Rewrite The Stars ➰ || Alec Lightwood [#2] (COMPLETA)

011. ¿A salvo?

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➰Rewrite The Stars/Capítulo Once.➰

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           Alexander sostenía la piedra que lo ayudaría a encontrar a su parabatai entre sus manos, estaba concentrado en encontrar un recuerdo compartido con él que lo ayudase a encontrarlo, pero los recuerdos pasando por su cabeza como flashes no le permitían retener uno, no le permitían concentrarse.

La imagen de dos manos unidas llegó a su mente, haciendo que se encorvara en la cama, asustando a las dos chicas presentes. Ésta vez vio una versión pequeña de él mismo, con un carcaj lleno de flechas en su espalda, para después observar a una versión pequeña de Jace. Su cabeza se movía a los lados como si quisiese negar, mientras que de su nariz comenzaba a brotar sangre.

Alexander volvió a encorvarse, inclinando su cabeza hacia atrás, y se removía en la cama, como si su cuerpo estuviese hirviendo. Se removía, mientras sostenía la piedra en su mano izquierda, pero no dejaba de removerse, parecía tener una convulsión.

De pronto, la piedra comenzó a dejar de tener aquel brillo amarillento, Alec comenzaba a soltarla. Después de unos segundos, la piedra se resbaló de su mano, cayendo al suelo. Alexander comenzaba a sacudirse más fuerte sobre la cama, mientras que de su nariz seguía saliendo sangre y sus ojos comenzaban a tonarse blancos, los había abierto, pero sólo se veía el color blanco de ellos.

— ¡Alec! —Gritó Isabelle, estaba asustada de cómo estaba perdiendo a su hermano por culpa de una piedra—. ¡Alec!

(...)

—Jace, yo... —Balbuceó el azabache, moviendo su cabeza hacia los lados, como si estuviese buscando algo.

Isabelle se encontraba sentada junto a Alexander, quien seguía inconsciente y ya usaba playera, sosteniendo su mano entre las suyas, lo necesitaba de vuelta. Por otro lado, Magnus se encontraba sentado junto a Izzy, ejerciendo su magia sobre el azabache para intentar traerlo de vuelta.

—No funciona —Dijo la morena en un hilo de voz. El brujo soltó un quejido y dejó de ejercer su magia.

—Lo siento, Isabelle —Le respondió el Gran Brujo de Brooklyn, su tono de voz se escuchaba frustrado, él lo estaba—. El vínculo parabatai es como una correa que une dos almas —Explicó, volviendo a ejercer su magia sobre el hijo mayor de los Lightwood—. Jace y Alec comparten emociones, instintos, fuerza —Siguió hablando, mientras que la chica acariciaba la mano de su hermano mayor—. Es un vínculo angelical. Mi magia no puede hacer mucho —Confesó.

— ¿Y Jace también está así? —Preguntó la chica, observando al brujo con un ceño fruncido, quien dejó de ejercer su magia, una vez más.

—No necesariamente —Respondió el de ojos oscuros, girándose hacia la chica—. Parece que cuando Alec lo llamó —Se giró hacia el mencionado—. Una parte de su alma no regresó —Se subió sus mangas—. Está atascado. Perdido entre él y su parabatai —Volvió a ejercer su magia sobre el azabache, necesitaba regresarlo, por Katia.

—Pero, ¿si Jace trajera esa parte perdida de su alma? —Inquirió la morena, girando su cabeza hacia el brujo.

—Sí, podríamos tener la cura —Respondió el brujo, observando a la chica, pero sin dejar de ejercer su magia en el azabache—. Lo que sea que hagamos, debemos hacerlo rápido.

—Quédate con Alec —Dijo la chica, justo después de que el brujo terminara de hablar. Le lanzó una mirada a su hermano mayor, para después observar al brujo—. Buscaré a Jace —Giró su cabeza hacia su hermano mayor, ella no quería abandonarlo, pero tenía que salvarlo—. Con suerte y también encuentro a Katia.