Abro mis ojos lentamente y veo a Jimin aún dormido; me siento lentamente en la cama tratando de hacer el menor ruido posible y saco mi celular del bolsillo, leo algunos mensajes y luego lo bloqueo y devuelvo al bolsillo. Volteo a verlo y noto que lentamente mueve sus párpados; abre y cierra sus ojos lentamente mientras observaba a a ambos lados hasta verme.
— Quien... ¿Quien eres tú?
— ¿Como te sientes? — pregunto y acaricio su mejilla.
— Me duele la cabeza — dice, cierra sus ojos y traga —, ¿Que hago aquí?
—Te sacaron de un lugar muy malo Jimin — digo y sonrío — ahora estás aquí, conmigo.
— ¿Quien eres tú?
— Alguien que te considera la persona más importante en su vida — sonrío nuevamente y una lágrima rueda por mi mejilla—, alguien que sería capaz de dar su vida por ti.
— Creo que no te recuerdo — dice y lentamente comienza a incorporarse —, lo siento.
— Entiendo — sonrío y coloco una almohada en su espalda —, te borraron la memoria.
— ¿Que?
— Te borraron la memoria Jimin...
— Pero — hago una pausa —, mi padre me dijo que me había golpeado la cabeza en el río...
— Jimin — digo tomando su mano —, tu padre murió al igual que tu madre.
— Eso no es cierto — dice y niega con la cabeza, sus ojos comienzan a humedecer. — Mis padres no están muertos, mi padre es el jefe...
— No — digo negando con la cabeza —, Jimin, no puedo mentir; tus padres murieron tiempo después de que llegaste a casa.
— Pero... — murmura —, ¿por que debo creerte?
— Por que te amo — digo tomando su rostro con mi mano —, por que eres lo más importante para mí y soy capas de cualquier cosa por ti, no sería capaz de mentirte Jimin.
— ¿De verdad? — pregunta y sus mejillas se ponen ligeramente rojas —, ¿De verdad me amas? No recuerdo nada... No se que decir, no se quien eres, no se tu nombre y tampoco se que sentir ante todo esto.
— Tranquilo — sonrío — poco a poco vas a recordar todo; sólo tienes que tranquilizarte y pensar, recordar lo que pasó antes de que te llevarán los Ocior.
— Ese es el clan de mi padre — dice él — bueno, del señor que dijo ser mi padre.
— Te han mentido Jimin — digo mirándolo fijamente a los ojos —, has sido el blanco de las mentiras toda tu vida...
Nuestras miradas se encuentran; sus hermosos y grueso labios tiemblan, comienzo lentamente a acercarme, sin ninguna preocupación, mis labios anhelan volver a besar los suyos otra vez después de tanto tiempo. A un centímetro de su boca mi corazón late fuerte; desesperado, repleto de sufrimientos y locura. Hasta que finalmente sus labios se unen con los míos en un beso delicado y sincero, siento su mano posarse en mi mejilla; una pequeña mordida a su la labio inferior hace que él suelte un pequeño gemido de dolor, no quiero nada, no quiero nada más que besar sus dulces labios todos los días.
— Jimin — susurro sobre sus labios—, habrán dicho mucho de mí, pero nada de eso es verdad.
— Confío en ti — sonríe —, confío en ti.
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El Príncipe ©
Fiksi Penggemar"El pasado puede volver para destrozar tu vida" Esas eran las palabras que mi madre me decía cada noche antes de dormir, seguido de un "Pero, yo estoy aquí para evitarlo" entonces volvía a dormir como el niño que era en ese entonces, nunca supe que...