1 Diario, 2 Historias, 2 Corazones

18 de julio de 1940

Narra Adrien

Me desperté falto de sueño debido a que me costó casi dos horas volver a dormirme y la hora la cual mi reloj marcaba, eran las 7:40. Como la gente en la Casa Agreste no sale de la cama hasta las 8:15, no pude hacer nada mas que moverme por mi cuarto. Me vestí y daban las 7:50. Por lo que me puse a leer y salí de mi cuarto a las 8:25 para preguntar a Lucie, la cocinera, que si podia coger algo. Ella me dijo que sí.

Después de desayunar daban las 9:30, por lo que salí 10 minutos después.

Llegué a casa de Trini poco después de las 10 de la mañana.

Trini: Adrien, ¿Otra vez aquí?

Adrien: Sí, hay una cosa que tengo que contarte sobre mi sueño

Trini: Pasa, pasa, que hablaremos dentro

Adrien: Vale

[...]

Trini: Y... Qué es lo que querias contarme?

Adrien: Bueno... Cuando vine a principios de este mes por un sueño omití ciertos detalles

Trini: Cuáles?

Adrien: Nathaniel salía en el sueño

Trini: Ya te dije que ya me lo olía

Adrien: Pero esta vez... Dos soldados nazis que conocia, ya que eran de mi anterior instituto se lo llevaban a un campo de concentración

Trini: ¿¡QUÉ?!

Dijo ella muy asustada

Adrien: Se que es morboso, pero... También en el sueño... Esos soldados me mataban...

Trini: Adrien, tengo que decirte algo.

Adrien: Qué? - dije triste

Trini: Nathaniel no está en un campo de concentración

Casi me caigo del sillón cuando Trini pronunció esas palabras

Adrien: ¿¡QUEEE?! Dije con los ojos y boca como platos OoO

Trini: Sí, los escondimos en casa de la hermana de una vecina

Adrien: Y podría ir a verlo?

Trini: Vamos a preguntárselo a Madame Baptiste

Salimos y subimos al 3°B y Trini picó a dicha puerta.

De ella salió una mujer de entre unos 35 y 45 años de edad

Trini: Buenos días, Yolande

Madame Baptiste: Hola Trini, buenos días

Trini: Verás, este chico es amigo de Nathaniel

Madame Baptiste: Y tú como lo has probado?

Trini: Te recuerdo que en España era psicóloga y creo que estoy lo bastante capacitada como para saber si este chico miente. Además que me ha contado ciertos sueños sobre Nathaniel y hasta se ha puesto a llorar, cosa que a mi no me parecía falso

Madame Baptiste: Bueno, me fío de tu criterio, tu has sufrido igual que ese pobre chico. Por cierto, no nos hemos presentado - Ahora la señora se dirigía hacía mí

Adrien: Adrien Agreste

Madame Baptiste: Yolande Baptiste, Madame Baptiste, encantada

Adrien: Un placer

Madame Baptiste: Bueno Adrien, yo me fío del Trini, pero como algo malo le pase a mi hermana, tu, cuidado

Adrien: Tranquila, el secreto está a salvo conmigo

Madame Baptiste: Bien, casualmente, este domingo iremos allí a proporcionar víveres y a pasar el día, si quieres puedes venir

Adrien: OHHH!! GRACIAS!

Madame Baptiste: De nada. El domingo a las 10:00 te esperamos delante de la escalera. No faltes

Adrien: Muchas gracias señoras!

Trini: A ti por preocuparte por Nathaniel

Adrien: Me tengo que ir, adiós

Trini y Madame Baptiste: Hasta el domimgo!

Salí de la casa de Nathaniel con ganas de que sea domingo.

Nada más salir de allí, oí una voz

???: Adrien!

Me giré, era Luka

Adrien: Luka! Cuanto tiempo!

Luka: Sí, con este coñazo de la guerra... Pero... Vengo para despedirme

Adrien: Vuelves a Oporto?!

Luka: Debería haber vuelto el 15 de junio...

Adrien: Yo pensando que estaríamos juntos más tiempo...

Luka: Ya... Tengo que decirte algo...

Adrien: El que?

Sebastián: Oye Luka, que hora tienes? A mi me lleva marcando que son las 10:20 desde hace un tiempo y el tren de Bourgues sale en media hora

Luka: Yo tengo las 10:40

Sebastián: ¡No tenia otro momento para estropearse el reloj!¿No tenia?¡Corre que solo tenemos 10 minutos pa llegar a la estación!

Sebastián no acabó aquella frase y ya cogió a Luka del brazo dirección a la estación

Yo solo contemplé la escena desde la calle, despidiéndome con la mano...