1 Diario, 2 Historias, 2 Corazones

12 uvas, 12 campanadas

Narra Nathaniel

31 de diciembre de 1942, 18:30

Salíamos de la casa, Adrien, Paz y yo. Adrien y yo llevábamos trajes muy parecidos, solo que el llevaba una corbata verde y yo una de color aguamarina; Paz por su parte llevaba un vestido de noche de color berenjena, combinado con unos guantes blancos y un abrigo de color blanco marfil. Cogimos el ferrocarril y nos bajamos en la estación de Peu del Funicular, para hacer transbordo con dicho método de transporte. Bajamos en la estación de Vallvidrera Superior

Adrien: Ya estamos, cual era la dirección Paz, que tu la tenias

Paz: Sí... Calle de les Alber ¡mirad, es Amparo!

Adrien: ¡Anda, es verdad!¡Amparo!

Amparo al oirnos se dirigió a nosotros, yo bufé discretamente

Amparo: ¡Hola chicos!¡Dadme dos besos anda!

Paz: ¿Qué haces aquí, Amparo?

Amparo: Pues os he venido a buscar, es que Paz tiene antecedentes de perderse

Paz: ¡Oye tu! >:v

Amparo: ¿Te recuerdo que mi padre tuvo que ir a buscarte a Albarqués este verano?

Paz: ¿Te recuerdo que tu pueblo está en dónde Cristo perdió la zapatilla?

Amparo: Bien visto, bueno, os acompaño a la casa dónde la fiesta.

Caminamos durante 7 minutos en los que no le quitaba ojo ni Amparo ni Adrien; Paz iba a mi lado, pensando que tal vez me había vuelto loco y no me dirigía la palabra.
Amparo llevaba un bello vestido de color rojo, de manga larga, en el escote llevaba un grandioso lazo blanco, y, para evitar pasar frío lleva una chaqueta decorada en la solapa izquierda con otro lazo en menor medida de color blanco. Llegamos a la vivienda donde se hacía la fiesta.
Ya había mucha gente en la fiesta, conocía a gente del curso pasado y fui a charlar con ellos. Adrien, Amparo y Paz habían desaparecido, por mucho que los buscase no los encontraba. Había bebido, y, pensé que podia divertirme solo. A las hora de las uvas, Adrien, Amparo y Paz permanecían en paradero desconocido. Por la radio sonaban las campanadas, y, después de la doceava uva y la doceava campanada un alegre «¡Feliz 1943!» se extendía por la sala la gente se deseaba el feliz año. Había personas, conocidas, desconocidas y a medio camino que me felicitaban el nuevo año, con más o menos afectuosidad. Cogí champán que habia en una mesa y me lo serví en una copa

Nathaniel: Feliz 1943, Nathaniel Kurtzberg

Me dije a mi mismo

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31 de diciembre de 1942, 20:05

Narra Adrien

Ya estábamos en casa del anfitrión, un tal Pedro, según me había contado Amparo de camino aquí. En la fiesta al llegar ya había gente. Éramos muchos. Perdimos de vista a Paz y a Nathaniel, en cambio, Amparo estaba siempre conmigo. Había bebida, y, obviamente bebí.

31 de diciembre de 1942, 23:00

No faltaba mucho para las uvas, yo ya iba contentillo.

Amparo: Oye Adrien

Adrien: Digamelon~

Amparo: Te gustaría que fuesemos a mi casa a tomar las uvas... Es que aquí hay mucha gente y mucho borracho...

Adrien: Pues claro que sí, ningún problema, venga vamos

Salimos de la casa del tal Pedro, cruzamos la calle y llegamos a casa de Amparo

Adrien: Si que vives cerca de aquí

Amparo: Sip - dijo mientras habría la verja de la gran torre - Pasa, mi casa es tu casa

Atravesamos el patio y Amparo abrió un gran portón de madera que daba a un gran vestíbulo con una lujosa escalera de roble. Nos dirigimos al salón y Amparo conectó la radio. Yo me senté en un sofá

31 de diciembre de 1942, 23:47

Amparo: ¡Deberíamos coger champán!¡Así empezamos bien el año!

Adrien: Me parece bien.

Amparo se dirigió a la cocina y después de unos minutos volvió con dos copas de cava y una botella de champán. Llenó las copas y alzó la suya

Amparo: Por un 1943 lleno de paz, alegría y esperanza

Adrien: Salud

Hicimos chocar las copas con un armonioso «chin-chin».
Los dos bebimos media copa y hubo un instante en el que pareció que el mundo se paró. Tan solo se oía la voz radiofónica y el tic-tac de un reloj.
Amparo comenzó a besarme

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Narrador omnisciente

31 de diciembre de 1942, 23:51

Amparo besaba a Adrien de una manera apasionada, con pasión. Adrien tan solo correspondia.
Empezaron a quitarse la ropa mutuamente y siguieron besándose partes que no estaban normalmente a la vista

Las 23:53

Los dos estaban desunudos, Adrien estiró a Amparo en el sofá y empezó a introducir su miembro dentro de Amparo. La voz radiofónica acompañaba el acto

Las 23:59

Adrien y Amparo seguían haciendo el amor. Empezaron a sonar las campanadas

Voz Radiofónica: ¡Feliz 1943!

En ese momento me corrí dentro de Amparo

Amparo: Feliz 1943~

Adrien: Igualmente