T-ODD-O [REESCRIBIENDO] [+18]✔️

25.

El odio es parte de él

Punto de vista de Colette Stansonn

Me ama.

Negué con la cabeza en su dirección.

—No es cierto, si me amaras no te hubieras acostado con Kate.

—¡No lo hice! Eso no sucedió ¿no me crees?

Me quede callada. No sabía que responder, todo era muy complicado.

—Colette—rogó acercándose—créeme. No me acosté con ella, la única que me importa eres tú.

Me reí frente a él.

—No me digas, ¿Crees que soy tonta? Tu actuando normal mientras dejabas que esa tipa entrara a tu apartamento, fui una ingenua.

Tomé mis cosas y avancé a mi habitación.

—Colette no hagas esto un problema mayor, no es nada y estas haciendo un gran escándalo.

—¿Escándalo? ¿Yo? Escándalo es lo que hizo esa recepcionista tuya que al parecer puede entrar a tu apartamento cuando a ella le plazca.

Caminé rápidamente hasta mi habitación y cerré la puerta antes de que Odd llegara.

—Colette, ábreme.

Exigió a través de la puerta, entre al baño ignorándolo. Me duché, salí rápidamente, me sequé y coloqué la ropa que ya tenía escogida.

No escuchaba a Odd hablar así que supuse que se había ido. Me maquillé y tomando mis pertenencias salí de la habitación.

Caminé lentamente hasta la cocina donde se encontraba Paty sirviendo un plato de desayuno. ¿Solo uno?

—El Señor Wallace se ha ido, me ha dicho que por favor no se marche sin desayunar.

Rodé los ojos frustrada, ni estando aquí puede dejar de fastidiarme.

Me senté en la mesa, no porque Odd así lo quería pero porque tenía hambre. Estaba más callada de lo usual, no quería hablar en lo absoluto. Podría haberse acostado con Kate una y otra vez pero siempre nos casaremos, el contrato sigue en marcha porque di mi palabra. Era por estas razones que volver a participar con Odd en contratos como estos me dolía, porque mi corazón siempre saldría lastimado.

—Señorita Stansonn—Paty habló sacándome de mis pensamientos.

Al ver que yo me quedaba callada continuó—El Señor dice la verdad el no...

—No quiero hablar del tema.

La corté amablemente, luego me concentré en mi desayuno de nuevo, sentía un poco grosero hablarle así pero realmente no quería.

—No hablaré más de lo que pasó pero si le dire algo Señorita Stansonn, en todos mis años de trabajo en esta casa con el Señor Wallace, jamás lo vi como ahora. El jamás había traído a una mujer a su apartamento, jamás había compartido su habitación...—Iba a interrumpirla pero no me dejó—Yo se que lo hace por el contrato, yo se de que trata esto Señorita soy vieja pero no tonta, a mi me informan y me hacen firmar acuerdos de confidencialidad. El primer matrimonio del Señor Wallace fue por contrato también, pero créame que no recibía el mismo trato que usted. La única palabra que cruzaban entre ambos era un Buenos días o un Buenas noches. Pero con usted es diferente, se ve en su cara. No digo esto para que se sienta obligada, lo digo porque observo los cambios en el Señor ya que nadie mas que yo lo conoce y ha vivido con él. El la ama, y me lo dijo mucho tiempo atrás. Con permiso.

Salió de la cocina dejándome con el corazón en la boca, las palabras que decía eran sinceras.

¿El me amaba desde antes?

Tal vez fui muy dura con el.

No, pero dejó que Kate entrara.

Se me quitó el apetito de repente, tomé un trago del jugo de naranja y me levanté mareada. No sabía a donde me dirigía pero no quería estar aquí.

Salí al ascensor y bajé, lo que menos deseaba era tener que ver a Kate en la recepción y asombrosamente eso no pasó. Kate no estaba por ningún lado.

Pase por la recepción a paso acelerado pero me detuve en la entrada al escuchar la voz de Odd argumentar algo inentendible. Giré mi cabeza encontrándome a Kate y Odd hablando acaloradamente.

—¡No me importa!—Kate le reclamaba algo y luego lo golpeó en el pecho. Tomé aire y avancé hacia ellos.

—Kate no discutas más....

Ella estaba de espaldas a mi, el único que me había visto acercarme era Odd quien trataba de calmarla.

Al acercarme le toqué el hombro haciéndola girar.

—¿Y tú a qué....

—Escúchame bien.—sonreí sujetando a Odd del brazo—Podemos denunciarte por acoso e irrumpimiento de propiedad privada, eso que tú haces no es legal y podrías perder tu trabajo—dije viendo su mesa en la recepción—Déjame decirte una cosa importante, puedes seguir viéndote o acostándote con Odd a escondidas, no me molesta pero ten en cuenta que siempre serás solo entretenimiento porque la que tiene puesto el anillo aquí, soy yo. La que todo el mundo conocerá, soy yo. Así que ¿Porqué no recoges tu dignidad que está en el suelo y te marchas?

Me di media vuelta dejándola con la palabra en la boca y caminando hacia la salida. No sabía si Odd me seguía pero no me detuve. Estaba muy molesta porque en estos momentos quería dejar todo y alejarme de Odd pero no podía. No había marcha atrás.

Sentí como una mano tomaba de la mía y me llevaba con él hasta el auto. No lo aparte. Estaba consiente que la gente a nuestro alrededor nos miraba y lo que menos quería era llamar la atención.

Al estar dentro del auto, Odd intentó tomarme la mano de nuevo pero me alejé.

—¡No me toques!—exclame frunciendo el ceño.

—Colette, en serio...

—Déjalo, vamos a la empresa.

Bajé la ventana del auto y me dispuse a no cruzar palabra con el en todo el trayecto. No estaba de humor.

Odd igual se mantuvo callado. Me había dicho que me amaba, ¿Era esa la reacción que él esperaba? ¿Como tenía que actuar después de darme cuenta que había estado con Kate?

—Solo quiero decir que, anoche fue la mejor noche en toda mi vida.

Oh por Dios. Cubrí mi rostro con mis manos, no puede hablar enserio.

—No mientas por favor y ya no hables del tema.

—Es la verdad, fue la mejor noche.

Ignore la mirada que me brindaba desde su asiento, estaba roja como un tomate y el no me ayudaba.

No quería hablar de cómo esa noche había sido la primera y la mejor de toda mi vida, la manera en la que sucedió, lento y romántico lograba erizarme la piel con solo el recuerdo.

Me hizo el amor y yo lo dejé, y  tal vez me duele que haya estado con Kate antes, pero debo de dejar de tomarle tanta importación.

—Entonces, ¿Esto es una relación abierta? ¿Tú puedes estar con otras mujeres y yo con otros hombres?

—No—su respuesta fue casi inmediata—En el contrato dice claramente que somos exclusivos.

Fruncí el ceño.

—¿Exclusivos? Pero tú estuviste con Kate....

—No estuve con ella, nos divertimos un poco pero no fue nada importante. Entiende.

—Entonces ¿no te molestaría que me divierta con alguien de la empresa?

Me crucé de brazos, ya habíamos llegado al parqueo.

—No puedes estar con nadie más Colette, firmaste el documento.

Resoplé frustrada, esperé que el auto esté completamente aparcado para bajar de el sin esperar a Odd.

Lo odio y lo amo. Necesito un psicólogo.