𝙏𝙄𝙀𝙍𝙍𝘼... ¡𝙏𝙍𝘼𝙂𝘼𝙈𝙀! | 𝙟.𝙟𝙠 ©

⇝Capítulo 40.

❝El amor no necesita ser entendido, sólo necesita ser demostrado.❞

—Paulo Coelho.

「Ｔｉｅｒｒａ．．．¡Ｔｒａｇａｍｅ！」

Han pasado cuatro meses desde que empecé la universidad, comencé a estudiar lo que más me gusta hacer, decidí seguir la carrera de chef profesional. Aunque aún trabajo en el mismo restaurante sólo que en el turno de cafetería. Ahora, Hale está mejor económicamente ya que trabaja en los dos turnos conmigo, aunque ya no nos vemos tan seguido.

Hyun Joo ha decidido seguir la carrera de contaduría y Dak Ho viene a visitarla de vez en cuando, obviamente cuando tiene tiempo para escaparse de los entrenamientos. Aún nos juntamos los fines de semana para salir a pasarla bien y distraernos de las cosas que nos pasan, ellos están a punto de hacer un viaje de dos semanas a Ulsan, me invitaron, pero no podré ir porque debo estudiar y trabajar. Son una pareja muy feliz, quizás no les falta mucho para que se prometan la vida entera, yo aún estoy en hiatus por cuestiones de tiempo libre, no he podido conocer a nadie nuevo y por el momento no me interesa, no he querido enamorarme de nadie más por cuestiones obvias.

No he sabido nada de él, principalmente porque no quiero que me lo nombren debido a que los recuerdos inundan mi mente y luego me vuelvo melancólica. Desde el día que lo llamé no he vuelto a saber de él en Seúl o en otra parte, sólo quería eliminar todo recuerdo de él, pero es verdad que el primer amor no se olvida jamás, durante el único año que pasamos juntos, él se burló pero también comprendió mi torpeza.

Mi torpeza aún no se ha ido del todo, es imposible sacar algo que ya tienes desde hace mucho tiempo, creo que la torpeza es parte de mi personalidad, no la cometo tan seguido pero aún está cuando menos la necesito. En este momento estoy llegando a la cafetería para empezar un día más de trabajo, luego del trabajo debo ir a la universidad para terminar un día más de mi vida.

— Buenos días señorita Go. — Sonrío Hale desde la puerta abriéndola para mí, sonreí en forma de agradecimiento y entré saludando a todos en el pasillo.

— Hoy será un gran día Hale. — Grité por el pasillo colocándome el delantal para empezar a hacer los pastelitos más famosos de la cafetería.

— ¿Me guardas un pastelito? — Apoyó su cuerpo contra el marco de la puerta con sus brazos cruzados y la cabeza sobre el marco, sonreí y asentí con la cabeza rápidamente.

Caminé hacia la cocina empezando con el trabajo, saqué cada ingrediente colocándolos sobre la mesa para empezar con los pastelitos, Hale sólo era capaz de mirar lo que hacía sin decir ni una sola palabra, la campana de la puerta principal sonó haciendo sobresaltar a Hale, sonreí de lado y él salió corriendo hacia la sala principal. Una voz muy conocida se hizo presente, quise mirar por la pequeña ventana que me daba vista hacia la caja, sin embargo, sólo pude ver la espalda de Hale debido a mi altura.

Resté importancia al pensar que sólo sería un cliente más, fijé mi mirada sobre la masa y los ingredientes, la melancolía había vuelto sin previo aviso al escuchar mi nombre salir de esa voz. Mis ojos se abrieron con sorpresa y me acerqué hacia la ventana para escuchar la conversación que Hale estaba teniendo con ese chico.

— ¿Sabes dónde está Woo Hee? — Una corriente se liberó por todo mi cuerpo haciendo que mi piel se erizara. — ¿Sigue trabajando aquí?

— Si claro, pero no creo que sea el momento para verla. — Respondió nervioso mientras miraba a otro lado cuidando su espalda. — No creo que sea buena idea.

— Necesito verla. — Estaba perpleja, no sabía si reaccionar o no moverme como lo estaba haciendo antes.

La campanilla de órdenes sonó, eso significaba que de todas maneras debería salir de la cocina para entregar los pedidos. Estaba nerviosa por descubrir quién me buscaba y para qué lo hacía, no todos los días viene un chico a buscarte porque necesita verte. Arreglé rápidamente mi camisa de trabajo junto al delantal, amarré mejor mi coleta y salí con la bandeja a servir los pedidos, apenas pase por el mostrador pude verlo.