Fullsun's Pack.

#2

Cuando se dio cuenta que le gustaba Mark, creyó sentir que su mundo se resquebraba. Mark nunca podría corresponderle, Mark no lo amaría, Mark lo dejaría.

Aún así lo intentó y le dio todo el amor que guardaba para sí mismo. Mark no le correspondía, Mark no lo amaba, pero aún así, tomó lo único que podía apreciar.

Su primera vez fue con Mark. Rápido, torpe, brusco.

Mark no podría amarle, pero Haechan apreciaba tener su cuerpo en noches de soledad.

Un día Mark se detuvo, recuerda como salió de su interior, aún con una erección entre sus piernas, dio un beso sobre su frente y, acomodándose su ropa y tirando el condón usado, salió de la habitación.

— Ya no podemos hacer esto, Fullsun— comentó un día tomando su mano, semanas después de su último encuentro— Te amo, pero no como de la manera en que tú me miras.

— ¿Y que está mal? — cuestionó mirando el perfil de su acompañante— No necesito que me ames, yo puedo amarnos por los dos.

—Eso es lo que está mal, Hyuck—cuando sus ojos se enfrentaron supo que las palabras de Mark le dañaría— Amo a Taeyong-hyung y aceptaré su invitación a la manada, Hyuck. Esto es lo que soñé desde que era un rookie, solo quería ser parte de él. Espero que puedas formar un vinculo tan fuerte que te de alegría volver a casa y despertar cuatro horas después para volver a trabajar, realmente lo deseo, Hyuck, porque lo mereces. Mereces un amor donde no seas el único amante.

— ¿Puedo besarte? — pidió con lágrimas picando en sus ojos.

— No, Fullsun, no puedo hacerte eso— contestó antes de recibir entre sus brazos los sollozos de Haechan.

— Te amo, Mark— confesó entre lágrimas—, prométeme que serás feliz y que no te convertirás en un alfa patán sin sentimientos.

—Lo prometeré solo si cambio sigues siendo mi pequeño Fullsun, Hyuck.

Haechan sonrió al sentir una caricia en su mejilla. Abrió sus ojos con pesadez, Chenle limpiaba lágrimas de su rostro con cariño. Suspiró, sin borrar la gran sonrisa de sus labios, aspirando los últimos rastros de sandía en la habitación.

— ¿Hyung? — cuestionó el menor al sentir los brazos de Haechan rodeándolo.

— Solo necesito impregnarme en tu aroma a bebé, Chenle. Luego les pediré su ayuda para llevar las cosas de Mark al departamento principal y debemos hacer una limpieza profunda en la habitación.

— ¿Estará bien, hyung?— susurró, acariciando su rostro.

— Lo estaré, Chenle, pero quizás necesite un poco de mimos y tiempo.