En Un Sólo Camino (Jikook/Kookmin) PAUSADA

Capítulo 3

(13 de Octubre de 1920)

Había pasado una semana y era al fin el tan ansiado cumpleaños de Jimin. Él estaba muy emocionado, Jungkook estaba emocionado, los niños a quienes invitaron también lo estaban.

Por la mañana su madre, su padre, Jungkook y su tía Bella, como él le decía, fueron a despertarlo deseándole feliz cumpleaños, desde ese momento el pequeño empezó a disfrutar al máximo su día. Lo esperaba mucho.

Todo se miraba tan lindo y cálido a los ojos de Jimin, el almuerzo puesto, toda su familia, su mejor amigo, sus vecinos, todo era genial, se la estaba pasando de maravilla, sin dejar de mencionar que su ojo ya estaba más sano, calculaba que dentro de un mes lo estaría por completo.

Se encontraba alistando la ropa de su muñeco para ir a jugar con Jungkook quien lo esperaba afuera, cuando de pronto escuchó su nombre.

- ¡Jiminie! -llamó Joo Young, una niña vecina de él, se encontraba en unos arbustos junto a la cerca que dividía la calle de tierra y la casa por enfrente.

- ¡¿Qué?! -respondió desde la puerta.

- ¡Mira ven a ver esto!

- ¡¿Qué es?!

- ¡Ven rápido antes de que se vaya! -insistió la niña.

Jimin dejó el muñeco a un lado junto al oso de madera que le regalo el carpintero amigo de su padre y curioso corrió hasta donde estaba ella.

- ¿Qué es? -dijo mientras se agachaba.

- Mira...

La niña separó los dos arbustos que se pegaban entre si y en medio dejó descubierto un nido de gorriones.

- ¡Wow que lindo! -exaltó Jimin de ver tan tiernos pajaritos bebés.

- ¿Verdad que sí?

- Hyung ¿Cómo los encontraste? -preguntó emocionado.

- En mi casa, estaban en un árbol.

- ¿En tu casa? Pero su nido esta aquí en mi arbusto.

- Sí, pero...

Ella que estaba casi sentada sobre sus pies, se volteo e hizo que Jimin la viera.

- Yo los traje para ti... A cambio de algo.

- ¿Pero qué no es mi regalo de cumpleaños? -preguntó incrédulo.

- Sí... Pero también quiero que me des algo...

- ¿Qué?

Sin previo aviso, sin decir nada más, la pequeña Joo Young tomó el rostro de Jimin con sus dos manos y unió sus labios con los de él. Su vecina lo estaba besando sin su consentimiento.

- ¿Jimin? -se oyó en un hilo de voz lastimero.

El pelinegro quien estaba anonadado por recibir su primer beso, mantenía sus ojos abiertos como platos en lo que se detenía con las manos en el suelo, pues, había sido jalado hacia enfrente. Al escuchar mencionar su nombre tras la pelirroja, miró hacia al costado de ella y allí estaba él... Su mejor amigo... Con una expresión que no podía ni siquiera explicar.

- ¡J-Jungkook!... -dijo separándose y empujando a la niña a lo que ella se quejó seguido-. Y-Yo...

- ¡Cariño vamos a cortar tu torta! -gritó inoportuna su madre desde la mesa en el patio.

Jungkook no pronunció más y se alejó hacia la mesa mientras Jimin lo seguía con la mirada. Se tragó prácticamente sus explicaciones. La niña se levantó y sin sacudirse, extendió su mano a él para que pudiera ponerse de pie pero éste la rechazó viendo a otro lado, aun en el suelo y apoyado en sus manos. Ella bajó la mirada e igual hizo con su brazo extendido lentamente.