Capítulo 22

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Estaba sentada en la última fila de la clase, donde me solía sentar con Nessie todos los días. Pero su asiento estaba vacío. A pesar de que estaba con Shasa, Melissa y Pauline, me sentía sola. Por un lado, ellas habían intentado alegrarme al ver que Nessie había desaparecido porque se iba a "cambiar de ciudad". Habían insistido en que podría seguir en contacto con ella a pesar de que se fuera, pero lo que ellas no sabían era que Nessie hablaba con ellas y conmigo no. Tenía que fingir que hablaba con ella de vez en cuando porque sabía que si les decía que no era así, iban a averiguar que algo más se ocultaba en la razón por la que se iba. No quería que nadie supiese lo que los Cullen eran, porque a pesar de que me habían abandonado, se habían portado bien conmigo. Bueno, si ellos no hubiesen estado aquí, probablemente los Vulturi no hubiesen sabido de mi don, ¿no?

Al parecer no fueron tan buenos para ti como creíste, ¿no?

Levanté una ceja al oír la voz de mi conciencia expresar por fin lo que de verdad eran para mí. Me habían causado muchos problemas, habían arriesgado mi vida, la de mi familia y la de mis amigos. ¿Qué hubiese pasado si ellos no hubiesen estado en Forks?

Tú dolor sería la mitad doloroso. Solo tendrías que centrarte en olvidar a Joseph.

Me revolví incómoda al pensar aquello. Levanté la vista y miré hacia donde estaba él. Vi que me estaba mirando, como hacía en casi todas las clases. Retiré la mirada y volví a mirar las marcas que había en la mesa donde estaba sentada. Había pasado una semana desde que había descubierto todo, y Joe me perseguía por el instituto para poder hablar conmigo. Las chicas se encargaban de que no se dirigiese a mí durante las clases, y mi familia se ocupaba de él cuando yo me recluía en casa. Pero parecía que no se daba por vencido.

Todo el mundo sabía en el instituto que ya no estábamos juntos, pero no sabían exactamente por qué, y yo lo prefería así. Había rumores sobre que me había sido infiel con Anderson, pero nada que nadie pudiese confirmar. Parecía que nadie de los que lo sabían, que suponía que eran todos los amigos de Joseph, habían abierto la boca.

-Evans, ¿hay algo al final de la clase que le parezca más importante que mis clases?

Todos se giraron para mirar hacia Joe, que al ver que no quitaba la vista de una dirección, se giraron de nuevo para mirarme. Yo levanté la vista para mirar al profesor y contar hasta 100 para que no me diese algo mientras todos seguían mirando.

-Creo que la chica más guapa del universo se merece toda la atención del universo.-dijo Joe sin dejar de mirarme.-Y eso incluyen también sus clases, señor.

Noté como el ambiente en la clase se cargaba. ¿Qué se suponía que estaba haciendo? ¿No se daba cuenta de que no quería llamar la atención de nadie?

-Bueno, Evans.-dijo el profesor abriendo el cajón de su escritorio.-Creo que tu impertinencia te ha llevado al ver al director, por mucho que manifiestes que tu novia sea la chica más guapa del universo.

¿Incluso los profesores sabían de mi vida privada? Aun así, ¿no sabía que ya no estábamos juntos?

-Ya no están juntos.-dijo un chico de las primeras filas que no conocía mucho.

-Cierra la boca, Smith.-dijo Joe desviando la mirada de mí por una vez.

-No me importa su situación sentimental, Evans.-dijo el profesor ignorando al chico y a Joe.-Pero está interrumpiendo mis clases y la señorita Miller se siente incómoda con su presencia, por lo que debe abandonar mi clase. Vaya a ver al director.

Joe volvió a girar la cabeza para mirarme, esta vez con molestia. Yo le sostuve la mirada por primera vez porque era verdad. No le quería ver, y si podía evitarle en clase también estos últimos días de clases, para mí estaba bien.

Nueva entre los CullenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora