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NATALIA

Me despierto a las 8:30 am para salir a correr siempre acostumbro a hacerlo aunque este de vacaciones, me volteo a ver a Alba y todavía está durmiendo como una marmota. Tiene el pelo despeinado y la sabana envuelta en su cadera dejandome a la vista sus blancas piernas, yo no puedo creer que aún sea vírgen si es hermosa y pudo haber estado con quien ella quisiera, de verdad flipe cuando me lo contó no sabía si creerle pero si cualquiera podría ya haberse casado con ella o haber tenido relaciones pero no, osea no es que piense que ella sea así pero es normal digo cuando tienes pareja tener relaciones es comun, pensé que tenia algún trauma pero no, me dijo que es por decisión propia y que lo reafirmó cuando Isaac la engaño, quizá ahora puede que entienda un poco a ese cabron el deseo le pudo más que el amor no la supo esperar. Es tan diferente a las mujeres con las que estuve después de Alicia. Ahora estoy casada con ella y aún no hemos estado intimamente juntas, es increíble me levanto con cuidado para no despertarla y le doy un beso en su frente. Me visto para salir a correr pero antes le dejo una notita por si se despierta y no me ve. Salgo del hotel y empiezo a correr y tomar un poco de aire.

Mientras corro trato de no pensar en nada, ni en empresas, ni socios, ni ex nada de nada. Pero el trato quedo en nada por que paso por una tienda de churros y todas esas cosas que sé que le gustan a Albi y pensé si pensé en ella que le gustaría probarlos así que paso para encargarlo y recogerlo cuando venga de regreso claro antes me asegure que vendan sin lactosa no quiero quedar viuda a los dos días de casada jaja, si este mes que pasamos juntas me permitió conocerla más. Cuando voy de regreso me paro en un parquesito a descansar y tomar agua. Escucho silbidos coquetos atras de mi, pero no volteo seguro será algún gillipollas escucho pasos y se me acercan tres chicas, lindas si.

-Hola guapa, ¿tan sola por aqui? - me doy la vuelta y veo a dos rubias con otra morocha, eran lindas, tienen buen cuerpo pero no se, tienen algo que hace que no me llame la atención.

-Bueno digamos que me gusta salir de vez en cuando sola. - trato de sonreir.

-¿Y cómo te llamas? - cuando les diga mi nombre se lanzaran aún más si lo han escuchado, así me eh topado con varias personas convenencieras.

-Natalia Lacunza - y como lo dije, las tres se miraron sorprendidas y luego me miraron con lujuria y para nada discretas.

-¿Tu eres la exitosa empresaria joven de Pamplona? - si estuviera Alba de seguro ya les hubiese dicho que soy pobre o pido limosna, tan solo pensarlo me causa gracia, pero ¿porque no hacerlo un poco?

-Bueno no tan exitosa la empresa está en la quiebra. - sus semblantes cambian a uno más sério, si supieran que la empresa esta en sus mejores momentos.

-Bueno chicas hay que irnos, acuerdense del almuerzo que tenemos. - les habla la morocha, se van porque no hay dinero que sacar.

Las tres me saludan con un "chau, un gusto conocerte", sigo mi camino hasta el hotel, tengo que prepararme para ir a la reunión, en un par de horas llegarán Mari y Sabela.

Cuando abro la puerta me encuentro a Alba que aún duerme. Dichosa de ella, pero bueno yo lo hago porque no quiero vivir en un puente pidiendo limosna y ella agitando el tarrito a mi lado, ahhgg ¿porqué estoy pensando siempre en ella? Me sacudo la cabeza

Termino de ducharme, envuelvo con toalla mi cuerpo para salir, al abrir la puerta me encuentro con un furby despeinado, refregandose el ojo y con el sepillo de dientes en las manos. Cuando me vé tiene que levantar la cabeza por su estatura, esboza una sonrisa y me abraza, me sorprende si, pero creo que no es totalmente consciente y aún sigue durmiendo obviamente se lo correspondía con un beso en su cabeza si supiera lo tierna que luce en estos momentos la suelto para que pueda cambiarme y ella ir al baño.

COMPROMISO || Albalia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora