Ali.
Me siento muy mal, demasiado mal, nunca he sido una mala persona, siempre me he sentido mal cuando hago algo que no estuvo bien y se que le falle a Joe, nunca imagine que me sentiría asi con el, siempre que le hago algo a él, me siento tan bien, pero esta vez se que lo que paso fue mi culpa.
La forma en la que lo miraba Aarón, la decepción en la voz de Alejandro, todo indicaba que el problema fue mucho mas grande de lo que era. Respiré hondo, había estado mirando a Joe desde hace cinco minutos, esta sentado en las escaleras de la puerta principal, son las once de la noche y el sigue ahí, todos están dormidos, pero el sigue ahí y se que lo que hice lo lastimo, pero no lo va a aceptar. El pudo decir la verdad y la que estaría en problemas seria yo, es a mi a quien deberían de verme con decepción.
-Lo siento- el sigue sin mirarme, me siento a su lado. - En serio, te agradezco que no les contaras nada, pero ahora hasta deseo que lo hagas, la que se merece ese regaño soy yo.
- No diré nada. - mira el suelo, no entiendo a que se refiere.
- ¿En serio?
- Con una condición. - respiro hondo- yo iré contigo, yo estaré contigo hasta que cumplas esa lista.
- Pero...
- Pero nada, no esta a discusión. - se levanta sin decirme nada. - Espero que mañana me llames para que te acompañe, realmente espero eso, si dices lamentarlo tanto, lo harás y si no lo haces, no te preocupes, puedo encontrarte como lo hice hoy.
- Bien- dije antes de que entrara a la casa, no podía decirle que no, si eso era lo que quería por guardar mi secreto, por no decir nada de mi tatuaje y sobre todo que casi muero ahogada por mi locura, no me quedaba de otra que cumplir. - pero no puedes hacer muchas preguntas, ni detenerme.
- No dejaré que mueras Ali, si veo que tu vida corre peligro, no me quedaré solo para ver. – acepto su condición.
Entra a la casa, me deja sola, es tan extraño, es la primera vez que hablo con el sin insultarlo, es la primera vez que lo sentí tan familiar, como un amigo que como un enemigo con el cual me peleaba desde niña. Al menos podía llamarle a esto una tregua, el problema es que no sabia si me gustaba mas mi antigua relación con el, o esta nueva forma de vernos.
A la mañana siguiente, estoy algo preocupada por lo que sucedió el día anterior. Mire a Alejandro ignorar a Joe como si el no estuviera en la casa, aun estaba enfadado y la verdad no sabia como arreglarlo. Cristina también parecía preocupada, por eso no fue raro cuando me busco en mi habitación.
-Los niños ya llegaron- la miro en la puerta, esta mirándome, se que espera a que hable.
- ¿Hablaste con mi padre sobre lo que paso ayer? - bajo la mirada porque no puedo ni siquiera verla.
- No, en realidad no se lo que paso ayer. - resoplo.
- Aarón pensó que Joe me lastimo porque nos vio teniendo una pequeña discusión, y porque vio una marca en mi muñeca. - miro mi muñeca ahora solo tengo un moretón negro, ya menos visible que el día anterior.
- ¿Por qué discutían? – ella se sienta a mi lado, se que sabe que algo le oculto, siempre presiente que yo no le digo la verdad por completo.
- Ya sabes, las mismas locuras de siempre, pero estamos bien ahora.
- ¿y ese moretón? ¿Cómo paso?
- Joe me tomo de la muñeca, mi piel es muy exagerada, tal vez el me tomo un poco mas fuerte de lo normal, pero no fue a propósito, tu conoces a Joe, podrá decirme muchas tonterías, pero nunca se ha atrevido a agredirme.
- Alejandro esta muy desconcertado, piensa que Joe esta fuera de control. Cuando su madre vivía, Joe tenia un estudio fotográfico, siempre ha tenido algunos problemas y bueno los últimos años se alejo algo de Alejandro, ahora parecen dos desconocidos, pero después de la muerte de su madre el se ha vuelto algo diferente, vendió su estudio fotográfico, se metió en problemas de dinero y estuvo involucrado en una pelea contra varios hombres, tal vez el es mayor pero no esta en sus cinco sentidos. Alejandro le pidió que viniera que se tomara unos días para pensar que hará con su vida y Joe acepto. - Ahora entendía un poco el comportamiento de Joe, lograba comprender porque tuvo que irse de su país, porque vendió su estudio fotográfico o porque ha dejado de tomar fotografías.
- Alejandro esta decepcionado, ¿no es así?
- Alejandro no comprende el comportamiento de Joe, pero entiende que esta pasando por algo difícil, espera que Joe lo supere y pueda seguir adelante.
- Joe parece tan alejado, es diferente a otras veces que lo he visto, antes se la pasaba pegado a su cámara, ahora solo lo he visto con ella el día de la boda, aun así lo veo sonreír, pero si parece algo fuera de si.
- Solo te pido que te mantengas alejada de el, yo creo que Joe necesita tiempo para pensar, la verdad ustedes nos son buenos amigos, tal vez, por ahora no deberían ni pelear, no sabes como podría reaccionar.
- El no quiere mi lastima- susurro- me lo dijo
- Solo apártate, no discutan... Ali, recuerda que hoy tienes trabajo en la oficina- Cristina me deja a solas, pero en realidad no se que creer con Joe, si parece afectado por la muerte de su madre, aunque no la he mencionado.
Después de cuidar a los niños, estoy por salir de la casa, para ir a mi escuela. Miro la puerta de la habitación de Joe, sigue encerrado no ha salido en todo el día, parece que no es un buen día para hablar con el.
- ¡Sube al auto! - doy un brinco, cuando escucho a Joe gritarme desde uno de los autos de Alejandro.
- ¿Qué haces ahí? - cuando esperaba que ya me había librado de el.
- Te llevaré a tu escuela- rechina los dientes.
- Joe, no soy una niña, ni soy una mentirosa. No planeo hacer nada de la lista hoy, tengo muchas cosas que hacer. - me abre la puerta del copiloto, me ignora por completo.
- Sube al auto, te llevaré a tu escuela y a tus otros compromisos- parece tan seguro de si.
- Vamos... no quiero pasar todo el día contigo.
- Seré tu chofer personal. - resoplo. - Será divertido, pasaremos tiempo juntos.
- Créeme, lo que esta familia no necesita- apunto la casa de los Alvarado- es que tu y yo estemos juntos. – Tiene una enorme sonrisa. - ¿De qué te ríes, idiota? - ahora ríe con mas fuerza
- No te sientas tan importante, ricitos de oro- pongo los ojos en blanco. - Solo me cercioro que no hagas una tontería... tu y yo- nos apunta- no estamos juntos, no me caes bien- abro la boca sorprendida.
- Tú tampoco me caes bien. - asiente.
- Ahora sube al carro. - levanto una ceja.
- Bien, pero no te gustara ser mi chofer.
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Quédate Conmigo #5. Atrévete a quedarte (Completada) Wattys 2020
RomansaSinopsis. La familia cada vez es mas grande, todo parece de color de rosa. Al menos eso piensa Ali, quien cree que cada vez esta cumpliendo sus objetivos, logrando alcanzar cada punto de la lista que estableció desde jovencita, convirtiéndose en la...