🌙36. Caperucita y el lobo

24.5K 1.7K 1K
                                    

Capítulo final

Taehyung

-Venga Tae...déjame bajar.

Aparto su mano de la puerta de copiloto para posarla en mi nuca, nuestras narices pegadas con cariño

-Solo un poquito más, ¿qué son unos besitos comparado con lo que hacemos por las noches? -se sonroja cuando le guiño un ojo, pero acaba por ceder al encanto de mis labios.

Cualquier excusa me sirve con tal de que no baje del coche.

Me da un beso sin lengua que me deja con ganas de más.

-Voy a llegar tarde a clase -me empuja de los hombros a mi asiento original, pero no suelto su mano, mi inseguridad dejándose ver-. No me mires así por favor. Ya lo hemos hablado, no va a pasar nada, ¿vale?

Me ha debido de ver el miedo amarillo en los ojos, y tal vez ha notado cómo mis dedos se han enrollado en su mano con más fuerza de la normal.

Esta es la escena exacta antes de que Haejin fuera secuestrada, y mi lobo está demasiado sensible con la situación.

-Taehyung -me coge la cara entre sus manos suaves y cálidas, y me permito cerrar los ojos con ella-, tengo el móvil con 100% de batería, estoy muy fuerte de todos los entrenamientos que me has hecho hacer y puedo tumbar a alguien solo con empujarle. No nos va a separar nadie.

Me percato de cómo no ha pronunciado el nombre para mantenerse fuerte, por ella y por por los dos.

-Lo sé, pero...-me pone un dedo en los labios, y callo con una pequeña sonrisa debido a su leve y adorable molestia.

-Voy a volver a casa, daremos un paseo por el estanque y cenaremos en familia. Si no estamos demasiado cansados luego follaremos un poco y dormiremos como siempre -sus labios me regalan un beso en cada párpado, y aunque Hae no tenga feromonas me relajo visiblemente bajo su toque-. Te quiero mucho, Taehyung.

Volverá, volverá contigo y estaréis bien

Asiento para mí mismo, y le miro con lágrimas en los ojos.

-Perdona, ¿qué has dicho que vamos a hacer después de cenar? No lo he oído muy bien -sonrío como un estúpido cuando me besa suavemente la comisura del labio, y seca mis pestañas con la manga de su blusa.

Veo cómo rueda los ojos por mi comportamiento seriamente polarizado, pero no puede contener una leve sonrisa sincera que me parece preciosa.

-Lo has oído perfectamente -se acerca a mi oído, y percibo con demasiada sensibilidad el juego perverso que sus labios hacen en el cartílago-, así que vuelve a la reserva a ponerte fuerte que yo sola no puedo reventar la cama, ¿sí?

Se me dificulta tragar saliva cuando me guiña un ojo, y es más rápida que yo al salir del coche.

-No, ¡vuelve aquí! Eso es jugar sucio -imito a sus piernas dispuesto a coger a mi compañera y tumbarla en el asiento trasero para comerle la boca y algo más, pero Hae se ríe sonoramente.

-Estamos en el mundo de los humanos aburridos -me guiña un ojo burlona, citando mis palabras antiguas antes de alejarse más-. Luego visito el tuyo, alfa.

No me gusta la excesiva dependencia emocional, pero sé que mi corazón está bien en sus manos.

Hae es la única domadora que usa el amor, y no me importa una absoluta mierda esperarle como un perro espera a su humano.

...

-Lleva varios días sin hablar, está gravemente deshidratado -Jin lleva puesta su bata de forma innecesaria, pero parece querer distinguirse incluso en el bosque.

Primavera en la pradera ; kth [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora