Obtener el amor es todo lo que siempre soñamos, cuando este llega quieres aferrarte a el con fuerza y jamas soltarlo.
Ese fue mi caso, conseguí al chico que para mi era perfecto, y no solo hablo físicamente, no. Conseguí a mi compañero, mi mejor am...
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Capítulo: 07
Puedo ver su mirada de lastima y sé que algo malo viene, me pego a él y niego continuamente, el me aparta con pesar y sale cerrando la puerta con seguro.
Lloro, lagrimas caen porque de alguna manera sé que va a suceder. El sujeto frente a mí se acerca y yo retrocedo todo lo que puedo hasta que ya no hay más para dónde ir.
Se acerca lo que le falta y yo niego y lloro una y otra y otra vez. Cuando empieza a tocar mi cuerpo me sacudo lo pateo y él me golpea, golpea fuerte en comparación a mí y es horrible y duele.
Intento luchar, moverme, pero es inútil. El sujeto se harta de eso y da una fuerte bofetada que me deja afectada y confundida, indefensa y vulnerable... Ahí es donde toma ventaja y aunque grito "no" cada que puedo, mis fuerzas ya no dan para impedirlo más.
Duele y lloro mucho, intento seguir haciendo algo, pero ya no hay nada más que hacer.
Lloro, lloro y grito, grito hasta que mi garganta arde y mi voz se no sale más que como un quejido lastimoso, ronco y bajo. Lloro porque sé que esto es algo que me perseguirá toda la vida.
Ahora soy defectuosa.
Debí quedarme en casa en lugar de venir con ellos...
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Veo por la ventana y ya han pasado muchas horas. El mismo sujeto que me dejo con ese hombre me trajo para acá apenas la tortura término y corrí fuera de allí, no deje que nadie pusiera una mano sobre mí así que apenas me dejaron aquí de nuevo me tire en una esquina y llore aún más. Nadie ha venido desde hace horas y me alegra que así sea.
Escucho fuertes ruidos desde abajo y mis sentidos se ponen alerta, forcejeos a la puerta llegan y mis nervios crecen.
- ¡Si estas cerca de la puerta aléjate! -escucho y acto seguido la puerta se derrumba frente a mí.
- Sam -escucho, mi pecho quema y las lágrimas caen- No tengas miedo nena, ya estas a salvo -dice tía Anna frente a mí. Me toma en brazos y me lleva fuera de esa casa.
Policías entran por toda la propiedad tomando notas y otras cosas. Papá está hablando con uno mientras un médico lo examina y otro revisa a mi tío que esta muy golpeado.
- ¡Sam! -grita mamá con lágrimas en los ojos- oh por dios mi bebita. Lo siento, lo siento, lo siento nena -dice y me abraza.- estas bien, vamos a estar bien. -susurra.
- Señora necesitamos revisar a su hija -comenta una enfermera y mamá asiente.
Pinchan mi brazo y colocan lo que dice ser suero en mi brazo para hidratarme, la enfermera o doctora habla con mamá y con cada cosa que le explica ella llora aún más y eso me dice que lo sabe.
Ahora mamá sabe que estoy dañada y no podrá repararse.
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17 de noviembre 2009.
Samanta.
Son las 2am y no he podido dormir, llegamos de la clínica a lo que fue las 11pm y mamá me acompaño a mi cuarto, papá pidió perdón una y otra vez, pero no sabe que con ello no puede arreglar lo que sucedió.
Mamá no quería dejarme, pero yo solo quería estar sola y lo entendió.
Pero estar sola solo llama a repetir en mi cabeza todo lo sucedido. Lloro en silencio y mi cabeza duele, mis ojos quema y mi mente lastima... Tomo el woky toky que comparto con David y no dudo en usarlo.
- ¿Estas dormido? -pregunto y ruego porque no sea así, él estuvo cuando llegue, pero era tarde y se fue aunque no quería.
- No, no puedo dormir sabiendo que estas mal -murmura y lloro un poco.
- Yo... -murmuro y sorbo por la nariz- te necesito -digo y lloro aún más con lágrimas cayendo de mis mejillas.
- ¿Puedo ir? -pregunta y asiento, luego recuerdo que no puede verme.
- Por favor –susurro- Abriré para ti.
- Voy para allá - es todo lo que dice.
Camino con cuidado de no hacer ruido y abro lentamente la puerta, David esta en pijama y descalzo por alguna razón frente a la puerta. Entra rápido y caminamos en silencio hasta mi cuarto. Entro colocando seguro y caigo en mi cama, él se sienta a mi lado y pronto las lágrimas caen.
Me tiro a su cuello y lo abrazo con fuerza, él corresponde el abrazo con la misma intensidad y lloro aún más
- Todo estará bien Sam... -murmura acariciando mi cabello- si quieres hablar puedes hacerlo.
- No –articulo con mi voz ronca. Mi cuerpo duele, duele mucho.
- Lamento tanto todo lo que paso -susurra y su voz se quiebra. Lo sabe, de alguna manera lo sabe y eso me hace llorar más.
- Estoy podrirá -murmuro- estoy rota y nadie quiere cosas rotas... -sollozo y me abraza más.
- Yo te quiero -dice y lloro- Sam, estarás bien, lo prometo -asegura y besa mi cabello.
Lo abrazo por cuanto tiempo puedo y cuando las lágrimas no salen más, cuando mis ojos pesan por lo hinchados que estan y la luz del amanecer entra por mi ventana logro cerrarlos y quedarme dormida... Pero lo único que llega son pesadillas.
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Lo siento si es un poco feo lo que pasa, pero va con la historia y de alguna forma quería plasmarlo.
Estoy totalmente en contra de todo eso y de todos los imbéciles asquerosos que ocupan el mundo y gastan aire haciendo esa clase de cosas, es necesario que todos vean en el mundo en el que vivimos, esto puede ocurrir en cualquier momento y en cualquier parte... simplemente quería dar un pequeño mensaje...
