Mi guardaespaldas.

CAPITULO 4 (Una mala jugada-Parte 2)

Tessa

Me estoy empezando a arrepentir de haber venido a esta fiesta.

40 minutos de viaje para llegar a casa del capullo de Nathan el chico más popular del instituto, ¿Acaso no hay que tener invitación para venir a estas cosas?
Maldita Suyin porque siempre me tienes que convencer para venir a todas estas mierdas-pienso sin decirlo en voz alta mientras esta se ríe divertida a mi lado de alguna cosa que ha dicho Joe pero no le he prestado atención en todo el camino apesar de que este me observa cada dos minutos por el espejo retrovisor.

-Estas bien pequeña? - se preocupa mi ex mejor amigo haciéndome sentir incómoda por el mote, sé que lo ha hecho aposta para recordar viejos tiempos pero no va a conseguir nada.El único sentimiento que tenía hacia él era amistad, y parece que nunca ha pillado ese concepto-Estas muy callada.
-Me marea estar en el coche mucho tiempo-miento sin apartar los ojos de la ventana y este asiente con la cabeza sin acabar de creérselo-Falta mucho para llegar a la fiesta?
-Acabamos de llegar, es esa casa-contesta Suyin señalando una enorme mansión azul en la que ya hay gente tirada por el suelo borracha  en el camino del jardín-Tessa,vamos!!-me vuelve a llamar mi amiga abriéndome la puerta del coche  al ver que me he quedado empanada-De verdad que estas bien?

-Sabes perfectamente lo que me pasa-murmuro señalando a Joe disimuladamente y esta solo sonríe de forma inocente enredando mi cuello con el brazo-Va enserio, estoy muy incómoda.
-Era la única persona que nos podía traer y solo va a ser una noche-promete dándome un pequeño beso en la mejilla antes de adelantarme por el camino del jardín y dar saltitos con alegría hasta la puerta de la mansión.
-Así que... esta noche me va a tocar cuidarte-suspira el castaño con voz tranquila caminando a mi lado-Como cuando eramos mejores amigos y tenía que llevarte a tu casa porque no podías ni andar...te acuerdas de esa fiesta en la que...?
-Joe-lo interrumpo cansada de sus intenciones-Deja de intentar sacar recuerdos porque tu ya no me conoces, no me conoces nada de nada porque ya no soy la Tessa que era antes, siempre me van a quedar los buenos momentos contigo eras como un hermano para mi pero los años pasan, y yo ya no te necesito-explico sintiéndome mal por el brillo de dolor en sus ojos color café, tenía que dejárselo claro-Lo siento pero no puedes volver después de tres años y pretender que esa niña de 13 años siga esperándote,las personas cambian.
-Lo he entendido-susurra apenado con la respiración entrecortada mirándome fijamente a los ojos-Siempre te voy a querer.

-Que te vaya bien la vida, ahora si me disculpas tengo que entrar y buscar a Suyin-son las últimas palabras que le dedico cerrando los ojos con fuerza al ver como Joe desaparece de mi vista yéndose a la parte de atrás de la casa.
Realmente me sabe mal por el pero no quiero tener más dramas. Esta noche quiero olvidarme de todo y pasármelo bien ,y lo voy a hacer.

-Tess!!!-me despierta una voz femenina mientras intento caminar entre la gente empujando a un grupo de chicas borrachas que se me ponen a bailar twerking en todo el medio pegándome el culo y restregándolo contra mi, seguramente se piensen que soy un chico o lesbiana-Ehh a zorrear a otra parte!!- reconozco la voz de Jenna y suelto una cargada viendo como mi amiga les pega un empujón que casi las tira al suelo para  alejarlas de mi-No sabia que te iban las tías.
-No seas gilipollas-me río señalando el vaso que tiene en la mano-Me das un poco?
-Todo tuyo, no sé lo que es pero sabe a  fresa... Odio la fresa-se queja poniendo una mueca de asco mientras me bebo el líquido de un  sorbo sin rechistar-Que rara eres hermana.
-Donde estabas ayer que no viniste a la escuela ?-cambio de tema acordándome de que Suyin me había dicho que estaba enferma y sé que se ha saltado las clases cuando se encoge de hombros sirviendome otro vaso pero este tiene sabor a Coca-Cola, me encanta-Quieres otro más? No te pases Tessa que acabas de llegar...

-Vámonos a la pista a bailar! - grito para que me oiga por encima de la música cogiéndola de la muñeca y esta se deja llevar al centro del salón sorprendida por mi motivación.
-Me encanta cuando no eres una aburrida de mierda-bromea meneando las caderas a sintonia de la música al igual que yo y la ignoro cerrando los ojos disfrutando de mi momento de libertad mientras me llevo las manos a mi pelo rubio y noto que alguien me agarra por detrás pegándome a su pecho, no me detengo.
-Que bien mueves ese culito, preciosa-me susurra una voz masculina pero lo ignoro sin parar de moverme dejando que me bese el cuello, no me incómoda y tampoco me esta metiendo mano, estoy demasiado a mi aire sin que nadie me ordene lo que tengo que hacer. Y sienta realmente genial esa sensación-Me estas poniendo muchísimo rubia, no pares-súplica apartandome el pelo para darme mordiscos en la oreja.