El Final del las Vacaciones: Au Revoir, Asagi

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El resto de los días de vacaciones se fue demasiado rápido, al igual que Navidad, celebramos el Año Nuevo en la playa y luego salimos de parranda a una de las tantas fiestas que se organizaban en la ciudad a orillas del mar, fuimos a un parque de ...

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El resto de los días de vacaciones se fue demasiado rápido, al igual que Navidad, celebramos el Año Nuevo en la playa y luego salimos de parranda a una de las tantas fiestas que se organizaban en la ciudad a orillas del mar, fuimos a un parque de agua, repetimos el paintball e incluso hicimos una excursión para hacer snorkell. Pero todo en esta vida tiene un final y, por más de que ninguno de nosotros quería irse, en nuestros hogares nos esperaban los libros para estudiar para nuestros exámenes de ingreso a la universidad.

El viaje de regreso fue un poco más incómodo que a la ida porque Demonio iba con nosotros pero nos la supimos arreglar. Llegamos bastante cansados luego de diez horas de viaje, con ganas de una buena ducha y la comodidad de nuestra cama; Kentin fue dejándonos uno por uno en nuestras casas, hasta que llegó a la mía.

-Muchas gracias por todo esto, de verdad-le dije mientras le daba un beso-Pasé unas vacaciones geniales.

-De nada-me dijo acariciando mi rostro, pegó su frente a la mía y cerró los ojos, suspiró y sentí algo de pesar en él.

-¿Te pasa algo?-pregunté sin despegar mi mirada de él, Kentin negó con la cabeza suavemente aún con los ojos cerrados.

-No es nada, es solo... Que después de vivir un mes a tu lado... Ya no me quiero separar de ti-susurró, sentí que me derretía de amor con lo que me acababa de decir.

-¿No estás harto de mí?-reí, él abrió sus hermosos ojos y me miró serio.

-Claro que no ¿Acaso tú sí?

-Ay, Kentin... Siempre te tomas todo lo que te digo demasiado personal-suspiré con una sonrisa-No. No estoy harta de tí.

-¿Y entonces? No entiendo tu pregunta.

-Era solo una broma, mi amor. Nada más-le acaricié suavemente el cabello-Pero sí. Siento lo mismo que tí. Me acostumbré a abrazarte al dormir. A escuchar tu corazón latiendo y tu respiración, ahora no sé cómo voy a poder conciliar el sueño.

Volvió a pegar su frente contra la mía y nuevamente cerró sus ojos.

-Ay, hermosa... Me cuesta separarme de tí...-suspiró-Así que simplemente voy a soltarte y a irme lo más rápido posible antes que tu papá me saque a patadas de aquí.

Dejé salir una risa pues él jamás haría eso, quizás sí cuando apenas habíamos empezado a salir pero no ahora que ya lo conocía bien y le había tomado cariño. Sentí sus labios contra los mios en un tierno beso y como los brazos de Kentin aflojaron su agarre para soltarme

-Descansa, te veo mañana.

-Claro. Te amo.

-Yo también, hermosa.

Sólo cerré la puerta de casa cuando el Jeep de Kentin se perdió de vista, tomé mi maleta y subí las escaleras arrastrando los pies. Fuser me esperaba en mi dormitorio, acostado en su cojín y abrazado a su peluche favorito: Un Winnie Pooh que había sufrido una ligera deformación al pasar por las fauces de mi perro. Me desvestí y fui derecho a la ducha, una vez higienizada me puse un pijama cómodo y me acosté en mi cama, mi celular vibró en mi mesa de luz, era un mensaje de Kentin.

Corazón de Melón (libro #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora