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Jungwoo sintió su cuerpo enfriarse a pesar de que Yukhei no había dejado de abrazarle en ningún momento. Sin embargo, él se deshizo de la cobija para ponerse de pie y recibir a su padre con una notable reverencia. Yukhei permaneció donde estaba, en una lucha de miradas con Yoonchul que Jungwoo no sabía cómo detener.

—Minyoung acaba de llamarme —comentó Yoonchul sin una pizca de humor en su voz—. Dijo que necesitaba que hicieras algunas compras para ella mientras yo me encargaba de pedir la cena —añadió, sin dejar de mirar fijamente a su sobrino.

Yukhei se puso de pie con sorna y dobló la cobija mientras Jungwoo permanecía estático, reaccionando sólo cuando su novio terminó con lo que hacía y movió su cabeza para indicarle que fueran.

—Iré por nuestros zapatos —Jungwoo le avisó a su novio y cuando pasó por el lado de Yoonchul éste lo tomó del brazo, apretándolo con tanta fuerza que el rubio fue incapaz de retener un jadeo de dolor en su garganta.

Nun no tardó en ponerse a ladrar alarmado y Lucas se acercó prontamente e intentó alejar a su tío de Jungwoo, pero éste se negó a soltar su agarre, mirándolo con advertencia.

—Irás sin Jungwoo, necesito hablar con él —comentó y Yukhei sólo le empujó para al fin alejarlo de su novio, interponiéndose entre ambos tan enojado que en su cuello comenzó a notarse una de sus venas.

—Puedes hablar con él cuando regresemos —aseguró, sabiendo que para ese momento al menos YoonOh y Mark estarían en casa, puesto que Minyoung ese día trabajaba hasta las diez de la noche.

Jungwoo se puso en cuclillas prontamente para tranquilizar a Nun y lo sacó casi a rastras de la sala para ponerle un arnés y unirle la correa. Lo llevó consigo hasta tomar los zapatos de Yukhei, que habían dejado en su cuarto luego de sacarlos de la secadora, sus billeteras y teléfonos, y salir de la casa cuando incluso su novio no estaba en la puerta. Cuando la lluvia comenzó a mojarle, Jungwoo se dio cuenta de que estaba actuando sin pensar y regresó a la entrada para poner los zapatos de Lucas en el piso, justo cuando él salía de la sala con sus hombros tensos y su enfado aún notable.

Yukhei se puso los zapatos en silencio y tomó una sombrilla para llevar a su novio y a Nun hasta el auto, aceleró después de ayudarle a ponerse el cinturón e intentó controlar su ira para poder consolar a Jungwoo, porque éste no era consciente de que sus manos temblaban y sus ojos estaban repletos de lágrimas. Lucas intentó enfocarse en Nun, que iba de un lado a otro en los asientos, olvidando prontamente que había estado ladrando desesperado y gruñendo.

—¿Te lastimó? —preguntó Lucas, acariciándole el muslo con su mano derecha. Jungwoo tuvo que inhalar y exhalar profundamente mientras negaba, forzándose a no llorar porque creía que era molesto para su novio que él intentara arreglarlo todo con lágrimas.

—No. —Musitó a pesar de que sentía que su brazo palpitaba en la zona donde ese hombre le había apretado.

Volvió a negar con la cabeza al ver que su novio le miraba sin creerle. Lucas era incapaz de disminuir su molestia, Jungwoo lo supo por la forma en la que sostenía el volante luego de alejar su mano derecha de él para girar en una calle.

—Estoy bien —aseguró—, sólo me asusté un poco —aclaró y Yukhei no dijo nada hasta que dejó su auto en el estacionamiento del supermercado.

Allí no llovía, así que Jungwoo sólo se preocupó por dejar salir prontamente a Nun del auto sin sostener su correa y tomar a su novio de la mano cuando vio que él comenzó a caminar sin esperarlo, logrando que éste detuviera sus pasos y apretara los ojos a la vez que sucedía aquello con su mandíbula.

—Lo siento, Jungjung, estoy demasiado enfadado —comentó, abriendo al fin los ojos y enfocándose sólo en el oscuro cielo. No era capaz de mirarlo, no mientras su estómago y pecho ardían por la molestia.

Alterato [LuWoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora