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Seúl. Martes 30 de abril de 2019.

"Love..."

—Sube el volumen —pidió Mark mientras miraba a través de la ventana. Su pedido no fue atendido—. ¿Bebé Jungjung? ¿Me escuchaste?

"Don't hurt me, don't hurt me, no more"

La mente de Jungwoo permanecía dando vueltas entre sus recuerdos del día anterior, recordando su primer desayuno a solas con Lucas después de tantos años y que, por supuesto había transcurrido en silencio y lleno de tensión, pero estaban uno frente al otro, cruzando miradas "por error" hasta que el médico llegó a interrumpirlos.

"Ah, throw dirt on me and grow a wildflower..."

—¡Jung Jungwoo! —exclamó Mark, golpeando su asiento y haciéndolo pegar un respingo.

—¡¿Qué mierda, Mark?! —soltó enojado y sus hermanos le miraron con los ojos supremamente abiertos.

—"No groserías en el auto" —Mark imitó a su madre con gracia y YoonOh se carcajeó.

Jungwoo frunció el ceño y se cruzó de brazos molesto, llevando su mirada de nuevo hacia la vía.

—Lo hiciste enojar —murmuró YoonOh—, discúlpate con él.

—¡Oh, vamos, no somos unos niños! —se carcajeó el menor de todos—. Jungjung no está enfadado, ¿cierto? —se metió entre los dos asientos delanteros y le dio un beso en la mejilla a su hermano—, ¡¿cierto?!

—No lo estoy, ahora siéntate bien, es peligroso que vayas así —le pidió.

—Entonces súbele el volumen a la canción —exigió y Jungwoo le hizo caso sabiendo lo mucho que su hermano menor la amaba.

De nuevo, regresó al día anterior:

Lucas se había ido a acompañar el médico al estacionamiento después de escuchar atentamente que lo sucedido era una simple torcedura que se trataría con analgésicos y poniendo hielo en la zona afectada para que bajara la hinchazón. Extrañamente y a pesar de lo bien que había dormido esa noche, el rubio terminó sintiéndose soñoliento, así que le escribió a Sicheng sobre su falta y se quedó dormido en el sofá. Lucas no le despertó en ningún momento y le acompañó mientras le ponía las compresas de hielo. Jungwoo lo supo porque cuando despertó el menor estaba sentado en el otro extremo del sofá mientras le cargaba el pie lastimado, poniendo las compresas y bastante ensimismado en un partido de fútbol americano que pasaban por la televisión.

Se quedó quieto, intentando verse como si aún durmiera, porque a pesar de lo entumecido que estaba su pie por el frío, él podía sentir el toque cuidadoso de Lucas, aunque realmente eso no bastó para engañarlo.

—Tenías que ponerte compresas de hielo, ¿por qué te quedaste dormido? —preguntó y Jungwoo exhaló.

—Lo siento —dijo antes de dejarse llevar por un bostezo—, tu sofá es bastante cómodo y por lo que veo, tú ya lo hiciste —le miró con una sonrisa y Lucas frunció el ceño mientras se levantaba y le dejaba el pie sobre el sofá con cuidado.

—Vamos, voy a llevarte a casa, tengo mucho por hacer —habló y Jungwoo notó que ya se había duchado y cambiado.

—¿Qué hora es? —inquirió.

—Son las tres.

Jungwoo le miró preocupado.

—Tus clases y el entrenamiento...

Alterato [LuWoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora