Seto Kaiba = Verdad

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- Como mi pareja ¿harías lo que fuera por mí? -

Joey observó a Kaiba completamente confundido, esa pregunta lo llevó al pasado tan rápido que sintió un fuerte dolor de cabeza, era como si hubieran regresado meses atrás en el punto donde eligió comprometerse con él y hacer de su vida un caos, no solo había abandonado esa rutina que llevó durante diez años, sino, que también volvió a revivir su pasado de modelo, se vistió de mujer e hizo cosas que jamás se imaginó hacer por alguien.

Entonces todo eso llevaba a la mente de Joey a pensar... ¿Qué estaba planeando ese hombre ahora?, pero sorpresivamente, a pesar de esa pregunta, no estaba asustado, lo que si le aterraba es que su cuerpo no tuviera duda en responder, que su mente a pesar de la confusión y la extrañeza igual mantuviera mucha tranquilidad.

-Seto, Te aseguro que a estas alturas esa pregunta es algo... ridícula – respondió bufándolo, para sentarse en la cama un poco cansado. Ya se encontraba mejor, el medico en teoría lo visitaría para darle el alta, fue bastante tranquilo su estadía en el hospital, a excepción de la visita de un grupo de persona que se lograron enterar por medio de los rumores donde se encontraba la prometida, pero para fortuna de todos, se rindieron después de que Kaiba dijera que todo estaba bien - ¿En qué carajos estás pensando? – preguntó con una sonrisa tranquila.

Kaiba sonrió divertido, las cosas habían cambiado demasiado, pero ellos seguían siendo los mismo, no importaba si estaba en modo secretario, amante, pareja o prometida, Joey siempre le sorprendía con las respuestas espontaneas, que no solo lo calmaban, lo hacían disfrutar.

-Vamos responde un poco mejor Wheeler – le pidió solo para molestarlo, mientras se sentaba al borde de la cama con una mirada burlona, el rubio le miró irritado, pero inesperadamente lo tomó de la mano y con una suave sonrisa... se la pellizco – ¡hey! – se quejó molesto y apartándose un poco.

-sigue presionando y te voy a dar más duro – respondió molesto, y guardar silencio por un segundo– Como mi jefe has tenido mi lealtad por diez años, como mi pareja... tienes más que eso y lo sabes, no necesitas hacerme esa pregunta – soltó mirándole a los ojos penetrantemente, la pasión que había entre ellos estaba viva y ardiendo con todo su esplendor.

-Se que no tengo derecho a pedirte más de lo que me has dado – fue diciendo mientras acariciaba la mejilla del contrario – pero ahora deseo hacer algo mucho más grande y que cuando comenzamos esta locura jamás pensé que haría – agregó con un brillo tan especial en sus orbes azules que provocó en Joey un escalofrió.

- Kaiba, ¿Qué buscas hacer ahora? – preguntó sintiendo que estaba en un laberinto hecho por el castaño.

-Lo que quiero ahora, es poder decirle a todo el mundo que tú eres la persona que amo – Esa respuesta Joey la tomó de sorpresa, no era lo que esperaba, pensaba que sería una locura, pero no a ese nivel, ¿él se estaba planteando decir la verdad? ¿A esas alturas? Eso era imposible.

-Kaiba ¿Qué estás diciendo? – le preguntó con una mirada que le estaba diciendo "¿te has vuelto loco?" hasta el punto de que intentó taparse la cara con sus manos y volverlo a mirar entre ellas "No, definitivamente te volviste loco"

- Ni siquiera cuando te pedí que te casaras conmigo me miraste así – respondió con una sonrisa torcida – No necesito un engaño en mi vida, somos adultos y lo mínimo que busco es que podamos salir a caminar como una familia sin tener que esconder que la persona a mi lado se llama Joey Wheeler – le declaró seriamente.

-Kaiba, pero... ¿has pensado bien esto? – le preguntó severamente – el destapar una mentira no es algo fácil, ya la prometida consiguió una gran popularidad y confianza, el decir todo esto... puede generar conflictos – agregó siendo racional y permaneciendo tranquilo.

Rompiendo la rutinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora