Sorry.

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El tiempo parece pasar mucho más lento mientras Dereck y yo bailamos, gracias a los tacones tan altos que llevo puestos nuestras caras están muy juntas, a solo centímetros de distancia y sus hermosos ojos parecen disfrutar de observar los míos, sonrío cuando me hace girar en propio eje y de inmediato volvemos a la posición inicial.

—Me encantas —susurra besando mi mejilla y llevando ambas manos a mi espalda. Llevo mis manos a su rostro y disfruto de la sensación de su piel rasurada contra mis palmas.

—Eres muy guapo —digo y él sonríe alzando una ceja.

—Y tú eres preciosa —toco sus labios con las yemas de mis pulgares y los besa. La canción cambia a otra igual de lenta, seguimos en la misma posición moviendo nuestras piernas suavemente.

—Eres demasiado halagador.

—Sólo digo la verdad —se encoge de hombros y sonrío.

—Cuando tenía quince tenía la cara horrorosa, llena de granos horribles y manchas por el sol, aún uso cremas para eso.

—Usé ortodoncia casi toda mi vida, mis dientes eran muy parecidos a los de un castor —dice y sonríe.

—Me gusta tus sonrisa, ahora tus dientes son perfectos.

—A mí me gusta tu hermosa carita —besa mis mejillas mientras lleva sus manos a la parte baja de mi espalda. Mi piel se eriza al contacto y sonríe—. También me encanta tu lunar de acá, me parece que es muy tierno, nada parecido a lo que eres —alzo una ceja.

—¿Me estás diciendo que no soy tierna?

—No, no eres para nada tierna, tú serías como una diosa regia, tu arma mortal sería tu exquisita belleza, todos te subestimarían pero lo que no sabrían es que eso es lo que tú buscas: encrustarte en la piel de tus adversarios y luego..., bam, atacas.

—Vaya... Me encanta como puedes crear una historia en segundos, deberías abrir una cuenta en wattpad.

—¿Qué es wattpad? —pregunta frunciendo el ceño y cuando abro la boca para contestarle una mano se posa en mi hombro haciendo que me calle.

—¿Puedo bailar con tu hermosa dama? —pregunta Harold y Dereck asiente separándose, besa mi frente y le da una palmada a Harold en el hombro. Harold sonríe tendiéndome la mano y la tomo devolviéndole la sonrisa. La canción no es tan lenta y tomamos la posición que Dereck y yo teníamos en el principio—. El pequeño Dereck está bastante flechado por ti.

—Supongo que yo también por él —digo y él me observa fijamente, sonríe y sacude su cabeza.

—Linda, nunca dejes para mañana lo que puedes hacer hoy —frunzo el ceño confundida por su comentario y miro por encima de su hombro cuando la silueta de Dereck llama mi atención, está bailando con una mujer bastante bonita, cabello rojizo hasta sus hombros, piel blanca como la leche, bastante alta y curvilínea—. Es la hija de Demián —dice Harold y lo observo.

—Yo..., lo siento, no...

—¿Y por qué debes sentirlo? Los celos son la cosa más normal del mundo, dímelo a mí que tengo cuarenta años casado —alzo las cejas con asombro—, los primeros son los más duros, las costumbres, las diferencias, los distintos modos de vivir, pero los que pasan luego —sonríe ampliamente antes de proseguir—, esos son los mejores años de mi existencia. Me entristece saber que ahora hayan más divorcios que matrimonios, pero me alegra saber que al menos todavía existen personas que se miran como tú y Dereck.

—¿Puedo besar tu mejilla? —él sonríe asintiendo y lo hago, al separarme de nuevo él observa detrás de mí y llevo mi vista a donde él ve. Bianca sonríe saludándonos y suelto la mano de Harold para sacurdirla en su dirección en señal de saludo. Observo de nuevo a Dereck y siento mi sangre hervir cuando veo a la pelirroja hablar animadamente mientras él sonríe y bailan.

Club + 18 [Diosa#1] EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora