Ellos. {Gemeliers} TERMINADO

Capitulo Diecinueve / Temp. 2

*Narra Alba*

No sé cuanto tiempo llevaba aqui encerrada. Tampoco quería saberlo solo me bastaba con quedarme aquí para desahogarme en silencio y sola; completamente sola.

Eso era lo que más necesitaba ahora mismo y lo que mejor me venía y le daba gracias a dios porque nadie entrara al baño en este período de tiempo en el cual yo seguía aqui, llorando.

Poco a poco me fui calmando, una vez que ya no lloraba a penas me levanté del suelo donde estaba sentada y me dispuse a abrir la puerta.

Pero justamente segundos antes de que pusiera abrir la puerta alguien entró al baño gritando mi nombre.

- ¡¡¡ALBA!!!- no era 'alguien' era él.

¿Para qué venía a buscarme después de todo lo que me ha hecho?

No lo entondía, ni tampoco quería.

Opté por cerrar lo poco que había abierto de la puerta, echar el pestilla y sentarme en el váter en silencio a esperar que se vaya.

Creí que mi plan iba a salir bien, que ilusa fui.

Solo dos o tres minutos después de haberme sentado empezaron a dar golpes en la puerta de la cabina donde yo estaba.

Y no paraba de repetir lo mismo.

- ¡ALBA SAL, TENEMOS QUE HABLAR!- siempre decía lo mismo, pero yo no estaba dispuesta a hablar con él.

Simplemente no quería saber nada de él.

Después de un rato dando golpes y que yo no abriera, dejó de darlos y escuché unos pasos alejandose.

Se había ido.

Por fin se había cansado e ido.

*Narra Dani*

Sabía que Alba estaba encerrada en esa cabina, pero también sabía que no iba a salir estando yo aqui.

No me quería escuchar, eso era obvio, pero ¿por qué?

Si escuchó a la zorra esa, ¿por qué no me escucha a mí?

Ella siempre me ha dicho que para sacar conclusiones de una historia tienes que escuchar las dos partes; pues se ve que ella mucho decirlo, pero poco hacerlo.

Una idea se me pasó por la cabeza.

Dejé de dar golpes en la puerta e hice paso cad vez la lentos como si me estuviera yendo.

Una vez que terminé, me encerré en la cabina de al lado en la que estaba ella.

Hoy me escucharía, quisiera o no.

Tenía que explicarle todo lo que pasó aquella noche que tanto me había amargado la vida.

Era como si me la hubieran arrancado de cuajo, porque Alba era mi vida y ya no estaba en ella; pero eso sería por poco tiempo.

Después de unos minutos escuché como se abría lentamente la puerta de Alba.

Esperé unos segundos y cuando escuché el grifo del lavabo abrirse, decidí salir.

Alba estaba echandose agua en la cara, por lo tanto no tenía sus dos manos sobre su rostro y no veía nada.

Me coloqué justamente detrás de ella y por la diferencia de altura, cuando se incorporara me vería perfectamente.

Después de otros segundos, que se me hicieron eternos, por fin levantó la cabeza.

Su cara se descompuso al verme allí.

Sus ágiles manos agarraron su bolso y se dispuso a salir; pero mis manos se lo impidieron cogiendola de la cintura  pegando su espalda a mi pecho.

- Sueltame.- dijo, bueno, más bien susurró.

- No.- le dije en el oido.

Su piel se erizó bajo el contacto de mi piel, ya que una de mis manos se había metido por debajo de la camiseta sin querer.

- Dani sueltame o te juro que grito.- dijo esta vez con vos normal.

- No.- volví a decir.

Cogió aire por la boca, abrió la boca, pero justo antes de que empezara a gritar una de mis manos de posó en su boca, haciendo así, que solo salieran ruidos extraños.

Le di la vuelta y me quedé viendo sus preciosos ojos.

Eran los más bonitos que he visto y veré en toda mi vida.

- Te quito la mano si me prometes que me escucharas.- le dije.

Ella solo se limitó a asentir.

Lentamente retiré mi mano de su boca, pero antes de terminar de retirarla noté como me clavaba los dientes.

Me había mordido.

- ¿Pero qué coño?- pregunté mirandome la mano.

La otra seguía reteniendola apegada a mí.

Intentó zafarse de mi agarre pero estaba claro que yo era mucho más fuerte que ella.

- Así que solo me has mordido para ver si yo bajaba la guardia y te me escapabas, ¿ehh?- le pregunté, aun sabiendo la respuesta.

- Sí.- escupuió ella como si la palabra llevara veneno o algo.

- Me has prometido que me ibas a escuchar y me vas a escuchar.- le dije.

To tal tampoco me había dolido tanto el mordisco, no es que tuviera tampoco mucha fuerza en la mandíbula.

Ella soltó un bufido y se destensó entre mis brazos.

Dandome a entender que me iba a escuchar.

Así que me dispuse a hablar.

- ...

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HOLA HOLA!!!!

HE VUELTO, Y ESPERO QUE OS GUSTE EL CAP :D

JODER SOLO QUEDAN 11 CAPS Y EL EPÍLOGO PARA TERMINAR ESTA NOVE :((((((((((((((

PERO BUENO LAS BUENAS NOTICIAS ES QUE CONTINUO CON OTRAS NOVES :))))

ESTOY SUPER FELIZZ PORQUE YA ESTAMOS EN 122K DE LEIDAS Y ESTOY HAPPY, GRACIAS A TOD@S LOS QUE LO HACEIS POSIBLE, BESIS MUAKS MUAKS

PIDO 44 VOTOS Y 26 COMENTARIOS

ATT; SU SEY ESCRITORA

XOXO