Efecto Post-Fiesta

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Hablando Pesci

Después de la fiesta de los tíos Sorbet y Gelato varias cosas pasaron. Cuando me salí a jugar con el vecino Carne, adentro del salón ya se había armado la trifulca por un centro de mesa que tironeaban Pros, Buccellati y Tiziano, yo no lo ví pero me contó Melone con lujo de detalle.

Luego como a las 11 de la noche comenzó a hacer frío y nos metimos, Carne regresó con Squalo quien veía con vergüenza a Tiziano todo sucio y despeinado. El baile había comenzado y la mayoría seguían bebiendo; Risotto y Abbacchio peleaban por cosas de hace añisimos pero de la nada lo dejaron de hacer por qué el vecino se vomitó y se fue a una esquina a dormir, llegó el asistente del señor Diavolo y sacó a bailar a nuestro papá, él ni siquiera podía mantener el equilibrio y se le recostaba al pecoso, cosa que le molestó totalmente a Prosciutto que seguia jaloneando a Tiziano de sus extensiones que se desprendieron al tirarlas con fuerza, detrás de ellos huía Buccellati con el centro de mesa y llego donde Narancia para que se lo guardara en lo que iba por Abbacchio a la esquina del salón de fiesta.

Recuerdo haber visto como Pros le gritaba no sé qué cosa a Doppio y tomó su bolso del lugar donde nos sentamos para salir furioso, no tuve el suficiente valor para seguirlo, pero sabía que se dirigía a casa solo. Caray me sorprendió que llegara a la casa caminando un trayecto de 30 minutos en auto.

Volviendo a Risotto, papá seguía hablándole al oído a ese maldito pecoso hasta que llegó Ghiaccio y los separó, gritándole como de costumbre y el Doppio mirando con molestia, después se quitó el zapato y  simuló hablar por teléfono con el señor Diavolo. Ris estaba ahogado en alcohol por lo que ponerlo a manejar implicaba un inminente peligro, así que lo echaron hacia atrás y Formaggio se llevó la camioneta hacia la casa; quisimos despedirnos de los tíos Sorbet y Gelato, pero Illuso los vió besándose y según el aplaudiendo en el baño, no sé por qué se encierran para aplaudir si cuando partieron el pastel lo hicieron en público.

A la mañana siguiente, desperté más temprano que los demás, pero el desayuno no estaba preparado, ni siquiera estaba Pros en la cocina como solía hacer todos los días. Llegando a la sala ví que ahí dormía Ris, cubierto con una cobija y con un balde junto a él por si se le ocurría vomitar.

—Buenos días Pesci— Melone me saludó.

—Oe, Melone ¿Por qué papá no durmió con Prosciutto?

—Por que Risotto estuvo bailando con Doppio, sabes cómo es de posesivo Pros y pues se puso de dramático, te aseguro que no van a aplaudir por un laaaaaaaargo tiempo— respondió, sigo sin entender lo de los aplausos.

—Si esperas que Prosciutto se levante a preparar el desayuno, estás perdiendo el tiempo— ahora llegaba Formaggio que tomó la cartera de Ris y sacaba unos billetes.

—¿Vamos a comer en la calle?— preguntó Melone.

—¿Vamos? Ese dinero lo voy a usar para comprarle comida a mis michines— respondió burlón.

—No seas un bastardo, si no le diremos a Ris que le robas mientras duerme— Ghiaccio también se unía a la discusión.

—Está bien, tomen y vayan por unas empanadas— Formaggio le aventó en la cara unos billetes a Melone y los recogió para después salir a la calle en pijama; su pijama eran sus calzones con una camiseta de un partido político y Crocs del tianguis.

—¿Para qué mandan al Melone a comprar?— gritó enojado Ghiaccio.

—¿Que tiene de malo?— Formaggio se encogió de hombros.

—Su ropa interior tiene hoyos, hubieras mandado a Pesci— Formaggio comenzó a reírse muy fuerte.

—¿De qué tanto hablan?— Illuso se aparecía, estaba algo desaliñado con su cabello lleno de muchos nudos.

La Squadra TercermundistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora