Mi guardaespaldas.

CAPITULO 21 (Cambios Radicales - Ethan)

Ethan

No lo soporto más.

Han pasado cuatro días desde que me fui de esa casa, desde que no veo a Tessa, desde que no he dormido, desde que no he comido y desde que no doy señales de vida. Igualmente no tengo a nadie que se preocupe por mi, nadie que no sea ella.

-¡Mira Ethan!-grita Sasha haciendo una de esas volteretas laterales, sonrio forzadamente viendo lo ilusionada que está de que le haya salido. Su hermano bosteza con el pelo revuelto recién levantado. Lo único que me han distraído son estos dos niños del maligno-¿Que te pasa tete? - pregunta preocupada viniendo a mi a zancadas con esas diminutas piernas. El apodo se lo enseñé yo y desde entonces no ha parado de llamarme así, soy una especie de hermano mayor para ellos.

-No me pasa nada,mocosa-miento sin apartar los ojos del móvil. Joder, la echo de menos.
-¿Echas de menos a Tessa?-me leen el pensamiento hablando los dos a la vez. Se miran entre ellos y empiezan a reírse. Cada día me dan más miedo.

Asiento con la cabeza.

Voy a romper la promesa que le hice a Vance antes de irme pero me da igual.

Al principio cuando hablé con mi actual ex jefe, pensaba que sería lo mejor para ella. Ahora lo único que tengo son ganas de morirme de haber pensando esa idea.
¿Que estará haciendo? ¿Se habrá dado cuenta de que esta mejor sin mi? ¿Se acordará de mi tanto como yo de ella?
Soy una maldito egoísta porque no me la merezco, no me la merezco en absoluto pero solo de pensar que va a estar con otro guardaespaldas...me consume y enfada por dentro, no lo soporto.

Solo espero que Vance no haya contratado a otro.

-Mucho-susurro sintiendo que mis ojos empiezan a humedecerse. Estoy llorando como una maldita nenaza y Sasha frunce el ceño sorprendida secando mis mejillas con un pañuelo. Esto es de lo más humillante pero llevo reteniendo mis sentimientos demasiado tiempo-No os preocupéis por mi chicos, estoy bien.

-Eres un mentiroso-afirman los dos niños hablando al mismo tiempo pero esta vez no se ríen. Sasha me abraza con sus pequeño cuerpo y le devuelvo el abrazo rodeándola con los brazos. Tristan tarda unos segundos en reaccionar y viene corriendo uniéndose a nosotros.

-Siento que ya no puedas estar con chica guapa-me compadece el niño con los ojos brillantes. El también la echa de menos pero no por las mismas razones que yo, el enano quiere quitarme a la rubia-Es muy guapa.

-Lo sé-respondo con firmeza apretando la mandíbula. Tengo que aprender a no ponerme celoso por cualquier cosa, solo es un niño pequeño con un amor platónico.

-A ver tontos del culo, espabilar y recoger todas las cosas. Vamos a ver a mi cuñada-ordena Sasha bajando de mis piernas de un salto torpe. Su hermano y yo la miramos confusos mientras ella coge su pequeña maleta que aún no ha abierto y se cruza de brazos en la puerta principal del apartamento que me ha pagado Vance.-¡Vamos, idiotas!

Tessa

Cuatro días desde que no lo veo.

A la mañana siguiente abro los ojos perezosa y me levanto de la cama sin ganas de vivir. Los días se me están haciendo eternos.

Camino descalza por las escaleras y bajo al primer piso frotando mis párpados con las manos. Seguro que mi padre ya se ha levantado y está desayunando con Liam en la cocina.

Estarán deseosos en seguir amargando mi existencia. Los odio, los odio a ambos por hacer todo lo que me están haciendo. Ojalá se atraganten con las tostadas.

-Buenos días, cariño-me saluda Penny con la misma sonrisa encantadora de todas las mañanas. Sé que ella tampoco está agusto en esta casa. Ayer vi como se encerraba en su habitación al ver como me pegaba el nuevo guardaespaldas delante de Vance.
Al fin y al cabo soy como su nieta, he pasado más tiempo con ella de pequeña que con mi padre. Me ha visto crecer, me ha alimentado, y me ha cuidado cuando murió mi madre. Amo a esta anciana cocinera más de lo que ella piensa.