Mi Querido Acosador • [Kookgi]

Navide

En el momento que el primer rayo de sol se coló por la ventana pude apreciar lo lindo que se veía plácidamente dormido, sus pequeñas pequitas bajo sus ojos eran como pequeñas estrellitas adornando su hermoso rostro.

Yo levanté mi mano quitando los mechones de cabello que cubrían parte de él permitiéndome verlo un poco más, sintiendo como los latidos de mi corazón se aceleraba, traté de moverme sintiendo como su piernas estaba por...¡Mierda! Tenía una erección en mi entrepierna, joder, como sí mi cuerpo no estuviera al tanto de lo mucho que hicimos anoche. Se supone que yo debía estar cansado, pero en ese momento tenía una dura erección y ver sus  claviculas desnudas sólo mostrando mís marcas no me ayudaban en nada, iba a ir al baño a ducharme con agua helada, pero su voz me detuvo.

-¿Kookie?

Buenos dias, bebé - traté de sonreírle.

-Buenos días ¿Sucede algo? Te noto raro.

-No... no pasa nada.

-¿Estas...¡oh dios!- hizo una cara de asombro cuando su rodilla tocó mi duro miembro.

-Lo siento, yo...

-Está bien, si quieres puedo ayudarte con eso.

En ese instante sentí que mis genitales gritaron un "si" pero yo actué lo más natural posible tratando de disimular aunque por dentro me estaba muriendo de la ganas por cogermelo.

-Bebé, no es necesario, además necesitas descansar después de anoche.

-No te niego que mi espalda duele un poco, pero puedo darte una mamada si quieres, un orgasmo en la mañana no te caería mal.

Dios, ¿Dónde estaba este chico que nunca lo había visto? Ah, ya se, al lado de mi habitación, fisgoneando.

-Vale.

El sonrió quitando la sábana de su cuerpo dejando a la vista su hermosa piel pálida y lisa, quería tomarlo en ese instante contra el respaldar de la cama, profanarlo mientras...

-Cariño hazme espacio.

-¡Ah, si!

Abrí mis piernas viendo como él se acomodaba con su linda carita. Quité la sábana y al instante mi pene golpeó mi vientre tan duro como roca y el lanzó una risita al aire.

Me sentí avergonzado, pero ese pensamiento se esfumó al instante que el tomó mi miembro entre sus manos sacando la lengua para tocar la punta con la punta de mi falo, entonces pude sentir su saliva hacer contacto cuando ingresó la mitad en su boca abultado sus mejillas metiendo más de mi miembro. Lancé un gemido al aire enderezando mis piernas  al momento que mis dedos se deslizaban en la sábana suave, pero no tan suave como sus labios empezando a chupar más mi pene mientras jadeaba para mí y succionaba tanto como quería. Sacó toda la extensión en un instante tomando un poco de aire  pero no duró mucho por que al instante ya estaba desapareciendo de nuevo en su boca cual dios dando la mejor mamada que pude haber sentido.

-¿Te gusta?

-Me encan... ah, joder, sigue asi, amor.

El siguió chupando toda la extensión mediante sentía como las venas se me hinchaban más logrando que el semen preseminal cayera en su boca.

-Estas muy bueno, Kookie.

-Sólo sigue asi, por favor, ah dios - mis gemidos eran audibles, pero no me importaba ya que no era la primera vez que él lo escuchaba y supongo que para él era mejor puesto que era posible que se sintiera bien de saber que me estaba complaciendo.

Sostuve sus cabellos rogando más contacto sintiendo como mi mano subía y bajaba y mi miembro disfrutaba de la sensación de poder profanar esa linda boquita.

Definitivamente no podía pedir más con Yoongi, él se estaba convirtiendo en algo mucho más allá que el placer que sentí al momento que me corrí en su cara. El apuñó el rostro cuando lo saqué de su boca y lo jalé depositando todo mi semen en su rostro, mostrándome asi una imagen muy pervertida, pero no dejaba de ser lindo por que se trataba de él.

El se sentó limpiándose el rostro y empezando a reír.

-Inesperado final.

-Soy una caja de sorpresas, déjame limpiarte.

-Asi veo - respondió mientras me acercaba a el tomando papel higiénico de la mesita de noche empezando a limpiar aquellas pequitas que estaba viendo hacia un rato manchadas al igual que sus pestañas y su nariz ni se diga.

-Ve a bañarte si quieres, yo prepararé el desayuno.

-Vale - fue lo último que dijo para levantarse y entonces le di una mirada a sus lindas curvas notando como aún las marcas de mis dedos reposaban en sus caderas y me arrepentí de haber sido un animal una noche antes con él, pues él para mí era como un delicado terciopelo.

Salí de la habitación después que me vestí con alguna ropa de el hacia la cocina.

Al parecer Yoongi tenía muchos secretos de los cuales pronto iba a saber y uno de esos es que en su antigua cuidad natal tenía una casa que fue herencia de su hermano.

Sólo espero que él sea sincero conmigo y empecemos algo juntos, aunque bueno, eso ya lo teníamos desde antes, pero yo quería algo formal al igual que mis sentimientos quería que tomáramos una nuevo rumbo.

Todo lo que quería de el  eran esas cosas cotidianas que toda pareja tenía, el olor de sus cuerpo, saber lo que él pensaba, de cualquier cosa, de él, de mí, de nuestro entorno. Que nos miráramos más allá de la apariencia física, que el siempre me extrañara con pasión y que el placer que ambos experimentaramos fuese otro signo de libertad...