Primavera en la pradera ; kth [+18]

🌙13. El templo secreto

Taehyung

El entrenamiento del sábado nunca llega, y los supresores no consiguen atrasar el celo.

Solo tengo dos cosas en mente: satisfacción y Hae.

Haejin

Un urgido balanceo me despierta junto a un familiar perfume, y abro los ojos cuando siento que algo duro me transporta.

-¿Tae? -me froto los párpados, y distingo dos ojos dorados en la oscuridad, pero mi mente todavía está dormida y no puede procesar la información-. Oye, la cama está allá… -señalo como puedo mi cama, pero Taehyung solo afianza más el agarre y mi cara choca contra su pecho demasiado caliente haciéndome callar.

¿Qué mosca le ha picado?

Miro desorientada alrededor, y me extraño cuando veo que Taehyung nos conduce por las escaleras.

-¿A dónde vamos? -me comienzo a sentir cansada, mis sentidos nublándose de repente por algún factor externo-. Taehy...

Caigo dormida cuando usa sus feromonas, estas haciendo estragos en mí.

...

El excesivo calor me hace abrir los ojos, sintiendo la necesidad de respirar aire fresco.

Vislumbro la luz de un cielo claro, un punto medio entre la noche oscura y el amanecer anaranjado.

Pero esta no es mi habitación

Intento levantarme, y observo lo que me impide moverme: Taehyung está semidesnudo en el futón, abrazándome como si la vida le fuese en ello.

Me acerco a su cara dormida hasta que sus poros son visibles, su piel recubierta por una ligera capa de sudor. Él es la fuente de extremo calor.

Pero todavía sigo desorientada y algo desconcertada, ¿dónde estamos? ¿Y cómo he llegado aquí?

Me libero de sus brazos y desenredo sus piernas de las mías para levantarme y caminar por la estancia.

Las puertas son de papel, con trazos japoneses y un fuerte color rojo, la arquitectura de madera de cerezo y una estructura inusualmente grande como para ser una casa. Me acerco a la ventana, y cuando veo nuestra casa desde las alturas todo cobra sentido, al igual que las montañas que nos rodean.

Estamos en el templo sintoísta, ese que solo se ve desde el estanque.

Taehyung me ha traído aquí mientras dormía, ¿pero para qué?, ¿por qué?

-Haejin... -una voz sin pulir habla a mis espaldas, y Taehyung me envuelve en un caliente abrazo desde detrás. Su pecho está literalmente ardiendo y luce más despierto que nunca.

-Taehyung, ¿qué hacemos a... -me doy la vuelta como puedo para mirarle, y trago duro al ver sus ojos anaranjados desnudarme. Sus ojos claros se fijan en mis pechos cubiertos, bajando por el resto de mi cuerpo y lamiéndose los labios en el proceso sin vergüenza alguna.

Algo no va bien.

-Espera... -aparto sus manos de mi cintura, moviéndome ligeramente a la izquierda para salir de la improvisada prisión entre du cuerpo y la pared. Solo me deja avanzar unos centímetros antes de aprisionarme de nuevo-. ¿Te encuentras bien?

¿A lo mejor se ha levantado con una erección mañanera y por eso está así?

-Mejor que nunca -su larga mano acaricia mi mejilla como si fuese una muñeca de porcelana, y cuando toco la piel desnuda se su pecho para apartarle se muerde el labio. Tira de mis muñecas y las rodea en su cuello, su nariz enterrándose en el mío.