Capítulo 32

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Había pasado una semana desde la batalla de Howarts.

Me encontraba delante del espejo de la casa de Andromeda, donde me quedé para darle apoyo y ayudarla con Teddy.

Mi pelirrojo cabello estaba atado en un moño desarreglado.

Hoy iba a ser el funeral de todos los muertos, además de las lecturas de testamento. Todo esto iba a ocurrir en el ministerio de magia.

Bajé a la cocina y me encontré a Andromeda sentada mirando al suelo.

-¿Estás lista?

Ella me miró y asintió con la cabeza.

Subí a la planta de arriba y cogí a Teddy, volví con Andromeda y nos aparecímos en el ministerio de magia.

Suspiré al darme cuenta de que muchas de las personas que había allí me miraban fijamente.

-Voy a hablar con Molly.

Asentí hacia lo que dijo Andromeda. Estos días había estado muy deprimida así que me alegraba que hable con sus amigas.

Teddy me agarró del pelo riéndose y cambiando el suyo a pelirrojo.

-¡Oye tú!

Un hombre se acercó a mi enfadado, apreté a Teddy contra mi y me preparé para lo que se me venía encima.

-Tu no puedes estar aquí, este sitio es solo para magos.

Miré al hombre con una ceja alzada.

-Pues como usted ve yo puedo estar aquí, de no ser así me encontraría en mi casa, así que le agradecería que se metiera en su triste vida y dejara la mía en paz.

Dicho esto salí andando sin darle tiempo a contestar.

Vi a Patrick con los gemelos y a Queen con los Malfoy, pero no me acerque a ninguno. No me sentía con ganas de hablar con nadie.

Entré en la sala donde se encontraba el homenaje a los difuntos y me senté en uno de los bancos a jugar con Teddy. Sabía que nadie me molestaría aquí.

-Señorita Potter.

Miré con fastidio al mago que me había llamado.

-Se solicita su presencia para la lectura del testamento de Remus y Nymphadora Lupin.

Me limité a asentir con la cabeza y seguir al hombre.

Pasamos por una sala en la que había bastante gente, entre ellos Patrick, Andromeda y Harry.

-Señor Potter ¿Podría salir?

Harry confundido se unió a nosotros, nos saludamos con un asentimiento de cabeza y seguimos al hombre hasta una sala en la que los tres nos metimos.

Una vez allí el hombre se sacó una carta y sin añadir nada más comenzó a leer.

-“Remus y Tonks Lupin, custodia de Ted Lupin.

Dado que hay una posibilidad de que ambos muramos en esta guerra no queremos dejar cabos sueltos en cuanto al tema de quien cuidará de nuestro hijo.

Aunque Harry Potter sea su padrino, creemos que la que debe hacerse cargo de él es Rachel Potter, ya que hemos visto lo que la soberbia de la magia puede causar en algunas personas.

Por eso y por otros motivos que no escribiremos en esta carta creemos que la madre adoptiva de Teddy en caso de que nosotros muramos debe ser Rachel Potter”

Yo aún tenía a Teddy en brazos y le miré atónita.

-¿Yo?

-Si usted señorita Potter.

Mi hermano se levantó de su silla con una sonrisa triste.

-Entonces supongo que mi petición de adopción queda anulada.

Le miré sorprendida, no se me había ni pasado por la cabeza que Harry quisiera criar a Teddy. No se había pasado a verle nunca, lo que me hizo pensar que el bebé le daba igual.

Harry salió de allí a paso rápido y yo lo seguí.

-¡Harry espera!

Mi hermano se detuvo y me miró.

-Que tu no vayas a criarlo no significa que no formes parte de su vida. Voy a necesitar ayuda con todo el tema mágico.

Harry miró al suelo, parecía estar debatiendose entre contarme lo que le ocurría y no hacerlo.

-Ese es el problema, la magia. Lo que ponía en la carta, iba dirigido a mí, no querían que criara a Teddy porque pensaban que la magia y ser el elegido iba a cegarme, y lo peor es que lo hizo, he sido una mierda de hermano contigo.

Me acerqué a él y coloqué mi mano en su hombro.

-Yo hace mucho tiempo que te peroné por eso Harry. Todos cometemos errores, pero lo importante es aprender de ellos y ser mejores personas, Remus y Tonks te querían mucho, por eso eres el padrino de Teddy.

-Si, pero no me querían tanto como a ti.

Suspiré cansada.

-Lo sé, y Sirius te quería más a ti que a Patrick.

Harry me miró sorprendido por mi tono brusco.

-Lo siento. Hablando de Patrick ¿Está ahora mismo con Fred?

Asentí con una sonrisa.

-Llevan juntos desde hace dos años.

Entre conversaciones triviales llegamos a la habitación de las tumbas, a la de Santana.

-Siento lo de tu amiga, recuerdo que estaba en el parque con Patrick y contigo la noche que nos peleamos.

-Era una buena persona. Aunque no tenía ningún motivo para hacerlo siempre nos protegió. Era como mi hermana, la veía todos los días, entrenaba con ella, y ahora de repente no está, es un poco raro, porque lo único que haces es preguntarte ¿Qué va ser de mi sin ella? ¿Con quién pasaré los sábados en el sofá?

Sentí una mano posarse en mi hombro y me giré para ver a Draco.

-Cuando estuve en vuestra casa y vi como se comportaba con mi hermana te juro que pensaba que acabarían juntas.

Ambos compartimos una triste sonrisa, pero entonces su mirada se posó en mi hermano.

-Malfoy.

-Potter.

Bufé divertida.

-Sois unos infantiles, yo me voy a ir con Teddy a por algo de beber y vosotros os vais a quedar aquí y vais a hablar para solucionar vuestras diferencias.

Me fui de allí con una pequeña sonrisa.

La Potter squibDonde viven las historias. Descúbrelo ahora