«22»

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Siete meses de embarazo y cada vez me sentía más cansado.

-Magnus: ¿Puedes creer que en dos meses va a estar con nosotros?

-Paso el tiempo muy rápido.

-Magnus: Ya quiero conocerla, espero que sea igual a ti.

-No a ti.

-Magnus: A ti.

-A ti.

-Magnus: Bien como sea.

-Como sea.

-Magnus: A ti.

Me reí.

-Mañana Clary nos dará la habitación.

-Si y nos falta comprar más ropa.

-Magnus: Podemos ir esta tarde.

-Si.

-Magnus: Bien.

Besó mi nariz.

Le dije a las chicas que se fueran temprano porque este fin de semana irian a ver a sus familias aunque se negaron las convencí de que Magnus llegaría temprano.

-Clary: Alec ya me voy. Puedes ir a ver la habitación cuando llegue Magnus.

-Si, buen fin de semana.

-Clary: Gracias.

-Jace: Regreso el lunes.

-Si regresas embarazado te mato.

-Jace: Si.

-Que se diviertan.

Ellos se fueron, Izzy estaba en un pijamada con sus amigas. Recibí una llamada de Magnus.

-Magnus: Hola cariño.

-Hola.

-Magnus: No podre ir a comprar ropa contigo surgió una emergencia en uno de mis hoteles ya voy a tomar un avión hacia haya y regresaré en la madrugada.

-¿En serio?

-Magnus: Si.

-Esta bien... ¿Paso algo malo?

-Magnus: Solo cosas del trabajo. cuidate.

-Tu también, adiós.

Colgué, estaba algo triste, todos habian salido el fin de semana pero yo no.

Fui a entrar a la habitación de Cacahuate y ya estaba lista, lista para recibir a mi hija. En verdad ya casi vas a llegar pequeña.

A Clary se le cayo un pasador, lo recogí pero me sentí mal, todo me dio vueltas y después nada.



























Creo que he dormido mucho pero sigo cansado, aquí no huele a la cama de Magnus, escuchó una voz que me esta llamando.

-Javier: ¿Alec?

-¿Dónde estoy?

-Javier: Santa madre de dios. No me vuelvas a asustar así que te mato.

-¿Qué paso?

-Javier: El señor Bane me hubiera matado a mi y ¿Dónde conseguiría a otro Alec?, No creo que te pudiera buscar un doble el señor Bane se hubiera dado cuenta...

-¡Javier!

-Javier: Lo siento Alec, te estábamos buscando para que bajaras a comer porque eres muy tragón y era raro que no estuvieras molestando en la cocina así que las chicas se preocuparon y como no había ningún guardaespaldas nos pusimos a buscar todos, los jardineros, las cocineras, las amas de llaves y yo y nada hasta que Linda te encontró tirado en el cuarto de la bebé y llame a una ambulancia y, y, y, y trate de hablar con sus hermanos y el señor Bane pero ninguno me responde, el señor Bane se va enojar.

¿Qué hacemos? (MALEC) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora