Este libro no ha terminado, no.
La obesidad es una enfermedad que no se cura, y creo que ya lo dije varias veces. Nos persigue, nos acecha, y podemos llegar a caer en sus redes. No hay que bajar los brazos nunca, o es lo que terminará pasando.
Me acabo de percatar de que no escribo nada acá desde marzo del 2018. Así que ya estamos a casi veinte meses de aquello. Bueno, hagamos un breve recuento de lo transcurrido el año pasado en mi lucha contra la obesidad.
Enero - febrero de 2018: estaba pesando 3 kilos menos de lo que mi nutricionista indicaba, y seguía bajando de peso. Me dijo que dejara de hacer actividad aeróbica, que incorporara más queso en mi dieta, pero que me mantuviera en el plan.
Marzo - abril de 2018: Logré subir 2 kilos y me sentía bien en ese peso. Para la nutricionista estaba bien. Lo que no le decía era que estaba comiendo más de lo que ella indicaba para poder mantenerme ahí y ya no bajar más.
Mayo - junio 2018: Me mantenía en ese peso pero consumí menos carne de lo que hubiera debido en unas semanas que estuve poco en casa, y me puse anémica de nuevo. Empecé a tener palpitaciones y me descompensaba en el gym. Lo abandoné con la intención de regresar cuando me sintiera mejor.
Julio - Agosto de 2018: Sin realizar actividad física, subí el kilo que me faltaba para el peso "recomendado", y uno más. Seguía estando en el margen recomendado en realidad (porque es uno más, uno menos del indicado). Me realicé estudios médicos. Consumí hierro para poder realizarme mi primer cirugía reparadora (anémica no podían operarme) y me realicé estudios cardíacos. Todo bien, las palpitaciones eran a causa de mi estrés. El médico me dio una medicación suave para bajar el ritmo cardíaco (una en realidad indicada para personas con hipertensión) para no tener ningún contratiempo cuando me operara, y con la orden de tomarla solo por unos meses y luego dejarla. Me indicó también que eventualmente saliera a correr.
Septiembre de 2018: Me realicé mi primera cirugía reparadora: la de los brazos (me quedaron super bien, estoy muy contenta con el resultado!). Por supuesto, debía quedarme quieta en casa por un tiempo para recuperarme y no podía retomar el gimnasio. Empecé a trabajar desde casa y a planificar proyectos futuros...
Octubre - diciembre de 2018: Nació Editorial Vanadis. Empecé a enfocarme en mis proyectos, en la publicación del primer libro (además mío). Sabía que debía retomar el gimnasio, pero con suerte lograba salir a trotar de vez en cuando. Empecé a descuidar un poco mis rutinas alimentarias. Subí algún quilito más.
Enero - febrero de 2019: Aunque estaba de vacaciones escolares, estaba enfocada en mis proyectos, me costaba organizarme para que alguien cuidara a mi nena y poder ir al gimnasio (estaba bastante ajustada de dinero también porque estaba invirtiendo mucho en la editorial).
Marzo - junio de 2019: De mal en peor con mis hábitos. Empecé a sufrir cada vez más el reflujo gástrico (me pasa por no alimentarme como debo y acostarme a dormir una siesta después de almorzar). Con intenciones de regresar al gym pero sin concretarlas nunca por preferir quedarme a trabajar en casa (con miles de cosas siempre para hacer).
Julio de 2019: Volví con la nutricionista, 4-5 kilos en total arriba de mi peso recomendado y con muchas cosas que ajustar en mi rutina. He decidido priorizarme, reordenarme. Volví al gym, arreglé mi rutina alimentaria. Ya bajé un kilo y los síntomas del reflujo han desaparecido. Sé que no será difícil regresar al peso objetivo, aunque temo volver a bajar de más. Tendré que confiar en la nutricionista y no volver a hacer ajustes por mi cuenta xD
Así que aquí estamos, de nuevo en el ruedo.
La rutina a veces nos arrastra. Cuesta aprender a ponerse una en primer lugar. Cuando menos nos damos cuenta nos estamos dañando de nuevo...
Los dejo por ahora. Me gustaría que me cuenten cómo han estado ustedes, cuáles han sido sus luchas (si quieren, claro) y que me digan si quieren que les cuente alguna cosa más :) o si quieren fotos actuales, recetas, mi menú actual, etc.
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Mi metamorfosis
Literatura FaktuEsta es mi propia historia, un lugar donde me abro y cuento todo lo que he vivido estando obesa y el proceso para superar esta enfermedad, algo que hoy al fin puedo decir que he logrado, aunque el fantasma sigue allí y me seguirá acompañando de por...