El sentir del cambio [COMPLETA]

CAPÍTULO XIV

El estómago de Gabriela era inmenso, y cómo no si era solo tragar y tragar, según sus lecturas era normal, no tubo ninguna complicación, pues él salía a comprar las pastillas que necesitaba, le afectaba cada vez menos, la vida de esos seres pues, tenía algo mucho más valioso, Lizzy su pequeña ya había subido de peso, esas dos eran tal para cual, tenían muchas similitudes pero no las veía juntas a menos que el estuviera presente, no le gustaba ese asunto, no le gustaba forzar a nadie a hacer algo que no les pareciera y menos que se lo ocultaran tan descaradamente, algo había sucedido entre esas dos y ninguna quería abrir la boca, pues ambas sabían muy bien lo que el tenía en contra los líos; así que decidió sacar a caminar a Gabriela, se le veía bastante cansada, y era necesario que saliera un poco y se despejara, al principio se negó pero con Philiph a su lado terminó accediendo.

Gabriela se sentía exhausta nunca creyó que el embarazo fuese tan agobiante y salir a caminar no era una gran opción para su gusto, pero a Philiph no se lo podía negar y bien se percibía que tenía algo importante que hablar con ella desde tiempo atrás.

—Gabriela, niña ¿qué es lo que sucede entre ustedes dos?— wow que directo— siento demasiado intenso el ambiente entre ustedes y bien saben ambas que no me gusta que me estén ocultando cosas, mucho menos sus sentimientos e inconformidades— diablos tiene muchas razón, pero ella no tenía ni idea— Philiph, siento decirte que ni yo lo sé, he tratado demasiado de interactuar con ella, pero no lo logro, hasta he llegado a creer que es cuestión del embarazo— Philiph no lograba entender que era lo que sucedía, pero eso ya lo averiguaría— Muy bien, te creeré, pero no me quedaré con la duda. Ahora dime ¿cómo llevas tu embarazo? Siento que en cualquier momento estallarás— y era cierto, se acercaba el momento del parto y no sabía como se llevaría a cabo eso, solo se tendría que infiltrar en algún hospital y por lo menos sabría que hacer.

Por que hasta esos casos Philiph llegaría por no arriesgar a Gabriela, si bien sabía era que sus padres la estarían buscando en cualquier hospital, casa hogar o cualquier sitio con tal de encontrarla.

En los tiempos que tenía se daba una que otra vuelta por el pueblo, para escuchar los rumores y según pudo ver, estaban dando una jugosa recompensa a la persona que la encontrase y se las llevara; nunca iba al pueblo con el mismo aspecto pues dado el caso en que lo siguieran el podría escapar fácilmente.

Philiph quiso saber más de aquella curiosa muchacha que estuvo a punto de conocer su ubicación y por lo visto era en la que Gabriela más confiaba, pero esa niña había desaparecido totalmente del pueblo y según rumores se había vuelto a su país de origen y regresaría pronto para el siguiente año escolar.

***

Los tres comían tranquilos, el viaje de Philiph no fue raro para ninguna pues el solo salía y regresaba algo tarde, ninguno hablaba hasta que como siempre Philiph dio inicio a una conversación.

—Lizzy ¿te ha gustado el libro que te regalé?— Gabriela solo observaba la escena pues le parecía lo más tierno del mundo.

— ¡me ha encantado! ¿crees qué pueda ver una sirena si voy a nadar? — rápidamente Gabriela soltó una carcajada, y ambos la observaron, Philiph con extrañeza y Lizzy con enfado—¿por qué te ríes?— cuestionó

—Lamento decirte que las sirenas no existen— dijo con simpleza, Philiph la observaba atento.

—¿no existen? ¿En serio?— dijo con los ojos cristalinos y la voz quebrada.

—No sé si lo hacen nena, pero sé que en unas horas podemos salir a buscar delfines ¿qué dices?—

—¡Sí!— gritó emocionada

— Bueno, entonces es un hecho termina de comer y luego salimos los tres a la playa ¿si?—

—¿Los tres? ¿por qué vamos los tres? —

—no vamos a ir a ningún lado— Lizzy lo volteó a ver —¿qué? ¿por qué?— Dijo Lizzy con un puchero— Necesito que me digan qué es lo que sucede entre ustedes dos, Lizzy ¿tienes algo que contarme?—

—Y-yo-yo no...— Lizzy bajó la mirada, se veía que estaba a punto de llorar, Gabriela estaba muda.

—Sé que sí, dime sabes que puedes contar conmigo ¿verdad?— le dijo colocando una mano en su hombro y le regaló una sonrisa.

—lo sé, pero duele que ella se comporte así conmigo— dijo dándole una ojeada a Gabriela ésta abrió sus ojos en sorpresa y su boca formaba una "o"

—¿te ha dicho algo malo?— preguntó, Gabriela trató de hablar pero él la detuvo diciéndole que luego seria su turno de hablar.

—sí—dijo y una lágrima resbaló por su mejilla— ¿qué te dijo?— cuestionó Philiph— ¡qué era una recogida y debí quedarme en esa casa hogar! Que mis padres nunca me quisieron, se burlaba siempre, con sus amigas, siempre que me veían — Philiph se sorprendió y la abrazó, nunca creyó que ambas se conocieran y menos que Gabriela fuera de ese tipo de chicas— ahora Gabriela ¿tienes algo que decir?

—sí, eso no es verdad, te lo juro— Philiph la observó extrañado, se veía que en cualquier momento se lanzaría a llorar— nunca la había visto, es más nunca trataría a una persona así ¡menos a una niña! A la que le encantaba hacer ese tipo de tonterías era a mi prima Jenn, siempre me confundían con ella, y me tocaba ir a dirección por su culpa hasta que me cambiaron de colegio.

>>Odio que te hayan tratado así Lizzy, no merecías eso ¿recuerdas que una vez un chico te ayudó? Yo estaba con él cuando las vimos pero me ordenó quedarme lejos pues no podían vernos juntos, las apartó de ti, pero al verlo saliste corriendo, no sé quizá por temor, pero él era el hombre más bueno y puro que conocí en mi vida.

Lizzy recordó a ese joven, creyó que las alejaba para que quedaran a solas pero al escuchar esa versión soltó en llanto, por que alguien la ayudó y no fue por que quería estar y divertirse con ella, pues fue pura amabilidad — gracias — dijo en llanto —dile que muchas gracias— eso provocó un sollozo de parte de Gabriela, lo extrañaba muchísimo— él ya no está, pero sé que el estaría muy feliz de que hayas dejado de sufrir.

Después de eso pasaron la tarde en la playa, Philiph le enseñaba a nadar a Lizzy y Gabriela se bañaba en la orilla y como Philiph prometió, pudieron ver y jugar con unos delfines, era el escenario perfecto, humanos y la fauna del lugar compartiendo juntos.

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¡hola!
Acá de nuevo ¿cómo están?
Me alegra que estén leyendo mi historia, tengo planeado muchas cosas aún (espero que se concreten) gracias por su apoyo me motivan a seguir escribiendo :')

Capítulo dedicado a @Yit4ever gracias por el apoyo el amor que le das a esta historia te quiero <3

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Nos leemos luego 😘❤