Los ojos de mi ángel. (OffGun) ❤️

Tarde.

Narra Pete.

Me hería, no saber absolutamente nada de él, dolía profundamente. Pero no estaba preparado para saber tal atrocidad.
Debí detenerme, pero ahora esto se ha vuelto más fuerte.

Siento un gran dolor de saber que vive violencia y es víctima de su propio padre. Ahora lo entiendo todo, entiendo su miedo, entiendo sus ojos perdidos y entiendo aquel golpe en su rostro.

Veo como la chica le entrega la bolsa y se va dejándolo confundido, mientras yo me escondo a lo lejos. Le he comprado un uniforme nuevo, el suyo se arruinó aquel día.

Hoy lo vuelvo a ver desde esa ultima vez. Camina extraño, sus pasos son como si no tuvieran un rumbo fijo. Su rostro esta cabizbajo, sus lentes no me permiten ver sus ojos y mucho menos esos mechones oscuros de cabello.

Estoy dolido, por que puedo notar que es menor a Jumpol y eso me provoca un dolor más grande.

Quiero alejarlo de ese lugar, quiero llevarlo a un sitio en donde ya no lo sigan lastimando. Pero es una locura, él seguramente no recuerda mi rostro por qué no es como si me haya visto en aquel tropiezo, no me miró, es muy probable que haya olvidado lo poco que vio de mi.

Pero debía ayudarlo, no podía simplemente dejarlo y seguir viendo como su vida se apagaba por culpa de sus padres.

Narra New.

No entendía lo que estaba pasando, su simple abrazo hizo colapsar todo lo que tenía planeado para este día. No podía reaccionar, sentía su voz hablándome muy lejos, como si su cuerpo no estuviese pegado al mío.

Lo escuchaba, pero no comprendía lo que decía como si su voz estuviese lejana y yo dentro de un frasco que me impedía comprender sus palabras.

Mi cuerpo tembló un poco, ni siquiera yo podía explicar tal reacción, solo me parecía como un sueño. Una mala jugada del destino que lo ponía hoy frente a mi.

—¿Por qué no volviste? — sostuvo mi rostro entre sus manos haciendo que mis ojos por fin conectaran con los suyos — te busqué tantas veces, pero desapareciste.

El ruido de la gente a nuestro al rededor me hizo reaccionar de algún modo. Miré a todos lados, estábamos siendo observados por todos en el lugar.

Me alejé de él como pude.

—Vamos... ¿Qué haces aquí? — pregunté acomodando mi saco mientras lo llevaba a un lugar más vacío.

—Vine a una junta por trabajo... pero aún no me respondes ¿Por qué desapareciste?

—¿Por qué sigues preguntando?

—Solo quiero saber dónde había estado quien no salió de mi cabeza en estos meses.

Mis piernas temblaron al escucharlo, mi garganta se sintió seca, no sabía cómo responder. Hasta que mi celular me saco de esta absurda fantasía.

—¿Sí? — respondí a la llamada.

—¿Sigues en el hotel? Ven ahora mismo.

—Sí señor, enseguida estaré ahí.

[Terminé la llamada.]

—Disculpa, tengo un asunto que atender... fue un gusto volverte a ver... Tay.

Di media vuelta y caminé tan a prisa como pude. Estaba alejándome de él, de quien había regresado a mi pero de quien debía huir.