Campamento para gordos.

Capítulo veintitrés.

Jimin había aceptado que Hoseok lo guiara hasta donde se encontraba Yoongi, mientras más se acercaban al lugar, más nervioso se encontraba, si todo lo que decía Hoseok era cierto, sin dudas se encontraría muy decepcionado, realmente lo odiaría aunque sea un poco, pero por más que fuese una parte de él rogaba que todo aquello fuera simplemente una mentira, una muy pesada broma o cualquier cosa, menos la realidad, Jimin ya había tenido bastante de eso durante los últimos meses.

—No puedes interrumpirlo, la persona que se encarga de darle clases es muy... Obtusa si así podría decirse y Yoongi es alguien que pierde la concentración con demasiada facilidad, solo dedícate a verlo desde aquí. —dijo Hoseok sin mirar a Jimin, este tenía sus ojos posados sobre Yoongi, quien a la vista de cualquiera se veía muy sumido en el papel de estudiante, aquello no pasaba desapercibido para Jimin, quien sintió un dolor punzante en su corazón, entonces comprendió que Junmyeon tenía la razón, era un gran problema que le gustara Yoongi cuando sus planes son acabar con el campamento, ahora no actuaba en contra de Soo Man, si no de Min Yoongi— él está aquí desde que recibió la noticia de mi padre, algo me dice que no quiere afrontar la realidad del todo y por eso se mata estudiando, llevando todos sus pensamientos únicamente a esto, no creas que me hace feliz, todo lo contrario, Jimin por favor confía en mi, sé que por ser hijo de Lee Soo Man soy el menos indicado, sin embargo puedes mirarlo de esta forma, yo fui obeso como tú y sufrí lo mismo que tú, podría decirse que peor, yo solo tuve que afrontarlo sabiendo que mi padre no me apoyaba y más bien estaba en mi contra, él simplemente decidió encargarle mi caso a la persona que mejor hacia el trabajo sucio en el campamento y para rematar me terminé enamorando sin ser correspondido. Aunque esto ahora puede significar traición para Yoongi, el que tú quieras actuar en contra de todo este campamento y revelar toda la verdad es más bien su salvación y con el tiempo aprenderá no solo a vivir con ello, si no que se dará cuenta que fue lo mejor no solo para él, si no para todos.

—¿No puedo hablar con él por última vez?, en verdad quiero convencerlo de no aceptar manejar el campamento, si no lo logro uniré fuerzas contigo, es una oportunidad invaluable.

Jimin se sentía convencido de las palabras de Hoseok, además de que le daba toda la razón, pero su persistente corazón se negaba a dejar a Yoongi atrás hundiéndose en la basura que había creado Soo Man.

—Está bien, ¿si?, sólo espera que termine su clase, faltan cinco minutos cuando mucho, puedes esperar sentado, yo tengo asuntos que atender, ahora si me disculpas... No olvides comunicarte conmigo por medio del celular que te di, es muy importante saber tu respuesta.

Porque si, Hoseok le había dado un celular a Jimin hace dos días, por ahí logró comunicarse con sus padres y aquello le sumó puntos al contrario, había confirmado que no era igual a su padre.

Tras la espera pensó en Junmyeon y el por qué jamás le había dicho cómo había sido el primer obeso al que debía motivar, o si fue victima de una prueba al igual que él, muchas cosas no lograban encajar, también recordó que era extraño que no reaccionó tan sorprendido cuando lo vio besándose con Yoongi, no le dio más vueltas al asunto porque el pálido salía de la habitación de estudio con unos papeles y un lápiz en manos, su rostro lucía con una sorprendente naturalidad, aquella cambió notablemente cuando su mirada se encontró con él, eso lo hizo sentirse ofendido.

—¿Qué haces aquí?, ¿Quién te ha traído? —Preguntó Yoongi alterándose un poco, eso asustó a Jimin un poco.

—¿Podrías calmarte?, me ha traído alguien que me vio preocupado por ti, muy diferente a ti, ser egoísta que dice gustar de mi y desaparecer de la nada, eres un desgraciado, piensas solo en ti, en los beneficios estúpidos que te traerá llevar la administración del campamento cuando es realmente estúpido, sabes de mi y mis planes, ¿piensas hacerme lo mismo que Soo Man para callarme la boca?