Durante todo el transcurso de su vida, Brooklyn Stilinski jamás había creído tener algo de especial. Con el peso de la escuela sobre sus hombros y un trabajo de medio tiempo en una cafetería, siempre creyó que era una chica más del montón con la úni...
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—Si Derek no es el Alfa, si él no te mordió, ¿quién fue? —preguntó Stiles.
Le di una mirada curiosa cuando lo escuché, desviándola hacia el frente nuevamente cuando el profesor me entregó mi examen. Sonreí al ver una calificación aprobatoria en la esquina superior derecha, contenta conmigo misma pues aunque no sacaba las mejores notas como mi hermana, mantenía un buen promedio y eso era suficiente para mí y para papá.
—No lo sé.
— ¿El Alfa mató al conductor del autobús?
—No lo sé.
— ¿El papá de Allison sabe qué--?
— ¡No lo sé! —chilló Scott, exasperado, interrumpiéndolo.
La mitad del salón se giró a mirarlos, pero dejaron de prestarles atención pronto pues ellos siempre eran así de raros. Me incliné hacia la izquierda cuando Scott recibió su examen también, alcanzando a ver su calificación reprobatoria y haciendo una mueca mientras me acomodaba nuevamente en mi asiento.
—Viejo, tienes que estudiar más. —Scott apartó su examen de su vista cuando escuchó su comentario, suspirando—. Era una broma. Scott, es un examen. Ya te pondrás al día.
— ¿Quieres que te ayude a estudiar? —ofrecí—. No soy la mejor en esta materia, pero creo que podría ayudarte un poco.
Scott negó, sonriendo.
—Gracias, pero estudiaré con Allison después de clases.
—Ése es mi muchacho —canturreó Stiles, mirándolo con una sonrisa de oreja a oreja.
—Sólo vamos a estudiar —se apresuró a decir Scott.
—No, no lo harán.
— ¿No?
—No si estoy obligado a vivir a través de ti —afirmó sin vergüenza—. Si hoy vas a su casa y desperdicias esa oportunidad colosal, te juro que te castraré.
—Está bien —siseó Scott incómodo—. Pero deja de hacer preguntas.
—De acuerdo —accedió sin rechistar—. Basta de preguntas. Basta de hablar sobre el Alfa o Derek. En especial sobre Derek, quien sigue asustándome.
No pude evitar reírme al escucharlo, siguiendo con el trabajo escrito que el profesor nos encargó antes de comenzar a repartir los exámenes, admitiendo únicamente para mí misma que Stiles tenía razón respecto a que Derek era bastante espeluznante.
🐾
Me acomodé el bolso sobre el hombro mientras caminaba a la salida entre el mar de personas que también se dirigían al exterior de la escuela una vez que la última clase del día terminó. Atravesé las puertas dobles y bajé los escalones, andando por la acera para llegar al auto junto a Stiles.
