Capítulo 7

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Tzuyu pensó que la encontraría triste o algo, pero para nada, era la niña presumida de siempre con radiante sonrisa de conejo, sólo que ahora no se estaba durmiendo en su lugar.

Sospechaba que esta decisión era relacionada con el incidente del anterior día, y quería preguntar por aquello, pero tampoco quería quedar de chismosa, eso no le gustaba. Nayeon parecía un libro abierto para conocer, pero se dio cuenta que la menor no habla de cosas muy profundas de ella, probablemente intentando resguardar su privacidad. Le creaba cierta intriga e interés.

-¿Y por qué ya no vas a clases? Pensé que eras buena- Comentó desinteresada exteriormente.

-Quiero concentrarme en mi carrera, no voy a perder el tiempo con cosas y personas que en realidad no me interesan- El tono era desagradable, pero pasó de decirle algo y sólo rodó los ojos.

-Es mejor así...- Murmuró serio Suga.

-¡Me acompañarás a mis lecciones de canto!- Exclamó Nayeon interrumpiendolo y ganando la atención otra vez- Aunque no lo creas, esta bella voz debe seguir entrenandose

-Te vas a quedar con Taeyeon y Heechul, portate bien, tengo cosas que hacer

-¿Me harás una canción?- Preguntó emocionada Nayeon.

-No

Tzuyu pensó que estaría aburrida, no le encontraba de nada interesante a ver como una chica que le cae medianamente bien está practicando con su voz, de hecho pensó que sería desagradable tanto ruido y asumió que habrían muchos fallos, por algo era una práctica.

Pero sus ojos no se despegaban de la menor, de la concentración y pasión que ponía al cantar, del esfuerzo por seguir todas las notas que marcaba el piano a la perfección. Cuando se equivocaba hacía una pequeña mueca adorable, que provocaba a Tzuyu sonreir un poquito ante los tiernos gestos que la menor hacía sin querer.

Y no eran sólo sus ojos, la voz de Nayeon era algo a tomar en cuenta, le gustaba mucho la voz de Sana y pensó por un momento que nunca encontraría otra voz tan atractiva, pero comenzaba a dudar de esos pensamientos ante el timbre de la menor.

Nayeon soltó un suspiro algo agotado luego de una hora, que para Tzuyu sólo habían sido varios minutos en realidad de lo concentrada que estaba. Aparte de ver y escuchar a Nayeon, le interesó mucho las correcciones y consejos que le iban dando, intentando entrenar su oído para también distinguir aquello.

La menor se acercó sentandose en el mismo sofá, llevaba una sonrisa tímida pues la ponía nerviosa tener a Tzuyu mirandola tan fijamente mientras cantaba.

-¿Cómo lo hice, unnie? ¿Te gustó?- La nombrada se sonrojó, aún no se acostumbraba a su amabilidad y a ser llamada unnie.

-No estuvo tan mal- Contestó desviando la vista- Bien hecho

-Te dije que soy muy buena- Volvió a su personalidad arrogante.

Tzuyu suspiró agotada, asumió que debería acostumbrarse a ese mal hábito a pesar de odiarlo tanto. Se trasladaron a otra sala, ahora venía la práctica de baile. Entraron a esa amplia sala que contaba con una pared que era completamente un espejo, también habían unos medianos parlantes y por último el sofá que ocuparía Tzuyu para pasar el rato y observar.

Si verla cantar logró ser interesante y divertido, verla bailar lo era mucho más. Sobretodo porque Heechul le enseñaba a mejorar la coreografía con su ejemplo, era bastante bueno la verdad y Nayeon lo miraba seria a la vez que atenta. También estaba Taeyeon, que a medida que la coreografía avanzaba le señalaba que hacer con su rostro y consejos de ese estilo.

También Tzuyu debe admitir que sus ojos se pasearon por la figura de Nayeon. No estaba acostumbrada a hacer eso, sobretodo porque las coreografías que veía no solían ser del estilo sexy. Pero algunas canciones de Nayeon, a pesar de su joven edad, lograban ser de un tono y ritmo más maduro y obviamente contaban con una coreografía similar, además a pesar de no ser el Title Track también debían ensayarse.

Estaba sonrojada, pasó saliva y agradecía que no le prestaran atención.

Posteriormente se calmó a la vez de soltar unas risitas, puesto que Heechul para corregir a Nayeon ejecutó algunos de esos sexys pasos, aunque siendo él lograba el efecto contrario.

-¿De qué te ríes?- Preguntó divertida Taeyeon- Heechul es un gran bailarín

-Lo sé, no lo dudo- Contestó Tzuyu- ¿Cómo es que usted sabe tanto de baile?

-Era trainee- Respondió el mayor- Pero un accidente con mi rodilla ya no me permite bailar tan bien, o quedo muy resentido- Heechul se acercó al parlante- Bien, es hora de practicar la coreografía completa

Tzuyu se confundió, ¿Acaso no la habían practicado al completo todo ese tiempo?

Ahí entendio que era un baile en pareja, donde Heechul también participaba de la coreografía de vez en cuando y demostrando que los pasos sexys claramente se le dan. Ahí volvió a concentrarse en el baile de Nayeon, a pesar de los constantes consejos de Taeyeon sobre su expresión facial.

-... 2, 3, 4, y listo- Heechul volvió a su posición normal.

-¡Al fin!- Nayeon se dejó caer en el piso, se veía algo agotada.

-Nayeon, sólo llevamos una hora y media, aún faltan coreografías- Rezongó Taeyeon.

-Unnie, ¿Eres tú la que está bailando sin cesar aquí? No lo creo- Se puso en pie y caminó hacia Tzuyu- Chewy unnie, ¿Me apoyas?

-No me digas así- Se quejó viendo el puchero de la menor- Ten agua- Le dio la botella- Estuvo bien

-Ya es hora de comer- Dijo Heechul viendo la hora.

Tzuyu pidió a su gusto, pagaron todo por ella así que ordenó todo lo que quería. A pesar de tener buena figura, comía cuanto se le daba la gana y ya tenía bastante hambre, su genética le ayudaba. Luego se sintió un poco mal, Nayeon tenía practicamente la mitad de lo que ella pidió o incluso menos, mirando con un puchero la rica hamburguesa que estaba punto de comer.

-No te sientas mal, pequeña- Tranquilizó Heechul dandole sus palillos- Tu porción está bien y quedarás satisfecha

-Pero no es tan delicioso como eso...

-Pero es saludable- Le guiñó el ojo- Y tendrás la mejor figura de toda Corea- Nayeon dejó de quejarse y comenzó a comer.

La artista debería seguir con sus practicas con pequeños recreos de por medio, pero fueron llamadas por un serio Suga que las quería en ese mismo instante. En realidad sólo necesitaba a Nayeon, pero esta sujetó firme el brazo de Tzuyu y la arrastró con ella.

La menor estaba muy emocionada pues la cita era en el estudio de su manager, lo cual significaba que era probable una nueva canción para ella. Eso justificaría la ausencia del mayor en todo el día, cuando la inspiración lo golpeaba nadie podía sacarlo de su estudio.

Pero la felicidad de Nayeon se fue cuando no dejaron entrar a Tzuyu, un puchero adoronó sus labios, pero Suga no cedería. No podía arriesgarse a que la chica se fuera con su idea o grabara sin permiso la canción que estaba preparando.

-Aquí se terminan los dos días de visita, debes estar feliz de que acaben mucho antes- Tzuyu inexpresiva asintió, era cierto.

-¡Pero yo no quiero que se vaya aún!

-Adiós, gracias por la hospitalidad- Y Tzuyu se fue.
















#getwellsoonmina 11/07/2019

Deja de seguirme, por favor - NatzuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora