Sadistic Desire Reiji Sakamaki 1ra Temporada

capítulo 3

Llegué a la habitación de Subaru, cerré la puerta con seguro, él estaba en su ataúd descansando - Suba-Chan! necesito tu ayuda por favor, es urgente! - le dije apanicada, el albino se levantó en un segundo - Rayos Masumi ¿qué tienes?! Te ves pálida! - me miraba totalmente en shock - Nunca entenderé porque duermes en un ataúd .. eres muy extraño - Sí, bueno lo soy larga historia ¿qué te pasa? ¿Porqué tanta urgencia? - apreté mis piernas un poco - el de ojos rubíes fruncio el ceño - ¿te lastimaste con algo? ¿Te volvió a golpear? - No! De hecho... estoy ... estoy sangrando de allá abajo y no sé ¡¡¿porqué?!! Y me duele el estómago - dije algo asustada Subaru agrandó los ojos - Tsk! No puede ser, no me imaginé que fuera tan pronto - ¿qué?! Algo anda mal conmigo! Dime!! - le grité asustada - No hay nada mal contigo, es un proceso normal en los seres humanos, digo en las mujeres de tu edad, cuando tu cuerpo madura - estaba sonrojado mientras me explicaba y me evadia la mirada - es inevitable que sangres lo harás cada mes para ser especifico cada 28 días, tu aparato reproductor femenino pasa de ser el de una niña al de un adulto, te has convertido en una mujer - Dios mío! Pensé que iba a morir! - No morirás es algo normal, en algunos de los libros de Reiji debe venir eso para que le entiendas mejor - El nunca me deja tocar nada de su oficina si lo hago me castigará - Bueno, en ese caso iré a pedirle unas toallas para que puedas estar más cómoda conociendo lo precavido que es seguro tendrá algunas - ¿unas toallas? - si, cuando las veas te explicaré que es lo que tienes que hacer con ellas, ahora vuelvo - Bien.. -

Subaru entra rápidamente a mi oficina interrumpiendo mi preciada lectura, se acerca a mi nervioso frunzo el ceño y puedo notar su incomodidad, sus mejillas están teñidas de un rosado leve y entonces me dice - sólo por curiosidad ... ¿tienes algunas toallas para Masumi? es urgente! - llegué a la conclusión de que ese era el motivo por el cual tenía cara de susto por fin le vino su primer periodo, la asquerosa humana ya es una mujer por alguna razón me causó cierta emoción.
Asiento y le señalo uno de los cajones en mi escritorio, él se dirige a éste y saca un paquete de toallas sanitarias, pero antes de salir me mira con una media sonrisa.
- ¿porqué tienes toallas en tu oficina? - porque sabía que éste día llegaría y te recuerdo que las novias de sacrificio también son mujeres, ¿satisfecho? Puedes dejarme solo quiero seguir con mi lectura. El albino salió mientras yo seguía pensando en Masumi y ahora con más ansiedad que nunca.

Entra a la habitación apresurado, me entrega un pequeño paquete rosado, observó el dibujo que hay en ella, parecen de algodón - pienso - escucha Masumi, ahi vienen las instrucciones de como usarla ¿bien? - asenti todavía asustada mientras me dirigía al baño del albino.
Eso era algo nuevo para mí, pero finalmente lo logré, me dolía el abdomen bajo y me sentía débil. Cuando salí le agradecí a Subaru dándole un fuerte abrazo en agradecimiento a mi ignorancia. Salgo de la habitación del chico de bellos ojos y me dirijo a la mía, estaba un poco feliz porque el fin de semana vendría Kanato con su nueva novia y Ayato con su esposa Yui que ya tenían una bebé de 1 año. Laito aún vivía en la mansión pero no dejaba de traer chicas zorras a su habitación para hacer cosas indebidas y fastidiarme la vida con sus perversiones a diario.
Esa noche tuve mucho dolor y no exactamente por los golpes que me había dado Reiji, cuando él entró para llamarme a cenar estaba acostada en el suelo en posición fetal, en serio me dolía, me miró como siempre suele hacerlo, con odio y como si me repudiara.
- ¿se puede saber que haces ahí? Tienes una cama idiota! - Me duele el estómago.. - le dije sosteniendo mi vientre bajo - no es mi problema, la cena esta servida si no bajas te va ir peor - No me siento bien... por favor... déjame descansar esta noche - Me suplicó pero tenía que comer algo me gustaba verla ponerse nerviosa cada vez que la miraba en la mesa.
- su cara de sufrimiento me agradó - muy bien entonces es tu problema si te quedas sin comer hasta mañana por la mañana y si me entero que bajaste a husmear la cocina durante la noche, te castigare de la manera que menos te lo esperas - salió de mi habitación y me dejo sola con mi dolor...