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⇝Capítulo 27.

❝No pienso en toda la desgracia, sino en toda la belleza que aún permanece...❞

—Anne Frank.

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Ha pasado una semana después de todo, la relación con mi hermana se fortaleció más de lo que yo pensaba, jamás había visto ese lado de ella durante el tiempo que viví con ella. En cuanto al ególatra de Jungkook, todo sigue normal sin recordar ese impulso que tuvo esa noche, me daba miedo admitir que me había encantado ese beso, prefiero guardarlo para mí y no volverlo a repetir, sé que de todas formas saldré lastimada de esto. La semana entrante será la graduación, contará con un baile de despedida y la ceremonia donde asistirán mis padres, hace bastante tiempo que no hablo con ellos y menos los veo, quizás he estado al pendiente de otras cosas como aprobar todas las asignaturas y... Jungkook. 

No quería tenerlo en mi mente veinticuatro siete, lo único que podía hacer era alejarme de él para no pensarlo durante tanto tiempo, debía hacer algo para despejarme. Salir de compras con Yuri, pasar por la habitación de Hyun Joo y oírla hablar sobre Dak Ho por horas pero por lo menos estar un rato con ella, y luego llegar al departamento para verlo acostado en el sofá con una bolsa de algas mirando películas en el televisor. Las cosas cambian con el tiempo, antes ni siquiera le prestaba atención a lo que él hacía, ahora lo único que hago es pensar sí estará bien cuando me vaya o pensar en llevarme un paraguas por las dudas de que se le ocurra hacerme alguna maldad con su novia.

— ¡Woo Hee! — Sentí el chasquido de los dedos de Hyun Joo enfrente de mis ojos, estaba estúpidamente mirando hacia la pizarra pensando en cómo se vería Jungkook desde atrás. — Despierta, estoy hablándote hace una hora. — Rio un poco mientras entregaba su examen, ya había entregado mi hoja hace bastante tiempo, sólo quedábamos nosotras y unos chicos al fondo terminando el examen.

— Perdona, tengo la cabeza en otro lado. — Dije mientras me levantaba de mi pupitre y al mismo tiempo tomaba mi mochila, copiando la acción de Hyun Joo, ella comenzó a reír mientras salíamos del salón. 

— Si, en el planeta Jeon Jungkook ¿Verdad? — Comenzó a reír descontroladamente mientras sólo mordía mi labio inferior aguantando la risa, no me parecía una broma de buen gusto. 

Al levantar la vista de mis libros, pasó lo de siempre, pasé por enfrente de Jungkook y sus amigos, junto a su novia y las novias de sus amigos. Parecía pasarla bien mientras se burlaba de los demás alumnos del instituto, eso era lo que arruinaba la personalidad de Jungkook, hacía todo para encajar en algún lugar usando una simple máscara que sólo se caía cuando estábamos solos en el departamento. Era una máscara que simplemente podría quebrarse en cualquier momento, la mitad se dividía entre ese sombrío chico que pasó por varias cosas, el que sólo le hacía daño a los demás para saciar su dolor, y por el otro, estaba ese dulce chico que tenía miedo de mostrar, aunque era su mejor parte.

Él era un buen chico, últimamente sacaba buenas calificaciones y no molestaba a nadie físicamente, eso no le quitaba el hecho de usar la violencia verbal para agredir a los demás, yo sólo pienso en que es imposible sacar ese lado de él. Por mi lado, estoy más que segura de que no iré al baile de despedida, no quisiera arruinar la noche de mi mejor amiga y menos de mi hermana, la sonrisa que tenía en el rostro desaparecía de sólo pensar en las cosas que he hecho mal, la manifestación de mi torpeza no ha vuelto a aparecer por una semana exacta, creo que la tristeza alivia todo lo malo que puedo llegar a causar.