuello de Natalia intentando abrazarla fuerte con sus pequeños brazos.