Amor de verano

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Puede que el destino te lleve a un cruce de caminos, pero eres tú el que decide la dirección de tu vida.

10 años atrás...

Pasaron las semanas, los meses y mi panza fue creciendo y mi vida fue acomodándose, mis amigas me acompañaban a todas las consultas, aunque no sé si para ver al doctor Marcos o por mí, pero no se perdían una.

_Clara ¿ya te vas?

_Hola doctor si ya me iba

_Marcos me llamo Marcos

_Marcos

_ ¿Te llevo a algún lugar?

_Si, hoy vine caminando, pero esta por llover

_Vamos sube.

Subí a su auto y fuimos hacia el centro.

Tienes hambre, salí de una guardia de treinta y seis horas y muero de hambre, quieres acompañarme a comer una hamburguesa.

_Muero por una hamburguesa

Fue tan agradable estar con un hombre y compartir un momento hacía tiempo que no me sentía bien.

_Clara puedo preguntar que paso con el papa del bebe

_Él se fue, me dejo plantada y simplemente se esfumo.

_ ¿Sabe del bebe?

_No, nunca llego a saberlo y aunque quisiera decirle el solo desapareció.

Cuando salimos llovía a cantaros, Marcos tomo mi mano y la quité como si me quemara, sé que sonara un poco idiota, pero me largué a llorar, no sé si fueron las hormonas o que lo extrañaba pero me sentí mal, sentí que engañaba su memoria y solo lloré.

_Lo siento, solo te quería llevar al auto.

_Yo, nunca... yo no

Y ahí en plena lluvia él me abrazó curando de a poco mi alma.

Entramos al auto y me llevó a mi departamento, lucia preocupado, su pelo estaba muy oscuro al mojarse y su ropa pegada a su cuerpo, lucia bien.

_Deja de mirarme así, pareces un gatito herido.

_Deben ser mis hormonas, perdón por reaccionar así

Tomo mi barbilla y la levantó para que lo mire directamente a los ojos

_Clara, eres maravillosa, desde el día que te conocí supe que ibas a ser alguien importante en mi vida, déjame cuidarte, déjame estar a tu lado, si no quieres nada más, solo déjame ser tu amigo. Quiero ser tu persona en el mundo, que me llames a cualquier hora para hablar de la novela o de algún libro que leíste, quiero me consultes sobre ropa para él bebe o que me lleves a comprar una cuna, me permitirías estar a tu lado con tus reglas, con tus puntos yo soy feliz solo de ser parte de tus días.

Viste esos momentos que quedan en tu memoria para siempre, a veces son momentos, frases o personas, bueno esté fue un combo de todo, la lluvia, mis hormonas y Marcos todo empapado declarándose, nunca lo podría olvidar.

_Podría intentarlo

_Es una buena respuesta, ¿te acompaño a la puerta?

_No gracias, Marcos, gracias por todo.

Le di un beso en la mejilla y el cerró los ojos

_Podrías mañana acompañarme a comprarle algunas cosas, llevo 28 semanas y no tengo casi nada.

Su sonrisa fue sincera y vi que sus ojos brillaban de emoción creo que me contagio un poco, porque sonreíamos los dos como si un gran peso se nos resbalara entre los dedos.

_Sería un honor, paso por ti a las cinco.

Marcos se convirtió en esa persona, hablábamos todos los días por teléfono y cuando él no estaba de guardia me acompañaba a comprare cosas al bebe, estuvo en el parto y con mi padre se turnaron a cuidarnos, en el momento que tuve a mi bebe en los brazos entendí lo que es realmente el amor, la necesidad de protección y de paz que puede darte una persona la sentí con mi hijo en mis brazos.

_Es hermoso, ¿Cómo se va a llamar?

_Bautista,

_Es un lindo nombre

_Hola Bautista bienvenido a la familia hijo, eres lo más maravilloso que me sucedió y prometo amarte, protegerte y siempre hacerte feliz.

Los años pasaron y fuimos cada vez más unidos, el día que Bautista tuvo un ataque de alergia yo me refugié en sus brazos y él me beso, lo dejé entrar, aunque lo quise con todo mi corazón creo que nunca me entregué por completo, no puedo explicarlo, pero cuando le entregas el corazón a alguien cuesta volver a entregarlo y cuando Marcos me conoció yo no era la misma y mi corazón ya no estaba. Lo intenté mucho, pero Marcos no era Alex y al verlo con su compañera a los besos me hizo darme cuenta de que no nos amábamos y que se merecía a alguien que si luchara por su amor.