Gabriela
Mi cabeza me duele horrible, todo se encuentra oscuro, no tengo ni idea de dónde pueden estar mis padres pero mis párpados me pesan.
-¿Gabriela?- no puede ser, no puede ser él...- ¿Gab?- se escuchan unos pasos pero sigo sin ver nada, tengo miedo y sin querer suelto un sollozo rápidamente tapo mi boca para ocultarlo pero es tarde- aquí estás- me alejo rápidamente, no puede ser él, es un sueño, no creo que esté con vida, no me puede estar pasando de nuevo, no...
—Tranquila Gab, necesito que me escuches, todo va a estar bien ¿si?— siento su cuerpo aferrarse poco a poco, yo me cubro, me duele, pero lo necesito, entonces sedo, me aferro a su esencia mi cuerpo se siente febril, y el me abraza con tanto afecto, extrañaba tanto sus abrazos, es el sitio donde me siento segura, que soy capaz de todo, que nada ni nadie nos va a separar... Pero eso no es real, al menos ya no, y todo es culpa mía.—Ya, ya, debes de tranquilizarte ¿si? Todo va a estar bien—
—No... No va estar bien, ya no estás a mi lado, y te extraño demasiado — él toma mi rostro en sus manos y la ve con amor y ternura.
—Gabriela... Tú, eres la menos culpable en todo esto, tú eres una víctima más en ésta situación, nada en el mundo hará que me aleje de ti, te lo prometí ¿recuerdas?— vagos recuerdos llegan a mi mente, el miedo a saber que en cualquier momento me encontraré sola de nuevo me nubla — ya, si te dije que te amo y no me gusta que estés llena de tristeza ¿verdad?— asiendo débilmente, y lo vuelvo a abrazar, un abrazo con significado, un abrazo liberador. Llegué a sentirme el ser más repulsivo del planeta al hacerme pensar que era la responsable de la muerte de mi gran amor y el padre de mi adorado Mauricio, pasaba noches pensando y dándole miles de vueltas a los quizá, si yo quizá nunca hubiese aparecido en aquel colegio, si quizás yo lo hubiese ignorado él estuviese vivo, pero me sentía egoísta pues si yo no me hubiese involucrado con Erick nunca hubiese conocido a mi pequeño Mau y es algo que no cambiaría por nada.
— ¿en qué piensa esa bella e inteligente cabecita, eh?— me dice dándome suaves toques con el dedo en mi cien; volteo mi cabeza para poder verlo a los ojos aquellos que me volvían loca y me vuelven, que me gritaban y exigían un cálido abrazo o un dulce beso, y sin darle tantas vueltas lo hice, le di un beso del cual él me respondió al instante, no lo dudó, al principio era un beso dulce, sus labios bailaban al son de sus latidos que cada vez se volvían más frenéticos al igual que su beso, pasé los brazos por su cuello llegando a su nuca y posandolos en ese sitio, él buscando mi cercanía me tomó por la cintura, el mundo pareció dejar de girar, el tiempo dejar de correr y eso era suficiente.
Recordé el por qué de mi gran amor hacia Erick pues, luego de tiempo de poder conocernos, aprendimos a amar nuestros defectos, a resaltar y apoyar a cada una de nuestras virtudes. Las miradas eran todo, nunca fue algo de desequilibrio, nos equilibrabamos, eramos nuestra propia sintonía, pero nuestro amor no fue suficiente para hacer cambiar de parecer a nuestras familias, el odio, la avaricia y la tozudez era más fuerte. Fue una gran decepción tener que ocultar nuestro amor, pues era casi imposible ocultarlo, irradiábamos una sensación increíble que cualquier ser perceptible lo notaría, ambas familias deseaban el mal de la otra y sabernos juntos no les haría dar saltos de felicidad.
—Recordaba...—dije cabizbaja, él me tomó del mentón para poder tener fija mi mirada.
—Es bueno hacerlo— dijo acariciando mi mejilla— debemos tomar esos recuerdos como recursos, ellos nos vuelven fuertes, nos dejan ver los errores del pasado y buscar un camino distinto para los futuros —yo lo veía con devoción, siempre fue muy analítico para su edad, hubiese sido un gran psicólogo — ¿recuerdas aquel dibujo que me hiciste de una playa, cuándo fuiste de viaje con tu amiga?—asentí suavemente, él, luego de obtenerlo se lo envió a mi madre diciéndole en una pequeña nota que el color del mar le recordaba a sus ojos, lo cual ella lo tomó muy mal y lo rompió en mil pedazos, recuerdo como me enfurecí tanto con el, no debió hacer eso, aquel dibujo iba firmado y ella creyó que era una vil burla— bueno, pues eso no tiene nada que ver— y soltó una carcajada la cual la me contagió enseguida, ese era él, espontáneo, dispuesto a sacarte una sonrisa — ya, fuera de broma. Nos ayudó a comprender que la vida es dura, que existen personas de lo más inocentes, que con un simple gesto de amabilidad pueden ofender y eso es algo que se aprende, que la vida nos muestra, la falta de cariño que pueden tener muchas personas y aunque quisiéramos no podemos erradicar esas inseguridades de un solo tirón —
—te he extrañado tanto Erick— el río un poco— ¿qué es lo gracioso?—dije observándolo de nuevo.
—que eso ya me lo has dicho, y te volveré a repetir que yo nunca me fui, he estado contigo, aunque no he podido hacer mucho— un olor muy fuerte me hizo que llevara una mano a mi nariz— creo que ya va llegando la hora de despedirnos, querida— eso me hizo temblar ¿tan pronto?
—No, por favor, no me quiero despedir, no te no ruego, tienes que conocer a Mau a Lizzi y a Philiph, son los seres más puros que he conocido— estaba entrando en pánico. El negó con tranquilidad observándome con suma ternura y me tomó de las manos.
—Los conozco, necesitaba que personas buenas te rodearan, te lo dije una vez y te lo vuelvo a repetir, mereces ser feliz, sin ninguna atadura, sin ningún instante de angustia, los errores de tus antepasados no te definen, tu labras tu propio camino— al terminar de decirlo acarició mi rostro y pasó una mano por mi cabello. — Ahora amor mío, debes despertar, hay alguien muy preocupada por ti, recuerda que eres un alma pura y nada de lo que te digan puede definirte, existen personas que solo querrán dañarte, tú debes saber quién eres y serte fiel. Te amo, nunca lo olvides, dale un beso al pequeño Mau por mí ¿si? Adiós...— se acercó y dejó un casto beso en mis labios.
El olor se volvió insoportable y un dolor en la cien me hizo abrir los ojos, éstos se trataron de acoplar a la luz que era algo escasa, pero me di cuenta que había sido un sueño, un hermoso sueño, mi vista comenzó a nublarse, sentía que podía respirar con facilidad, me siento más ligera.
—Mi niña... Al fin abres esos ojitos— aquella mujer me hablaba en susurros aunque su voz denotaba emoción, por sus mejillas rodaban unas lágrimas traicioneras— mira como te han dejado, que seres tan abominables... Vamos a terminar de curar esas terribles heridas— dijo tomando un algodón con alcohol,le sonreí de lado, mis heridas estaban cicatrizando, aunque por fuera tubiese golpes por todo el cuerpo, mi alma ya estaba sanada.
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Ufff ¿qué tal? Paso por un momento de reflexión, nuestra Gabriela lo necesitaba, no es culpa suya :(
A veces tratamos de cambiar a las personas, pero ellas no desean hacerlo y en el camino nos terminan dañando y luego creemos que es culpa nuestra, que no los aceptamos tal y como son, pero deben sanar, ellos solos, sin dañar a los demás, cosas que creemos TAN chiquitas pueden resultar un gran cargo de conciencia luego.Lamento no poder actualizar tan seguido como quisiera, pero como algunos (as) saben en mi universidad no tengo vacaciones y pues en este mes me están explotando en demasía y llego con un cansancio tanto físico como mental y me bloqueo, y luego no quiero saber de nada.
Poco a poco nos vamos acercando al final ¡que nervios! Estoy emocionada por lo que sigue, aunque no lo crean ellos hacen lo que quieren y a mí de dejan a un lado 🙄 ¡ay pero como los amo! Son mis creaciones y cada una tiene una parte chiquita de mí.
Espero encontrar otro cachito de libertad para escribir pronto (lamento haberme alargado en la nota) también lamento si se va uno que otro error, es la una de la madrugada y muero de sueño, y pues a pesar de la edición se me van algunos, pero recalco que al terminarlo lo completo lo editaré y quizás le añada una que otra cosa ¿quién sabe? Mi cabeza es un completo misterio que día a día trato de investigar.
Nos leemos luego, no olviden dejar su estrellita si les gustó y compartir esta historia se los agradecería un montón, chao 💞
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El sentir del cambio [COMPLETA]
General FictionPhiliph aborrece a los seres humanos, cada vez se decepciona más de ellos, ellos le arrebataron lo que más amaba. Gabriela está envuelta en un dilema muy grande, huye de su familia por un "error" cometido por amor. ¿sentirán el cambio al compartir...