Volvería Por Ti - Chriserick (Segunda Parte)

Capítulo 11

Fue un gran golpe escuchar todo aquello, si a mí me dolía el solo hecho de pensarlo, no me imaginaba lo que le dolía a él que fue quien lo vivió.

- ¿Y si comenzamos de nuevo? No sé, algo más lindo quizás - propuse.

- Lo intentamos, no funcionó.

- Pero ahora será distinto, te juro que evitaré ser tan idiota, seré más comprensivo, no te lastimaré.

- Cuando estuve en la cárcel le pedí a mi mamá que se deshaga del anillo de compromiso, no lo hizo - contó.

- ¿No?

- No, pero te lo voy a devolver, no me trae buenos recuerdos.

- Yo no lo quiero, puedes hacer con el lo que estimes conveniente.

- Perfecto. Me tengo que ir - dijo levantándose.

Me paré de inmediato provocando que choque en mi cuerpo, posé mi mano en su espalda pegándolo a mi con mucha delicadeza.

- Esta es tu casa, no es la misma sin ti, sin tus berrinches, sin tus risas...tienes que volver - dije bajo.

- Estamos tranquilos, no me hagas hacer una estupidez.

- Te quiero, bebé.

- Ya no lo soy.

- Te voy a recuperar y si mi papá se atrevió a hacerte eso te juro que no me quedaré callado.

Pasé mi mano por su cara, su mirada estaba llena de dudas y aún así no me detuve.

Atrapé sus labios rápidamente antes de que se pudiera apartar, y aunque sus manos apretaran con gran fuerza mis brazos, no lo soltaría tan fácil.

Bajé mi mano hasta su parte trasera, ese fue motivo suficiente para que me aparte de inmediato.

- Antes esto te lo hubiera pasado, ahora no eres nadie y no quiero que me toques así - exigió.

- Perdóname, es que...

- Sigues siendo igual, yo no quiero volver a lo mismo. Entiende que no soy igual que antes.

- Te puedo ayudar.

- ¿Para que me trates como la poca cosa que me hacías sentir?

- No me refiero a dinero, eso no interesa - dije.

- ¿No interesa?

- Claro que no, en estos momentos me importas más tú.

- Deja todo por mi - respondió.

- ¿Cómo? - pregunté perdido.

- Quieres demostrarme un cambio, hazlo. Deja todo y empezamos juntos desde abajo - contestó.

Veía seriedad en lo que pedía, miré a mi alrededor todo lo que con trabajo logré formar y por un momento quise imaginar una vida sin todo esto pero no pude.

- Mi vida es esta, lo sabes - dije.

- Y yo no encajo aquí, quédate solo - terminó por decir.

Pasó por mi lado sin ser agresivo a diferencia de las ocasiones anteriores, quería retenerlo y no sabía cómo lograrlo.

- Erick - llamé.

Se detuvo girando su cuerpo, esos ojos verdes parecían intimidar todo en mi.

- Ojalá que cuando te des cuenta de las cosas tu papá no haya acabado contigo, sería una lástima por ti porque sentirás lo que es estar solo y ahí te vas a acordar de mí.

Esperé a que salga, sus palabras me dejaron totalmente paralizado, no entendía por completo ese odio que había entre mi padre y Erick, estaba en medio de ellos sin saber que hacer.

- ¿Mamá? - hablé a través del celular.

- Mi vida, dime.

- ¿Puedes venir?

- ¿Pasó algo? ¿Quieres que llame a tu papá?

- No, no le digas nada. Necesito que vengas, por favor toma un vuelo o algo - pedí.

- ¿Estás llorando? Christopher mi vida, dime qué te pasó - pidió.

Corté la llamada sintiendo como cada lágrima caía, realmente estaba solo aquí.