Alba cometió muchos errores en su vida, su vida bohemia y de locura le trajeron un regalo una noche. Hace dos años y medio Alba tuvo a Lea, como ha ella le gustaba llamarla el amor de su vida. A pesar de lo liberal que Alba había sido siempre y esta...
Para cuando Alba se durmió yo tenía la camiseta empapada de todo lo que ella había llorado tumbada sobre mi pecho. Antes de echarme yo a dormir me levanté con cuidado yendo hacia el cuarto de Lea para asegurarme de que estaba todo bien, cuando la vi ahí tan sola y tan indefensa no pude pararme a mi misma de cogerla y llevarla a nuestra cama.
"¿Qué pasa? ¿Qué pasa?" se despertó Alba alarmada al notar el cuerpo de Lea agarrado al suyo.
"shh" le dije haciendo que volviese a tumbarse abrazando el pequeño cuerpo que tenía a su lado pero sin dejar de mirarme "He ido a verla y la he visto muy solita y tan bonita que me ha dado pena y me la he traído" susurré metiéndome en la cama al otro lado de Lea.
Alba se estiró un poco con cuidado dejando un beso sobre mis labios.
"Te quiero tantísimo" sonrió cerrando los ojitos.
"Joder Alba yo te amo tanto que me duele" me susurré más para mi misma que para que me escuchara ella.
1 semana más tarde
"Mamis mida lo que bujado Rosi pada mi" salió gritando Lea del colegio tirándose a mi brazos para darme un beso enseñándome un dibujo de lo que parecían dos personas dándose un beso.
"¿Y estas quienes son?" le pregunté apuntando los dos círculos con ojos de la hoja.
"Rosi y do mami"
"Pero bueno ¿Y porque se están dando un besito?"
"Poque rosi y do nos damos besitos mami"
"¿Qué es tu novia?" le pregunté realmente intrigada ya que la niña nos había hablado de algunos amigos de clase pero nunca de esta tal Rosi.
"No mamí ed mi miga de alma"
"Touché" me reí cogiendo a la pequeña en brazos y entrando hacia el colegio donde Alba estaba reunida con la directora para concertar una cita con el psicólogo infantil para que le hicieran a Lea las pruebas de inteligencia que tanto estaban insistiendo en que le hiciéramos y como no había habido ningún señal del hombre Alba dijo que vale.
Lea y yo nos sentamos en su clase coloreando con la Mari mientras Alba acababa.
"¿Como vas con Irene?" Le pregunté sabiendo que ahora Irene estaba pasando una fase en la que quería estar solo con María.
"Pues ahí vamos, ahora quiere estar conmigo pero le toca con Pablo hasta la semana que viene, el otro día ganó una medalla en una carrera" sacó el móvil enseñando una foto de la pequeña.
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"Aii mari está preciosa pero ¿Correr? esa hija no es tuya tía, Marta siempre me ha dicho que odias todo lo que tenga que ver con el deporte" María se rió guardando el móvil.
"Yo tampoco sé a quien ha salido Nati, yo no la entiendo porque le gusta sufrir pero es lo que le gusta a la niña" justo cuando terminó de hablar ambas nos giramos ya que el sonido de la puerta nos había llamado la atención.
