El cielo nocturno estaba tranquilo, silencioso y un poco frío.
Ambos jóvenes mantenían un silencio inquebrantable, incómodo pero necesario. Iban sumergidos en sus pensamientos, tenían mucho que reflexionar antes de hablar.Aunque viajaran en el dragón selvático, no parecía que fueran a llegar en poco tiempo. Después de todo, el viaje que habían realizado hasta el Bosque Oscuro les había llevado días.
Hilda pensaba en todo lo que había pasado en tan poco tiempo, todas esas verdades y ese extraño encuentro con el guardián del Bosque Oscuro.
¿Era cierto que había muerto por un momento?
Era inquietante solo pensar en ello, pero no quitaba el hecho de ser algo sorprendente."Cuando tu travesía termine, vuelve al Gran Bosque lo antes posible. Alguien te estará esperando."
Esas eran las palabras de Carl haciendo eco en su cabeza.
¿A que se refería exactamente con que alguien la estaba esperando?
La peliazul sacudió su cabeza y volvió la vista hacia el frente.
Parecía que Trolberg o el Gran Bosque jamás se verían en el horizonte.Mientras tanto, el chico a su espalda no parecía ni inmutaste, estaba estático sujeto al animal con la vista fija en el lomo verdoso.
Desde que dejaron las cercanías del Bosque Oscuro quedó sin palabras, aunque parecía algo normal, después de todo siempre fue de pocas palabras y no muy bueno para conversar.
Olvidé la guitarra.
Pensó el rubio volviendo automáticamente la mirada a su amiga.
Había dejado el artefacto en el césped cuando apareció la bruja de puntas moradas. Un gran descuido considerando la importancia que tenía ese instrumento para él. Tal vez por ahora sería bueno no mencionar aquello.- Eddie. - Finalmente ella rompió el silencio.
No había forma de hacerla entender sin palabras que la estaba escuchando, así que también habló.
- ¿Qué?
- ¿Sabes o recuerdas como era mi padre? Digo, físicamente. Si es que lo viste. - Decía la chica mientras acariciaba un mechón de su cabello.
Eddie la observó en silencio meditando la respuesta.
¿Que si sabia como era? Claro que si, siempre lo recordaba con solo verla a ella.- Eres idéntica a él. Tienes su cabello y sus ojos... - Le dijo torciendo una sonrisa.
Aquella respuesta llamó la atención de la chica, y después de horas de viaje, al fin se volteo para ver a su compañero.
- No sé si cambiaría, pero al menos así lo recuerdo de cuando lo vi por primera vez.
Hilda dejó escapar una sonrisa por un pensamiento pasajero. Al final de cuentas ella si había heredado algo de su padre, por no decir mucho.
El silencio nuevamente volvió a reinar entre ambos jóvenes, y así permaneció durante el resto del viaje.
Al amanecer la chica pudo ver la enorme extensión de árboles que correspondía al Gran Bosque, y más allá, el despertar de la ciudad de Trolberg. Volvía a su hogar.
- ¡Llegamos! Estamos de vuelta. - Dijo con entusiasmo en su voz dirigiéndose al rubio.
Eddie sólo asintió con lentitud admirando el Gran Bosque. Volvía al bosque que tantos recuerdos le traía.
- ¿A donde debemos ir ahora? - Preguntó él.
Ella no respondió, se quedó meditando unos segundos mientras el dragón daba la vuelta alrededor del bosque.
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Nuevas raíces: La aventura de Hilda y Woodman
FanfictionHan transcurrido 10 años desde que Hilda se fue del bosque para vivir en Trollberg con su madre y Twig. Algunas cosas habían cambiado en la vida de la chica de cabello azul. Tenía problemas que hace tiempo no hubiera imaginado que llegarían. Como l...