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"Querido diario"

Al subir por las escaleras, pasé por el salón, para comprobar que el novio de mi hermanastra se había ido. No sé escuchaba ningún ruido fuera de lo normal ni ninguna voz masculina ni femenina. Efectivamente, el salón se hallaba vacío. Subí al dormitorio de Millie.

El cuarto etaba oscuro, únicamente iluminado por la tenue luz de la luna. Se distinguía claramente el bulto tapado encima de la cama, era ella dormida, la ropa, las revistas para adolescentes con problemas de identidad, el desorden por todas partes, sus ridículos pósters de Justin Bieber y One Direction colgados en las empalagosas paredes de color rosa fucsia.

Por último, su diario abierto en el suelo, a mis pies.

"No debería - me recordó mi subconsciente - es mi hermanastra, es malvada, lo sé, pero no debo".

Sin embargo, pude distinguir en una de las páginas mi nombre escrito en tinta fucsia. La vocecita prudente de mi cabeza se calló e invadido de curiosidad, recogí el pequeño cuaderno con estampado de leopardo. Comencé a leer en susurro:

Querido diario:

Hoy mi padre ha llevado a la estúpida de mi madrastra, Karen a pasar una noche en un hotel de 4 estrellas.

No es que odie a Karen ni nada parecido, es sólo que me parece una mujer muy sumisa y tontita, que está dispuesta a dejarse mangonear por los hombres.- Hice una pausa llena de odio, al recordar el por qué de la vulnerabilidad de mi madre: mi padre. No era justo que Millie juzgara así a mi madre sin tener a penas una idea de los malos tratos que ha recibido. Continué leyendo:

Karen es todo lo contrario a mi: yo no dejo que me controle nadie. Otra cosa que odio ella es sin duda, a su hijo, Finn. Es un friki y un verdadero rarito. Además, siempre le pillo espiandome de vez en cuando, estoy completamente segura de que él está enamorado de mi, se nota en su forma de mirarme...- Hice una breve pausa, tras leer aquella falsedad. ¿De verdad podía Millie llegar a ser tan engreída y narcisista?- ....Pero, la verdad es que pienso que aunque su personalidad sea tan cutre, su rostro y su apariencia física son atractivos.

Si no fuera un niño tan raro e impopular, y si no fuera mi hermanastro, probablemente ahora mismo sería mi novio.- Sin dar crédito a lo que acababa de leer, deposité el diario en el suelo, tal y como me lo había encontrado.

¿Mi malvada hermanastra la cual me odiaba desde que nos conocimos, estaba colada por mí aspecto físico? Algo aturdido y asqueado, me miré las manos, estaban salpicadas de purpurina de la cubierta del diario, eran las pruebas de mi delito.

No debí haberlo hecho. No debí leer algo secreto, como es un diario. Y no debería saber de esos sentimientos de mi hermanastra hacia mí.

Corrí escaleras arriba, ansioso por llegar hasta mi habitación. Cuando llegué, me puse el pijama lo más rápido que pude, me acurruqué en mi cama, todavía desconcertado.

Primero Millie me había encerrado en el frio y oscuro sótano. Allí me he encontrado a una hermosa chica que parecía un especie de ángel. Luego, había pillado a Millie enrollándose en el salón con un tal Jacob, y por último, lo del diario. Aquel había sido el día más extraño de mi vida.

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Gracias por seguir leyendo 🖤

S H E [Fadie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora