ASMR {YUWIN💖}

💋16. Hotline

Inesperadamente WinWin contestó casi de inmediato la videollamada.

Yuta no estaba mentalmente preparado para ver al chico cubierto por una esponjosa bata blanca. Su cabello todavía estaba un poco húmedo y algunas gotitas brillaban entre una mecha y la otra.

El calor del agua había dejado su piel sensible y sonrojada. Abrió bien los ojos para no perderse ningún detalle.

La luz blanca favorecía esa maravillosa vista.

Sicheng lo saludó contento, pues había pensado todo el día en él y ahora escuchar su voz y verlo poco antes de dormir hizo su noche perfecta.

Mientras hablaba con él, se movía de un lado a otro de la habitación, ignoraba por completo que poco a poco su bata se iba aflojando lentamente.

Yuta era conocido por ser un caballero, pero ¿quién era él para hacérselo notar?

Estaba demasiado entretenido viendo la piel pálida de su torso, imaginó pasar sus dedos a lo largo de esa piel lisa como la seda. Si hubiese estado con él en la misma habitación, desde hace tiempo se hubiera encargado de aflojar por completo esa bata.

Habría pasado las manos por sus hombros, bajado por sus brazos mientras que sus labios hubieran acariciado la piel sensible de su cuello...

Tuvo que hacer un esfuerzo por concentrarse en la conversación, pero no era fácil cuando su mente tomaba otros rumbos. 

"Sabes, el otro día que nos vimos" estaba recordando WinWin. "No quería irme así de repente y dejarte solo" hizo una mueca, parecía avergonzado.

A Yuta casi se le cae el celular al escuchar esas palabras.

—Yo no quería que te fueras tampoco. 

"Me pregunto si..." comenzó a decir pero luego se mordió el labio y cambió idea.

—Si, ¿qué cosa? —Yuta moría por saber lo que iba a decir. 

Costó un poco para que al fin dijera aquellas palabras y a Yuta le pareció más que adorable. 

"Ya sabes, bueno me pregunto qué hubiera pasado si yo me hubiera quedado allí contigo un rato más". 

Claramente Yuta había fantaseado bastante sobre qué le hubiera gustado hacer y signo de eso fue que comenzó a sentir el rostro caliente. Aún así, tenía la situación perfectamente bajo control, sin embargo, su respiración aceleró repentinamente cuando el chico se recostó de lado y dejó aún más expuesta su piel, dejando ver un pezón rosado.

¿Lo estaba seduciendo a propósito? ¿Cómo diablos se grababa la pantalla en ese estúpido celular?

Su mano tenía vida propia porque ya estaba bajando a la orilla de sus pants, donde se perfilaba un bulto que pedía ser atendido. Empezó a tocarse mientras su mente volaba a todas las fantasías que tenía reservadas para el chico de labios exquisitos.

—Cualquier cosa que pudo haber pasado —su voz salió un poco más ronca. —Estoy seguro que nos hubiera encantado a los dos. 

Sicheng asintió con una sonrisita, sus ojos estaban un poco adormilados y eso volvía su aspecto una mezcla entre tierno y tentador. 

"Quizás tengamos la oportunidad de descubrirlo la próxima vez". 

—Cuando quieras, lindo. 

Siguió tocandose, su mano recorría lentamente su extensión, arriba y abajo imaginado que el otro lo estuviera acariciando.

—Sabes, me gustaría mucho tenerte aquí conmigo.

Las palabras salieron solas, lentas, casi perezosas.

Sicheng reconoció aquella mirada seductora que había visto hace un par de días. Su garganta se le secó al ver el atractivo rostro del japonés.

De su punto de vista, no existía nadie más guapo que él. Tenía un increíble encanto seductor natural, era imposible no caer rendido. Cómo deseaba su cercanía, estar en sus brazos, recibir sus caricias...

"¿Qué harías si yo estuviera allí contigo, en esa misma cama?" preguntó casi en un susurro, estaba intrigado, Yuta sabía cómo despertar sus cinco sentidos.

—Por primera cosa, te haría recostar, aquí a la par mía.

Las palabras salían lentas, en un tono bajo y dulce.

—Luego acariciaría tu rostro, te daría unos suaves besos en el cuello hasta bajar a los hombros. Acercaría mis labios a los tuyos y...

WinWin deseaba que siguieran describiendo cada detalle.

—El resto lo tienes que descubrir.

Hizo una pequeña y adorable mueca, lo estaba dejando con ganas de más pero era justo lo que el japonés quería: empujarlo más cerca de él.

Antes de despedirse, hablaron sobre la salida del día siguiente. A Yuta se le ocurrió que sería muy buena idea llevar a WinWin a relajarse a un sauna antes de ir a cenar. Sin dudar, el chico estuvo más que de acuerdo.

Esa noche para Sicheng fue difícil dormirse. La voz de Yuta resonaba en su mente, su sonrisa amplia y luminosa tenía el poder de acelerar su corazón. Suspiró lentamente y trató de tranquilizarse.

Pero era difícil, estaba ansioso ante la idea de lo que pasaría de allí en adelante. Sabía que no le quedaba mucho tiempo todavía en Corea. Sí o sí debía conquistarlo.

⭐

¡Gracias por leer! 💕

Volví 😉
he andado por allí
terminando otra historia.

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tendrá pronto
nuevos capítulos.