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NATALIA

La noche paso rápida abri mis ojos lentamente y parpadee varias veces para acostumbrarme a la luz del sol ya que al quedar mirando la lluvia no corrimos las cortinas, sentí un cuerpo debajo de mi brazo y veo que es el de ella, quito lentamente el brazo que tenia en su cintura y me incorporó lo que puedo para quedar boca arriba nose en que momento puse mi brazo a su cintura, al hacerlo ella se remueve un poco para girar al otro lado, hace unos momentos la tenía tan cerca que podía sentir su respiración la observó se ve tan tranquila y parece un ángel nadie pensaría que tiene un genio de los mil demonios y que me hace explotar a veces. Ya me sentía mucho mejor, me fijé la hora y eran las 8:30 am aun tenia sueño me quede un rato más observándolo, pero igual me levante para ir a traer el desayuno también necesitaba estirarme un poco que estar mucho tiempo acostada igual cansa.

-¿A dónde vas Nat? - se despertó al no sentir mi peso en la cama.

- A traer nuestro desayuno

- Espera tú tienes que hacer reposo iré yo. - trata de levantarse, se veía adorable con los ojos entreabiertos y el pelo revuelto aún así se veía bien.

-No, aparte no me cuesta nada traerlo - Digo enseguida ya que hacia el amague de levantarse.

-Pero tienes que hacer reposo Nat. Es lo que te dijo el medico.

-Ya me siento mejor Albi, además tu has cuidado bien de mi deja que te consienta con el desayuno, vale? - y no es mentira me siento mejor que ayer en parte gracias a sus cuidados.

-Esta bien solo ten cuidado y no es nada lo haría por cualquiera

-Oh si me cuidaré del asesino que esta abajo con un cuchillo. - digo riendo - ya pero yo soy tu novia pero bueno igualmente gracias albi.

-claro claro novia y no tienes un arma para enfrentarlo Nat, deberias buscar una - ¿enserio? Yo me esperaba un insulto de su parte y no, esta loca.

-Si ya tengo - salgo rapido de la cama por si me pega despues de que diga esto - sólo te llevo a ti a la cocina para auyentarlo - salgo riendo y escucho un loca y su risa.

Bajé a la cocina y no habia nadie, estupendo, prepare el cafe de ambas con tostadas, aguacate, zumos de naranja y un poco de fruta que había picada, subí a la habitación y no está supongo que está en el baño.

-Albi ya traje el desayuno. - grite no tan fuerte para que me escuchara.

-Ya salgo estoy en el baño. - esperé a que saliera y nos sentamos a desayunar.

-¿Qué quieres hacer hoy? - pregunte para que no se molestara ya que ayer no hicimos nada.

-Eemm nose, pero de momento tu tienes que seguir reposando, órdenes del doctor.

-Ay por favor es Brasil albi no todos los días venimos aquí - dije imitando su voz.

-Ya pero ayer enfermaste y me preocupe bastante no quiero que te vuelva a pasar nada Natalia, debes cuidarte y si tu no lo haces lo haré yo aunque no quieras. - Sonreí ante eso.

-No me pasará nada ¿si? Tu tranquila, podemos ir a almorazar a un restaurante vegetariano, luego podemos ir a la playa, también al parque acuático y no se ya por la noche vamos a un bar. ¿Que dices?  Pasamos el dia en Brasil te prometo que si me siento mal te lo digo y regresamos si.

-Emmm - hace como que piensa - no me gusta la idea- ¿que no entiendo? El plan es genial y divertido - me encantó -ríe y suspiro- ¿a que hora salimos por nuestra gira brasilera? Pero eso si prometeme que me dirás vale? - me volvió a sacar otra sonrisa, ultimamente me hace reir mucho y sentir agradable su compañía, cada segundo nos entendemos mejor eso es raro aunque por ratos nos odiemos pasa a segundo plano cuando me sonrie.

COMPROMISO || Albalia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora