Gracias a Peter.

15.

La nueva mañana comenzó trayendo cientos de oportunidades para ellos. Se sentía un aire de tranquilidad en todo el complejo.

Tony salió de su habitación con una tenue sonrisa, después del día anterior y de que su hijo y su ex pareja decidieran hablar, le era difícil imaginarse volver a verlos pelear. Era exquisito. Sin peleas entre el amor de su vida y Steve.

Llegó a la cocina y preparó un café, luego vio entrar a su pequeño.

—Buenos días, Pett.

—Buenos días, pa'. ¿Cómo dormiste?

—Bien, y tú, ¿Arañita?

—Geniai pa', tanto que estoy listo para el día; listo para descifrar el secreto de Wade.

Ambos se despidieron con una gran sonrisa, cada uno tenía su día planeado, después de todo era el último día en ese apestoso hangar.

Peter estaba examinando con detenimiento al asesino a sueldo, mientras que Tony investigaba otro caso, algo que ver con una base de Hydra.

Steve de vez en cuando le llevaba un que otro café a Tony y al pequeño le llegó incluso a llevar una malteada -que aceptó gustoso- poco a poco se comenzaba a ganar su cariño.

El día simplemente iba perfecto. Hasta que les llegó el mensaje a Steve y Tony. Los "vengadores" se reunirán en ese hangar. Debian arreglar las cosas y quién sabe que tanta mierda.

La reunión dio inicio con todos los presentes sentados en sus respectivos lugares, ninguno se atrevía a decir nada.

Por un lado teníamos a un arquero impaciente, una asesina molesta al parecer y a un soldado en completo silencio. Del otro, teníamos a un robot -super inteligente, por cierto- a una bruja tomando su mano y a un chico araña al lado de su padre.

El clima era bastante tenso, todos esperaban que alguien más iniciara conversación, pero al parecer ninguno se atrevía a hacerlo. Tony suspiro cansado de la situacion, él tenía cosas que hacer.

—¿Para qué es está reunión?

—Se supone que debemos de hablar. -contestó la peliroja-. Tenemos que dejar desde una vez las cosas en claro.

—Adelante, disculpense con mi papá y listo. Asunto relacionado.

Y ahí estaba el guardián de Tony. Sonrió con cariño y le acarició el cabello, no le importaba en lo absoluto la junta a decir verdad.

—Bueno, arañita. Nosotros en primer lugar, no sabíamos bien que rayos pasaba. Si nos hubieran dicho, no nos habríamos dividido.

—Y por eso en cuando vieron que entra contra "Iron Mano" fue que se detuvieron a pensar, ¿Verdad? Patético Legolas. Ustedes son una bola de aprovechados. Ya que nadie más de los dirá, pues aquí voy. -Peter tomó aire y primero vio al arquero-. Tú solo llegaste y elegiste equipo, sin importarle que mi papá estuviera ayudando con una beca para tus hijas, vaya forma de agradecer. -Ahora veía a la pelirroja-. Vaya fraude, primero fingir ser una sexy chica para meter al papá al programa "vengadores" y ¿luego traicionarlo? Felicidades, tiene el título bien ganado. Viuda negra.

Todos estaban atónitos por la forma en la que se atrevía a hablarles el más joven. No le importaba quienes fueran, solo era honesto y defendía a su padre.

—Seguimos con Wanda y Visión. Oh, ustedes solo estuvieron en el momento y lugar equivocado. Para finalizar, Falcón. No te puedo culpar. No conocías a mi padre y seguías ciegamente al capitán. Aquí es donde a todos les pregunto, ¿Son realmente un equipo?

Todos pensaron por un momento lo dicho por el pequeño, en cierta forma sentían que tenía razón, pero ninguno podía decir algo. La última pregunta quedó suspendida, esperando ser respondida.

—Si lo somos. -afirmó el capitán-. Somos el mejor equipo en todo el planeta tierra. Lo que nos separó fue un malentendido entre Tony y yo...que en cierta parte fue mi culpa. Podemos superar esto, podemos volver a ser el equipo que siempre hemos sido.

Pusieron atención en sus palabras. No era mentira que FUERON el mejor equipo en todo el planeta tierra, lo que los tenía así fue un error, pero bueno, son humanos.

Suspiró el millonario, ganando la atención de todos.

—Se supone que un equipo supera todo; no me importa ya que pasó en el pasado, los perdono aunque no lo crean. Con su permiso, vengadores, me retiro, tengo muchas que hacer. -se levantó y los vio, la gran mayoría seguía con la boca abierta-. Pett, andando.

Ambos salieron de ahí.

En la sala reinó una vez más el silencio, ninguno sabía cómo tomar lo que había dicho Stark. ¿Desde cuándo perdonaba tan fácil? Steve sabía la respuesta. Desde Petter, ese niño le había cambiado la vida para bien.

~*~

Entró al laboratorio tras su padre, sentía que un buen regaño le esperaba y pues no lo culpaba, fue muy grosero con los demás vengadores.

—Si sabes lo que hiciste ¿Verdad?

Asintió como respuesta, no lo podía negar.

—¿Qué crees que hiciste?

—Creo que me acabo de meter en un buen lío, fui grosero. Lo siento papá.

Tony rió como respuesta y negó, él lo pensaba felicitar por su forma de actuar y el otro pobre pensaba estar en problemas.

—Y yo que pensaba ver un maratón de Star Wars contigo.

Sonrió y abrazó al mayor, después de todo no había estado tan mal.

—Solo intenta tener más compañerismo con ellos, Peter. Lamentablemente soy parte del equipo, tengo que llevarme bien con esos idiotas.

—Vale papá, perdón. Pero odio que traten mal al mejor vengador.

Sonrió y le acarició nuevamente el cabello, sin duda se parecía mucho a él.

—Anda, vayamos a ver ese maratón, mañana nos vamos y Wade se quedará aquí, ya deja de pensar en eso cariño, eres muy joven para estresarte.

—Claro papá.

Ambos se quedaron esa tarde juntos, no había necesidad de que alguien más estuviera, estando juntos, nada les faltaba.