El bosque de Ariwëy

Poder de hada

Ärysel, Tellywëis y Diana se fundieron en un cálido abrazo y, luego comenzaron a reír como locas.

Luego Diana les preguntó por esa luz que las envolvía cuando se transformaban

- Es el Wycian, una luz mágica que dependiendo de las cualidades del hada es de un color o de otro- le explicó Tellywëis.

- Y ¿ qué dones representan las vuestras? - preguntó Diana

- El mío- dijo Ärysel - representa la luna, la belleza y la inteligencia.

- Y el mío- dijo Tellywëis- representa la naturaleza, la sencillez y la humildad

- ¿Hay dones mejores y peores?- preguntó Diana que no era capaz de imaginar a seres tan bellos como sus amigas haciendo cosas malas.

- Si, desgraciadamente sí. Un ejemplo son las Dämulsey, todas ellas son hechiceras oscuras. En Ariwëy que te consideren hechicera es el peor de los castigos para una ninfa- le explicó Ärysel.

- La Dama Bliway, era una de las ninfas más hermosas de toda Ariwëy, pero cometió un error un terrible error- le contó Tellywëis.

Solo la mención del nombre de la culpable de que ella no pudiera volver a su hogar, la hizo estremecerse de miedo, y de ira.

- ¿Cuál fue su terrible error?- preguntó Diana con ganas de escuchar cosas malas sobre su enemiga

- Para comprenderlo primero debes saber que las ninfas nacemos de un elemento, el agua, la tierra, el fuego o la luna.- le dijo Tellywëis- el mío es la tierra como ya supondrás y el de Ärysel es la luna.

- Los poderes de las ninfas dependen de el elemento del que vengas, las ninfas del fuego, pueden invocar la lava, derretir objetos o petrificarlos entre otras cosas, las ninfas del agua, pueden invocar el agua y manejarla a su gusto para crear formas increíbles, o crear y desatar tormentas y lluvia cuando en Ariwëy lo necesitan.- le explicaba Ärysel.

- Las ninfas de la tierra podemos llamar a las criaturas mágicas del bosque, solo nosotras conocemos la llamada, podemos hacer crecer los árboles o flores y podemos cruzar nuestro bosque sin ninguna clase de indicación y no nos perderíamos jamás.- le dijo Tellywëis.

- Y nosotras las ninfas de la luna podemos extraer rayos de luna en una noche cualquiera, y con nuestra magia creamos las joyas más bellas que puedas imaginar- dijo Ärysel, muy orgullosa de pertenecer al elemento luna.

- Como ves cada ninfa puede invocar su elemento, y el secreto de cómo hacerlo lo guarda celosamente junto a sus hermanas de elemento. Contar ese secreto es castigado con el exilio a menos que la reina no diga lo contrario.- continuó Ärysel

- ¿Y qué fue lo que hizo la Dama Bliway?- preguntó Diana, se llevaba haciendo esa pregunta durante toda la explicación de sus amigas.

- Ella pertenecía al clan del fuego, era arrogante y muy independiente y se enfadó con la jefa de su elemento, para demostrarle que no le tenía miedo, lanzó al cielo un conjuro en el que se podía ver, escrito a fuego, el mayor secreto de las ninfas de fuego. El secreto de cómo crear una erupción. Fue castigada con el exilio junto a otras hermanas suyas que la ayudaron. A lo largo de los años fueron cogiendo fuerza y ahora son muchas más. - eso último, Tellywëis lo dijo casi con un susurro.

-¿Pero cuanto tiempo llevan vivas?- preguntó Diana.

- Miles de años, les robaron a las ninfas del agua el secreto de dónde se escondía su fuente de la eterna juventud.- concluyó Ärysel- por eso son tan peligrosas, porque son sabias y tienen mucha experiencia en la vida.

Diana pensó en todas las personas de Ariwëy, su pueblo, en lo mal que lo estaban pasando y decidió que iría con ellos, les brindaría su ayuda y les ayudaría a exterminar a las Dämulsey.