16 | Heart monitor.

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| Monitor cardiaco.


—Muy bien —dijo Stiles, sentándose en una de las bancas a un costado del campo de lacrosse con la Mirada en el interior de su bolsa deportiva—

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—Muy bien —dijo Stiles, sentándose en una de las bancas a un costado del campo de lacrosse con la Mirada en el interior de su bolsa deportiva—. Ahora, ponte esto —le indicó a Scott.

— ¿No es un pulsómetro del equipo de atletismo? –preguntó él, tomando la banda de su mano derecha.

Stiles asintió.

—Sí, lo tomamos prestado.

—Lo robaste.

—Me apropié indebidamente de forma temporal —corrigió.

—Lo importante aquí es que es nuestro temporalmente —intervine, acabando con su discusión—. El entrenador mide su ritmo cardiaco mientras corren y tú lo usarás por el resto del día —le informé.

— ¿Ese no es el teléfono del entrenador? —Scott miró con las cejas encardas a Stiles al observar el celular en su mano.

—Sí, se lo robé.

— ¿Por qué?

—Se te acelera el corazón cuando te conviertes en lobo. Jugando lacrosse, estando con Allison o al enojarte —expuso—. Quizá el ritmo cardíaco tenga que ver con controlarlo —teorizó.

—Como el increíble Hulk —comprendió Scott.

—Sí, como el increíble Hulk.

—Soy como el increíble Hulk.

—Eres adorable —comenté medio burlona, pellizcándole una de las mejillas—. Ahora, increíble Hulk lobuno, cállate y ponte esa cosa —le ordené.

Scott asintió y se puso la cinta alrededor del pecho obedientemente mientras yo tomé la cinta adhesiva del interior de la bolsa deportiva para atarle las muñecas con toda la fuerza que pude para que no se librara fácilmente con su fuerza aumentada. Arrojé la cinta de nuevo al bolso cuando terminé y me alejé de él tras darle un par de palmadas suaves en el pecho y pedir perdón en voz baja, tomando el palo de lacrosse que Stiles me ofrecía.

—Esto no es exactamente como esperaba pasar mi periodo libre —comentó el chico atado.

— ¿Estás listo? —quise saber.

—No.

—Las damas primero —dijo Stiles. Asentí y tomé en la red la primera bola, inhalando profundo para prepararme—. Recuerda, no te enojes —le dijo a Scott mientras abría la aplicación de la banda en el celular del entrenador de atletismo.

Scott se quejó cuando la primera bola le dio en el pecho y el celular del entrenador nos avisó que su ritmo cardíaco aumentó. Stiles tomó la siguiente pelota, lanzándola con fuerza y dándole en las costillas, aunque deduje que no era eso lo que quería cuando vi la mueca en su rostro. Tiré la siguiente y le atiné cerca de donde él lo hizo, escuchando el sonoro quejido de Scott.

wolves | #1 | teen wolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora