Gracias a Peter.

7.

-Y fue así que quedé en segundo lugar.

-No puedo creer que hayas perdido contra una papa que da energía. -decia riendo el millonario-. A la siguiente será Peter.

-Ash, pero que corage, a la siguiente les llevo una armadura y ahora sí ve-

-No necesitas llevar una armadura cuando eres tú araña, nadie es mejor que tú, aprenderlo. El momento puede ser el más jodido de todos, pero siempre serás tú lo mejor que puedas llegar a crear o cuidar.

El joven tan solo sonrió y asintió, le gustaba cuando su padre se ponía así.

-¿A dónde vamos?

-Ya lo verás.

Fue lo último dicho, pues Stark puso a reproducir una de sus típicas canciones y siguió conduciendo. Ahora que se fijaba, ese carro nunca lo había visto, además era automático, cosa que se le hizo raro pero no dijo nada, su padre tenía una sonrisa así que no se quejaba.

Los minutos se convirtieron en dos horas, cosa que a Peter no le gustaba, tenía curiosidad y siempre que preguntaba recibía la misma respuesta "Ya lo verás" ya hasta sentía que estaba ciego y por eso no veía a dónde iban.

-Y Stephen?

-En la torre.

-¿No vendrá?

-Nop y ya deja de preguntar arañita.

Y nuevamente se quedó callado, aunque hizo un puchero. Inflando sus mejillas se cruzó de brazos.

-Si sigues así bajarás del auto.

Riendo, el jóven asintio, seguiría con su juego.

-Peter. -dijo riendo también ya el otro-. Es en serio.

Y nuevamente seguía así. Su piense era seguir así hasta que le dijeran, el problema fue cuando si se paró el carro y el millonario se bajó. Inmediatamente, este imitó su acción.

-Señor Stark, era broma le jur- ¿Qué hace?.- preguntó cuando vio que el otro se subía de copiloto.- oiga, a caso quiere morir?

-Solo calla y sube del otro lado.

Y fue lo que hizo, al estar en el lado del piloto, solo cerró la puerta y se puso el cinturón.

-Yo no sé manejar papá.

-Y por eso te enseñaré, tienes 100km para aprender.

Y así fue, tuvo 100km para ser regañado intensamente, aunque según él había valido la pena, pues estaban vivos. Por otro lado, teníamos a un Tony enojado por tantas tonterías o eso aparentaba, pues por dentro estaba orgulloso de lo bien que lo hizo al final su araña.

-Señor Stark, ¿Donde estamos?

-En nuestras vacaciones Peter.

-Pero señor...estamos en una montaña.

-Hijo, no siempre tienes que ir a un paraje de diversiones para divertirte, ¿Lo sabías?

Peter tan solo sonrió, se bajó del auto y comenzó a recorrer cercas de ahí, realmente se había fascinado con tanta belleza del lugar, pero, ¿Quién no lo haría? Él desde ahí apreciaba el caer del agua por una cascada, mientras estaba parado sobre pasto al parecer muy bien cuidado.

Por otro lado, Tony estaba sacando las cosas de la cajuela, traía lo que al parecer era una pequeña caja, que tras ser puesta en el suelo y activada por comando de voz, se creó una tienda de acampar bastante grande, luego sacó otra y de igual manera fue activada.

-Wow! Siempre me sorprende señor Stark, en serio!

-Me halagas niño.

La tarde podría ser definida por los hermosos momentos padre e hijo que pasaron, habían estado platicando de la escuela, de Peter que quería estudiar, de cómo Iron Man nació, y muchas más cosas que tan solo los allegaron más. Ambos mantenían sonrisas, pero por distintas cosas, en la cabeza de Tony no pasaba otra cosa más que todo lo que platicaron, mientras Peter no podía dejar de pensar en como el señor Stark se había apegado más a él, estaba orgulloso de sí.

-Bueno Peter, ya son las dos de la mañana, ya es hora de dormir. -dijo levantandose ya el mayor-. Y nada de peros araña.

-Oww, bien.

Y así, ambos se fueron a sus respectivas tiendas, sin duda para ambos ese era el mejor viaje que habían hecho en toda su vida.

Lástima que no todos los momentos buenos son para siempre.