Los ojos de mi ángel. (OffGun) ❤️

Te tengo.

Gun

Perdí a mi madre de la manera más cruel que puede existir. El visualizar como poco a poco sus fuerzas iban apagándose, me rompió por dentro. Han pasado mas de diez años y el dolor a pesar de que ya ha logrado cesar un poco, la herida que dejó en mi jamás podré repararla.
Perder el sentido de mi vista me terminó por enseñar que podemos perder todo en cualquier instante..
He aprendido a sobre llevar mi ceguera, aunque he llegado a agradecer el hecho de que ahora ya no puedo ver la maldad que tiene este mundo, sí... es lo que más agradezco.

Narradora

Con el paso de los años Gun aprendió a desarrollar más sus otros sentidos, entró a la secundaria y así a la universidad. Aprendió a usar otros métodos de aprendizaje y así poco a poco se fue convirtiendo en uno de los promedios más altos de la generación. Era elogiado por maestros y estudiantes que aplaudian su tenacidad y ganas de aprender.

Al ser tan buen estudiante, se hizo merecedor de una estancia en una de las agencias de viajes mas importantes de Tailandia. Era tan poderosa que tenia franquicias en varios puntos de Asia; Corea del sur, Japón, China, entre otras. Al ser una empresa ya catalogada como las mejores en el área, era más frecuentada por personas de alto estatus social.

El más grande sueño de Gun cuando pequeño, era viajar alredor de todo el mundo, conocer costumbres, tradiciones, personas. Pero aquel sueño fue arrebatado por esos hombres.
Aquel vacío sólo pudo ser llenado por el hecho de querer convertirse en un agente de viajes, pero no solo eso, Gun desarrollo la habilidad de saber que destino era el indicado para los clientes con solo olfatear su aroma, escuchar su voz y su risa.

"Si yo no puedo salir y conocer el mundo, haré que las demás personas tengan el viaje de sus sueños."

Primer dia...

Un frío helado corrió por la nuca de Gun, el miedo se había apoderado de él. Pensó en renunciar y no tomar la estadía que se le ofreció en aquella importante empresa, pero algo ocurrió, recordó las palabras de su madre "No tengas miedo, lucha por tus sueños y conviértete en el hombre que tanto deseas que vea mamá, yo estaré cerca observando."

Sólo eso necesitó, Gun entró al enorme edificio y con ayuda de la recepcionista se dirigió al ascensor indicando que bajaría en el piso 16 en donde alguien lo estaría esperando para llevarlo a su lugar de capacitación.

El ascensor estaba a punto de cerrar cuando escuchó como alguien lo detenía.

El ascensor se cerró y el silencio gobernó aquel trayecto, los segundos parecían horas. Quizá era el miedo y la inseguridad. No hubo ninguna palabra emitida, pero no hizo falta, no sería la ultima vez que sus caminos se cruzarían.

-"Piso 16" -indicó aquél extraño a Gun.

-!Oh! Aquí bajo, ¡Gracias! - expresó apresurandose a salir, no sin antes casi caer...

Sí, casi por que unos brazos rodearon la cintura de Gun...

-Cuidado muchacho, casi caes - pronunció aún con sus manos amarradas a la cintura de Gun - pero te tengo.

Gun sintió unas manos rodeando su cintura, mientras su respiración rozaba su oreja y su perfume se impregnada en sus fosas nasales.

-Gra... ¡Gracias! - emitió y sintió como su cuerpo se estremeció por el contacto - tendré más cuidado - dijo soltandose de aquellas manos y huyendo sin dejarlo continuar.

Un rojo encendido se posó en sus mejillas con hoyuelos, su cuerpo temblaba y no podía dejar de escuchar su voz, esa voz... Jamás podría olvidar aquella voz.

Off

Apenas iba comenzando mi día cuando ya quería que terminara. Un tráfico terrible y un calor insoportable combinado con una mala noche me hacían darme cuenta que no era feliz, esta no es la vida que quería tener hace 10 años atrás.

Un poco más y pierdo el ascensor, por fortuna lo alcancé, noté a un niño a un costado de mi, no lo observé bien, pero parecía nuevo por que no había notado que era donde debía bajar hasta que se lo hice saber, pero antes de bajar por poco cae al querer salir deprisa.

-Cuidado muchacho, casi caes - sentí su cuerpo tensarse en cuanto lo tomé por la cintura - pero te tengo.

-Gra... ¡Gracias! - apenas logré escuchar su voz - tendré más cuidado - dijo para después soltarse de mi agarré y salir del ascensor casi corriendo.

El ascensor se cerró mientras visualizaba su pequeña silueta desapareciendo entre las puertas.

Sólo unos minutos bastaron para cambiar mi humor... si siempre será así, espero verte todos los días -pensé mientras una sonrisa se me escapaba de los labios -.

Me encantaría - dije para mi mismo - realmente me encantaría.

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