COMPROMISO || Albalia

17

ALBA

Camino y observo el bello paisaje, la calle no es tan transitada, hay tiendas de flores y son bellísimas. Hay una tienda de dulces. Creo que este lugar sabe como sacarme del malhumor. Llego a una plaza y me siento en uno de los bancos, aquí me quedo observando todo pero al rato unos cuatro tipos se posicionan delante mio impidiendome la vista.

-Miren chicos que preciosa muñeca encontramos aquí - habla uno de ellos que tiene un acento raro a los brasileros. Creo que es de algún país por aquí si no me equivoco colombiano.

-Si, muy linda y que curvas tesoro - habla otro que está al lado del otro que habló recién.

Estoy asustada a niveles incalculables.

-¿Qué quieren?-  me levanto y los enfrento ¿De dónde saco el coraje? Ni yo lo sé.

-A ti hermosa- habla sonriendo.

-Como me toquen armaré un alboroto aquí mismo.

-Nosotros somos simple vendedores ambulantes - olvidé ese detalle.

-¿Ustedes de dónde son? Su acento no es portugués - frunzo mi entrecejo.

-Obvio que no somos de aqui, bueno no todos, el y yo somos de Colombia - si ya decía que tienen ese acento, ese que tanto imitamos con mis amigas. Pero ahora no tenía ganas de hacerlo por más que lo amara.

-Bueno me tengo que ir - paso por su lado para librarme de la situación.

-Ttttt - chasquea la lengua en forma de negación.

-Déjenmen en paz. - empujo al que está estorbando mi pasada, intento salir de ahí pero me toman de la muñeca - Déjame.

De un momento a otro estoy en su hombro, cargada como una bolsa de papas. Siento miedo, no sé qué pueden hacer conmigo. Mi pulso se acelera y comienzo a sudar a causa del miedo.

-Déjame idiota.- comienzo a patalear y a  pegarle pero nada, son muy fuertes.

-Te dijo que la sueltes o qué parte no entendiste.

El idiota se detiene en seco y se da vuelta para ver. Ahora yo no puedo verla pero sé que es Natalia quien los está enfrentando.

-Si, la escuché pero no quiero bonita.

-Me importa un carajo si no quieres la sueltas o...

-¿O qué ya te crees hombrecito me golpearas? - habla en tono burlón.

-Es lo que pareces querer ya que no la sueltas.

-Bien, está claro que no podrás con nosotros pero me divertire un poco.

-Claro esta que no tienes los suficientes cojones como para enfrentarte a mi sola.

-¿Eso crees? bien te demostrare que no, aunque tu también podrías disfrutar con nosotros.

Me baja de sus hombros, pero uno de sus amigos me sostiene. Se acerca a Nat, ella me mira y sonríe. Creo que no es momento para reír.

- Pero como no quieres, vamos princesita muéstrame lo que tienes.

-Princesa tu abuela idiota - se acerca enojada.

- No me jodas, a ti te encanta que te llamen asi.

Natalia no espera y le propina un puñetazo en la cara, parece no estar satisfecha porque después le da dos golpes en el abdomen. El colombiano se endereza y le da un puñetazo a Nat pero esta no tarda en recuperarse y le da tres golpes seguido.