En la Multimedia, El Rey Snake.
Ya habían pasado dos días, desde mi llegada. El castillo tenía el doble del que me vió crecer..... Tres torres gigantes, lagos, y un bosque como mi reino.... o el que era mi reino... No puedo decir que más hay, todo lo dicho anteriormente, es lo que he visto desde mi ventana.... No me han sacado de esta habitación, con sábanas negras y pintura gris. Colores tan tristes como me encuentro yo. Y del tamaño de una de las habitaciones de las nodrizas.
Desde la llegada al castillo, solo he visto el rostro de Clarís. La princesa se desmontó primero que yo, y se dirigió a una de las torres. No se despidió ni nada. Y me trajeron aquí, donde solo tengo las pocas ropas que pude traer del castillo.
Clarís entró con mi desayuno..... -Buen día majestad, espero que halla tenido una buena noche. Le asentí. Me sonrió y con ademán de reverencia se marchó. ¿Buena noche?
Lágrimas salieron de mis ojos. Me miré al pequeño espejo y mis ojos estaban más azules.... Ya estrañaba el color verde en ellos.... Extrañaba la felicidad.
Dos noches de lágrimas... de soledad y de olvido.
Y mi esposo..... él aún no había aparecido. Estaría encerrada de por vida, pero necesito hablar con alguien. Clarís muestra deseos de hablarme, pero se detiene. Aprovecharé cuando venga a traerme comida y le hablaré.
Quiero ver al rey, se que le tengo miedo, pero por lo menos, que me diga hola, o un saludo cualquiera.
Cómo estará Amber? Espero que no se encuentre como yo..... Extraño a mis padres....
Clarís entró a traerme el almuerzo, no tenía apetito. Lo notó. -Majestad, debe comer, tiene ojeras y se ve pálida. Perdone mi insolencia.
Clarís bajó su cabeza en modo de disculpa, tenía miedo de hablarme.
-Clarís.... La llamé despacio. Me gustó su preocupación. -No debes tenerme miedo, me ha encantado tu preocupación. Le sonreí.
Esta me miró asombrada y me sonrió.
-El rey y la princesa se han marchado?
Ella mostró inseguridad, no quería contarme.
-Si no deseas contarme esta bien, pero quiero que sepas que no diré nada. Solo necesito saber qué pasa.
Me sentía desesperada, Clarís me sonrió.
-Usted ya es una excelente reina. Me gusta que sea la esposa de mi Rey.
Abrí mis ojos.... Una buena Reina? La esposa del Rey? Nunca había escuchado esas palabras, bueno sí, pero nunca dirigidas a mi.
Clarís sonrió maternalmente otra vez. Yo no pude evitarlo, y por primera vez en estos ya 4 días, sonreí de verdad.
-La princesa se encuentra en su torre.....
DIOS, me iba a contar........
-El rey, no está en el castillo.....es todo lo que se.
Le agradecí. -Podrías traerme un cuaderno y un lápiz, estoy muy sola aquí, necesito despejar mi mente... y amo, dibujar....
Esperaba que me dijera que sí, apreté mis manos....
-Haré todo lo posible mi Majestad hermosa.
Se marchó. Al siguiente día no me lo mencionó. En la noche, cuando subió a traerme la cena, me entregó el objeto insignificante que significó todo para mí. Mi cuaderno. " Reina Snake".
Leí tantas veces el nombre que tenía el cuaderno y aun así, se me hacía dificil acostumbrarme.
Tomé el lápiz y empecé a dibujar el jardín que se veía desde mi ventana.
Escuché pasos acercándose a la habitación, cada vez más y más cerca. Mi corazón latía fuerte, pero por qué? Podría ser Clarís o alguna mucama.
Abrieron la puerta de un portazo, y lo ví. DIOS.....Era el, mi esposo , mi Rey, el dueño de toda esta riqueza, de todo lo que había aquí, hasta mío. Me paré de un salto de la cama y quedé pegada a la mesita de noche. El se alejó un poco de la puerta, pero estaba justo al otro extremo mío.
Me miró y ladeó su cabeza. Vestía su traje de ninja negro... Tan oscuro como su alma.
Se podían apreciar todos sus músculos....Es tan alto y fuerte. Me miraba fijo, me siento una hormiga....
Me señaló con su dedo. Mi corazón aceptó competir con los caballos....
-Desnúdate!
No podía creer lo que me pedía. Su voz era la de un ogro. Atemorizaba a cualquiera.
-Mi Señ....
No me dejó concluir, mis palabras no salían.
-Te he ordenado que te desnudez, y no digo las cosas dos veces insolente!
- Lo si...ento mi señ...or.
Me duele el corazón.... no esperaba esto de mi rey..... y qué esperabas? Sabes que no tiene corazón.
Me desbotoné el vestido. Mis manos temblaban. Ningún hombre me ha visto desnuda. El vestido calló al suelo, y con el un par de lágrimas que disimulé.
Quité mi ropa interior. No podía levantar la cabeza.
Lo miré y me miraba fijo.
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Hola.....
Espero que les esté gustando!!!!!
Qué les pareció el capítulo?
Qué tal el Rey?
Qué creen que le hará a Samantha?
Será la princesa como el Rey?
Muchos besos!
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Dark King, Un corazón necesitado.(En edición)
LosoweSamantha, la hermosa princesa del amor, nunca pensó que su esposo sería, a la fuerza, el hombre más temido en todos los reinos, y es que, ¿a quién engañamos? nadie había visto su rostro, sus poderes eran ilimitados y su reinado, era solo de guerrero...